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02 mayo 2020

IIGM: "Alianzas diabólicas" y rusofobía


    Caricatura original de Sputnik


por Tito Andino U.


Introducción

Estamos celebrando 75 años de la derrota del nazi-fascismo y eso es lo que importa a pesar de las controversias del presente.

La historia de la guerra no es tan simple como pretender calificar a unos de "buenos" y a otros de "malos", pero en ocasiones si que existieron causas justas para detener la maldad humana, en ese sentido el nazismo fue intrínsecamente malvado ya que pretendió crear un nuevo orden basado en la supremacía racial y a costa de los "subhombres" (untermensch); y, en eso se diferencia con el totalitarismo soviético de Stalin, al que se denomina estalinismo, cuya ideología política también pretendió, a sangre y fuego, imponer una supuesta igualdad social, cosa que nunca se consiguió. El comunismo, en ese sentido, fue un rotundo fracaso social.

Pero, no estamos aquí para hablar de ideologías, sino de las consecuencias de la política europea en los albores de la segunda guerra mundial. Hablar de "buenos" y de "malos" sigue siendo relativo, ya que tal calificativo proviene de la propaganda de los bandos en disputa. 

La única verdad es que la segunda guerra mundial fue la continuación de la Gran Guerra Imperialista de 1914-1918, en una tregua que forjó el surgimiento de terribles corrientes ideológicas (fascismo y comunismo).  Tomando en cuenta que las guerras son un gran negocio, desagradable eso sí, que deja mucho, mucho dinero, lo mismo podemos decir de la política.

La función del historiador es simple, no está para realizar proselitismo, a ningún bando, se basa en la ciencia de la historia, a través de sus innumerables recursos como la historiografía, única que permite desvelar la verdad, o al menos parte de ella.

En el presente, por cuestiones de pura estretegia, se implementan aspectos ideológicos del pasado. La globalización es meramente un aspecto económico, bajo cobijo ideológico, claro está. Hoy vivimos un "estado de guerra económico" entre grandes superpotencias: Estados Unidos, China y Rusia. 

En esas circunstancias, para la mentalidad de Occidente, dominada por los Estados Unidos y la OTAN, hoy tenemos al gran "enemigo" reencarnado en Rusia, para desgracia de quienes siguen viendo comunistas hasta en la sopa, no lo es; al contrario la Rusia moderna de Putin es tan capitalista que se enfrenta en esa "guerra" económica con los Estados Unidos por abrirse camino en los mercados internacionales, lo mismo sucede con el, "formalmente" estado comunista de la República Popular de China, que de "comunista" solo tiene al Partido (que controla el estado), siendo quizá en este preciso momento la mayor potencia económica capitalista, industrial y financiera del mundo, con el perdón de sus detractores estadounidenses.


Dos caricaturas. la primera, propaganda alemana en la IIGM con el clásico tema del bolchevismo acechando el mundo. La segunda data de 2019, es un intento de copia de la anterior, fue publicada por el medio británico The Guardian, como se aprecia es una caricatura en contra de Putin y de Rusia.


Hasta hace no mucho era muy popular el "revisionismo", supuestamente "histórico" de la segunda guerra mundial,  demostrado quedó que esa "revisión" no era más que propaganda del neonazismo y de círculos de la extrema derecha mundial. Ahora tenemos un nuevo tipo de "revisionismo" al frente del gobierno de los Estados Unidos, que intenta reescribir la historia de la contienda con una nueva versión 'oficial' para la población occidental. Una reciente demostración de hipocresía política ha sido, bajo influencia de la OTAN, la declaración del Parlamento Europeo (septiembre 2019) calificando el Pacto de No Agresión germano- soviético de 1939 como el camino que allanó el estallido de la guerra. En otras palabras, la tácita acusación de que la Alemania Nazi se alió a la Unión Soviética  para provocarla. 

Esto no tiene nada que ver con la historia, sino con la política internacional superditada a los mercados de dominación económica. Es decir, cuestiones para nada fundamentadas bajo parámetros históricos. 

Esta investigación no es apología soviética, ni rusa, ni es una posición anti-estadounidense, es historia documentada y objetiva. Algunos siguen calificando de "idiotas útiles", por intentar "blanquear" a Stalin, a quienes se basan en la ciencia de la historia para refutar tesis de reciente aparición. Me parece que "tontos útiles" han sido siempre aquellos que, sin tener donde caerse muertos (literalmente), aplauden el totalitarismo de ultraderecha, inclinándose ante quienes les roban y explotan en su cara.  

Por sentado, los soviéticos tampoco fueron los "buenos" de la película. Claro que no, en aquellos tiempos rondaba el espectro de la política internacionalista de Lenin, "La Revolución Bolchevique" o una "revolución mundial" que, en teoría, debía llevarse a toda Europa, conforme la doctrina de la Internacional Comunista o Komintern (El 4 de marzo de 1919 se fundó la Tercera Internacional para propiciar la "revolución mundial"). Sin embargo, Stalin suprimió esa doctrina cuando la URSS fue invadida por los nazis, el Komintern fue abolido, el dictador declaró abiertamente que se renunciaba a cualquier intento de socavar el orden de las democracias occidentales, a partir de ese momento los obreros y partidos comunistas en Europa debían valerse por sí mismos y mediante el sistema de la democracia participativa para acceder al poder. 


Pacto de no Agresión Germano-Soviético (1939)




El daño histórico de la URSS quedará marcado por siempre, a pesar de las explicaciones y los motivos que le llevaron a pactar con Hitler. No se puede desconocer que la URSS ocupó una parte de Polonia tras la invasión alemana, encontrándose en la famosa línea Brest-Litovsk. Tampoco hay razones para "ocultar" que los soviéticos invadieron Finlandia y se anexaron los estados bálticos a partir del pacto con los nazis. 

No obstante, conociendo la mentalidad del dictador Stalin, no cabe duda que esa era su intención mucho antes de pactar con Alemania, al fin y al cabo aquellos territorios habían sido parte del Imperio Ruso en continua disputa y/o compartidos con el Imperio Alemán. Los planes soviéticos comtemplarían esa expansión, incluso, sin que mediara alguna alianza o pacto de seguridad con Occidente. Tanto Lenin como Stalin demostrarían que no estaban para políticas de apaciguamiento en los territorios que históricamente consideraban parte de Rusia y del naciente imperio soviético

Stalin no era solo un dictador, era sanguinario, calificado de monstruo mucho antes de que Hitler irrumpiera en la escena política de Europa advirtiendo que llevaría a cabo el "Lebensraum". Hitler quería la guerra y su objetivo eran los territorios del Este y la única forma de lograrlo era contando con la pasividad o neutralidad de Occidente. 

Técnicamente, iniciada la guerra en 1939, británicos y franceses bien pudieron haber fulminado a Alemania sin necesidad de abrir un frente oriental. Y, existe otro razonamiento, ya abordado en otras ponencias. ¿Recuerdan quiénes financiaron a Hitler para la toma del poder en Alemania o les viene a la memoria quiénes financiaron la guerra de Hitler

Aún explicado el caso (por ejemplo, en 80 años atrás ... Mito y realidad del pacto Hitler-Stalin), el hermetismo característico de la era del comunismo soviético no ayudó en nada. Tuvimos que esperar el año 1989 para que la actual Federación Rusa reconociera la existencia del protocolo secreto firmado con los nazis sobre las zonas de influencia en Europa Oriental, es decir, un acto por el cual quedó marcado el destino de Polonia, Lituania, Letonia, Estonia y Finlandia.




En la foto de arriba, los tanques soviéticos llegan al punto convenido que ya ha sido tomado por los alemanes (Brest Litovsk); abajo, las tropas de los dos ejércitos intercambian saludos (22 sep. 1939)

La ocupación soviética de Polonia tuvo lugar desde el 17 de septiembre de 1939, (y hablamos de ocupación porque una invasión propiamente no tuvo lugar, dada la escasa resistencia polaca). El 22 de septiembre, alemanes y soviéticos coincidieron en la famosa línea Brest-Litovsk, en ese tiempo territorio polaco denominado Brześć Litewski (actual Bielorrusia). Es altamente recomendable que el lector repasara el Tratado de Brest-Litovsk (oficialmente Paz de Brest-Litovsk), del 3 de marzo de 1918, entre el Imperio alemán, Bulgaria, el Imperio Austro-Húngaro, el Imperio Otomano y la Rusia soviética. Por el Tratado Rusia renunciaba a su soberanía territorial en suelos que luego serían parte de Finlandia, Polonia, Estonia, Letonia, Curlandia, Lituania, Ucrania y Besarabia, tras su firma pasaron a ser controlados y explotados económicamente por los Imperios Centrales. La Gran Guerra continuaba en ese momento en el Frente Occidental​.

¿Puede existir un argumento jurídico internacional para que el Tratado de Brest-Litovsk quedara anulado tras la derrota alemana en la Primera Guerra Mundial? Legalmente es factible, toda anexión territorial mediante el uso de la fuerza o guerra de agresión, al menos en teoría, está sancionada (prohibida) por el Derecho Internacional. Brest-Litovsk fue producto de la imposición de la fuerza militar alemana que ocupaba esas regiones y que en el fondo pretendía establecer un estado amortiguador (colchón) entre Alemania y Rusia. Esa presunta legalidad dejó de tener vigencia legal al finalizar la contienda con la derrota y abdicación del Kaiser alemán. Citemos un ejemplo, Bielorussia fue ocupada por el Imperio Alemán por las armas entre 1917 y 1918, como efecto de la rendición germana se proclamó la República Popular Bielorrusa, al poco llegarían los soviets... y los polacos... En el caso de Bielorussia, en 1939 fue integramente ocupada por la URSS tras su entrada en Polonia (septiembre 1939) y la expulsión de las fuerzas polacas de esos territorios. 

Sería interminable hablar de todas las repúblicas bálticas, de Finlandia, etc,. La derrota alemana de 1918 dejó sin efecto el Tratado de Brest-Litovsk, dando paso al Tratado de Versalles de 1919. Todas las pérdidas territoriales de Rusia en la Gran Guerra serían recuperadas en 1940, a excepción de los territorios que conservaron Finlandia y la sucesora del Imperio Otomano, Turquía. Polonia no existía como estado independiente hasta luego del proceso de paz (Tratado de Versalles) que puso fin a la primera guerra mundial y "reordenó" el territorio de Europa. Durante la Gran Guerra, el territorio polaco estaba dividido entre las potencias imperiales de la época: Imperio Austro-Húngaro, Imperio Alemán e Imperio Ruso.


 



El general alemán Heinz Guderian y el general ruso Semyon Krivoshein observan el desfile en Brest-Litovsk 

Volvamos a lo principal. El Pacto de No Agresión Germano-Soviético, Molotov-Ribbentrop, Pacto Stalin-Hitler o nazi-soviético, de agosto de 1939, como gusten denominarlo, se cumplió, los actores se pusieron en marcha con la invasión de Polonia, facilitó que alemanes y soviéticos se encontraran en la línea Brest-Litovsk, el 22 de septiembre de 1939. El general Heinz Guderian y el general ruso Semyon Krivoshein brindaron juntos, el ruso invitó a los alemanes a visitar Moscú, les deseó una rápida victoria sobre la Inglaterra capitalista, incluso alemanes y soviéticos realizaron un desfile en Brest celebrando el acontecimiento. Salvo algún "comunista" moderno, nadie niega aquello.

Pero, ¿fue una celebración de la victoria sobre los polacos?, el asunto es discutible. Más que evidente, se cumplió el pacto con la demarcación de la zona de influencia de esas potencias, con desfile incluido, organizado por los alemanes y presidido por Guderian, observándose la participación de  tropas soviéticas junto a los alemanes. Utilizar el término "complicidad" entre las dos potencias totalitaristas de la época es discutible al momento de analizar las circunstancias históricas y legales de los tratados, como el de Brest-Litovsk, en que Rusia hizo concesiones territoriales a las Potencias Centrales para retirarse del conflicto, un tiempo en que, recalcamos, Polonia no existía como entidad soberana y territorial. 

La historia nos demuestra que la "complicidad" no fue exclusiva de soviéticos y nazis. Existen probados antecedentes del por qué se llegó a esa aberración ideológica entre nazis (ultraderechistas y anti-soviéticos) y los odiados bolcheviques que tanto aterraba a las potencias occidentales (británicos, franceses y al lejano Estados Unidos). 

Las potencias occidentales anhelaban (y apoyaban secretamente) que los alemanes destruyeran a los soviéticos militarmente y éstos últimos consiguieron ganar tiempo para prepararse del inminente ataque. Desde esta perspectiva -con irrefutables e innumerables recursos historiográficos- debemos analizar, con sana crítica y sin apasionamientos el tristemente célebre pacto. Eso es, "Pacto", no significó una alianza militar, ni un tratado de paz entre nazis y comunistas, era lo que dice su título "Pacto de No Agresión", como quedó explicado en anteriores ponencias (referencias a pie de página).

Es tiempo que apreciemos la otra cara de la moneda. Ya que el mundo está "horrorizado" con el pacto Molotov-Ribbentrop de 1939 (y en cierto sentido es entendible); ¿qué pasa con los Acuerdos entre Aliados, es decir, de los Estados Unidos y Reino Unido con la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial y mediata postguerra? Citemos ejemplos: La Conferencia de Moscú 1942, Conferencia de Casablanca enero 1943 (los soviéticos fueron invitados pero no asistieron), Conferencia de Teherán 1943, la Conferencia de Yalta (febrero 1945) que entre otras cosas divide y cede el control de la tercera parte de Alemania a la URSS; y, la Conferencia de Potsdam en julio-agosto 1945. Todas esenciales para acabar con el nazismo. ¿Deberían ser contempladas como complicidad con el "enemigo"? Si nos ceñimos a la "lógica política" actual de Occidente, haberse aliado con los soviéticos debe ser considerado una aberración mayúscula

La Conferencia de Potsdam, firmado en la inmediata posguerra, 3 de agosto de 1945  entre Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Soviética, ratificó el reparto de Alemania, la ocupación militar, nuevas fronteras en territorios alemanes del este, desmilitarización de Alemania, reparaciones de guerra, juzgamiento a los criminales de guerra. Ese Acuerdo no fue un Tratado de Paz, conforme el Derecho internacional y curiosamente Francia fue marginada de Potsdam.​







Previamente, el 25 de abril de 1945 en el Río Elba, fuerzas estadounidenses se dieron la mano, se abrazaron, festejaron, desfilaron, bebieron junto a sus "camaradas" soviéticos en las cercanías de Torgau (Alemania). Ese episodio histórico es conocido como el "Día del Elba". El encuentro no fue casual, en las últimas ofensivas del frente occidental hacia las orillas del río Elba estaba previsto el encuentro con el Ejército Rojo. Eso nos recordará que también, conforme otro pacto, nazis y soviéticos se encontraron en la antigua línea Brest Litovsk. No es lo mismo, ya que una supuestamente era para desatar la guerra y la otra para poner fin a la guerra, las actitudes son las mismas. Todas esas operaciones de los Aliados en los dos frentes fueron coordinadas conforme las Conferencias previas entre Roosevelt, Churchill y Stalin y se denominó Liberación de Europa.

Las famosas fotos fueron publicadas y recorrieron el mundo. En Moscú se celebró como un fatídico día para la Alemania nazi, hasta hubo salvas de artillería, en New York las celebraciones se realizaron en Times Square con motivos oficiales, ya que las fuerzas nazis dejaron de ser operativas, "Estados Unidos y la Unión Soviética juntos pusieron el último clavo en el ataúd del Tercer Reich". El llamado "espíritu del Elba" es recordado siempre en Rusia cada 25 de abril como símbolo de cooperación entre Estados Unidos y la URSS

En el conocido Cementerio Nacional de Arlington, alrededor de Washington D.C. podemos encontrar el monumento denominado "El espíritu del Elba", cada año hay ceremonias conmemorativas, participan veteranos de EEUU y de la extinta URSS (incluso solían asistir diplomáticos de Rusia). Esos actos deberían llamar a la reflexión, hubo un tiempo en que los dos países fueron aliados y que las "lágrima de cocodrilo" actuales no son otra cosa que hipócritas cuestionamientos político-ideológicos de los Estados Unidos y sus aliados (OTAN) por tratar de imponer su predominio económico.


CRONOLOGÍA

Si el lector mantiene dudas, presentamos una cronología de hechos que concluyeron con el "Pacto Germano Soviético de No Agresión" de 1939.

- Los nazis asumen el poder (1933) e inician la violación del Tratado de Rapallo en 1922 suscrito por Alemania y la Rusia Soviética, se desata una campaña contra los representantes diplomáticos de la URSS y periódicos ataques a legaciones soviéticas en Alemania.
- Previamente, Hitler "avisó" desde 1925 (Mein Kampf) a los diplomáticos de Moscú el destino que les espera a los eslavos "untermenschen" (sub-humanos): esclavitud o muerte. Las tierras del Este hasta los Montes Urales deben ser tierras alemanas (Lebensraum).


- En 1933, la URSS plantea en secreto a las potencias occidentales la posibilidad de restablecer la entente antialemana de la Primera Guerra Mundial, así  da inicio la famosa política de contención e incluso de preparación para la nueva guerra (de fracasar la primera opción).
- A fines de 1933, la URSS anuncia oficialmente la nueva política de seguridad colectiva y asistencia mutua contra la Alemania nazi. Ese mismo año  Maxim Litvinov, Comisario del Pueblo para Asuntos Exteriores de la Unión Soviética, visita Estados Unidos para el reconocimiento diplomático de su estado, se reúne con Franklin D. Roosevelt, se plantea el tema de la seguridad colectiva contra los nazis y el Imperio japonés, en 1934 las conversaciones se enfrian.
- La diplomacia soviética en París, plantea la seguridad colectiva ante los ministros de Asuntos Exteriores francés, Joseph Paul-Boncour y Louis Barthou. Las relaciones con la URSS se normalizaron ya que ambas naciones sentían la amenaza del nazismo. Pero, al igual que en los EEUU fueron saboteadas por el sucesor del asesinado Barthou, Pierre Laval
- Pierre Laval, anticomunista extremo prefería el acercamiento a la Alemania nazi en lugar de la seguridad colectiva propuesta por la URSS. No obstante el Tratado de Asistencia Mutua Franco-Soviético se firma en mayo de 1935. Tras la caída de Francia en 1940, Laval se convierte en colaboracionista de la potencia ocupante alemana, sería pasado por las armas por alta traición tras la liberación en 1945.
- Gran Bretaña tampoco es ajena a la diplomacia soviética, seguridad colectiva contra la Alemania nazi, pero el Acuerdo Naval anglo-alemán de 1935, es decir, el rearme de la armada alemana obstaculiza las conversaciones con los soviets. Los franceses consideran ese acuerdo con los alemanes como traición. En 1936, Anthony Eden, nombrado Secretario de Asuntos Exteriores británico cancela las conversaciones con la URSS.
- Los grandes Imperios coloniales del mundo en esa momento, Francia y la Gran Bretaña, a la que se suma Estados Unidos, deciden terminar unilaterlamente las conversaciones de seguridad colectiva y asistencia mutua con la URSS. El anticomunismo latente en las élites aristocráticas y financieras temen más a la fuerza de los trabajadores que a los radicales nazis, los alemanes son más útiles para sus planes.
- Nadie desconoce que las élites financieras, industriales y políticas simpatizan con Hitler. Por algo se había montado el show en defensa del capitalismo. El fascismo deberá hacer frente a la expansión de los movimientos obreros comunistas en Europa (respaldados por la URSS).

El embajador alemán en Londres, Joachim von Ribbentrop, durante las negociaciones de 1935 para el Acuerdo Naval Anglo-alemán. En la práctica, a pesar que la Kriegsmarine será más pequeña que la flota británica, lo que resalta del acuerdo es que se permite el rearme de la marina de guerra alemana.

- Un posible acuerdo de seguridad colectiva llega a su final, volviéndose más imposible con el inicio de la guerra civil española en 1936, las potencias coloniales se ven obligadas a elegir: derecha o izquierda.
- Otros países europeos afrontan igual dilema. Rumania y Checoslovaquia, como ejemplo, desean un acuerdo de seguridad colectiva contra la amenaza nazi. El presidente checoslovaco, Benes, en 1935, firma un Pacto de Asistencia Mutua con la URSS; igual que en Francia, es desconocido por los políticos checos que confían más en Gran Bretaña y Francia que en la URSS. A pesar de ello, los checos mantienen buenas relaciones con los soviéticos.
- Polonia. La URSS intenta armonizar con los polacos quienes se decatan por los nazis. "Los rusos son bárbaros", dicen, "los alemanes, un pueblo civilizado". Polonia firma un Pacto de no Agresión con la Alemania nazi en enero de 1934. En 1938 los polacos serán cómplices del desmembramiento de Checoslovaquia, craso error, serán los siguientes conforme la hoja de ruta nazi.
La seguridad colectiva y asistencia mutua propuesta por la URSS contra la Alemania nazi no prospera, para 1936 los soviets están casi aislados. Sus propuestas, al inicio escuchadas son luego rechazadas. Nadie quiere escuchar las advertencias del peligro nazi y prefieren negociar con mister Hitler, solo desean alejar al lobo lejos de sus puertas. Todos, incluso la luego traicionada Checoslovaquia, tienen una falsa visión, "la idea, tanto declarada como no declarada, es cambiar las ambiciones de Hitler hacia el este contra la URSS", como lo ha escrito el líder nazi desde la década de 1920.

Conferencia de Munich, 1938 


- La URSS insiste en un acuerdo de seguridad colectiva. En abril de 1939 se da otro impulso formal para intentar el pacto anglo-franco-soviético de asistencia mutua contra la Alemania nazi, las conversaciones se prolongan hasta el verano de 1939. En Gran Bretaña y Francia la opinión pública es favorable a un acuerdo con la URSS, tras la ocupación de toda Checoslovaquia (1939). Hitler reclama Memel (en Lituania), Danzig (Polonia). Pero el diálogo no prospera.
- Molotov reemplaza a Litvinov en Asuntos Exteriores en mayo de 1939 e intenta una vez más con Varsovia, los soviéticos garantizan el apoyo militar a Polonia si son agredidos por los nazis, los polacos con desdén no demoran en rechazar la propuesta.
- La URSS, intenta hasta el final buscar el acuerdo anglo-franco-soviético. En pleno verano de 1939, las partes mantienen el diálogo. Sin embargo, los británicos negocian en secreto con Hitler, mientras se envían delegaciones militares británicas y franceses hacía Moscú para finiquitar la alianza, la noticia se filtra a fines de julio, a través de la prensa se desata el escándalo.
- La mencionada misión militar franco-británica viaja en un fletado y lento barco comercial, (¿por qué no en una rápida nave de guerra?) rumbo a la URSS. La misión demora cinco días en llegar a la cita, lo que suscita la duda soviética. Es evidente que las negociaciones buscan ser retardadas y entorpecidas.
- El principal negociador británico, almirante Sir Reginald Drax, no tiene poderes escritos para firmar un acuerdo con la parte soviética. El general francés, Joseph Doumenc, lleva una vaga carta de autoridad del presidente del consejo de Francia, puede negociar pero no firmar un acuerdo... Nada tienen que ofrecer, mientras el Comisario de Guerra soviético, tiene plenos poderes plenipotenciarios.
- ¿Qué demonios? "No son serios", concluyó Stalin. Los gobiernos francés y británico pensaron que podían jugar con él. 
- Los soviéticos comprenden que no habrá un acuerdo de seguridad colectiva... Entonces, fue cuando Molotov se anima a escuchar las propuestas alemanas... (son los alemanes quienes inician el acercamiento).
- La pregunta del millón, ¿Occidente conspiró contra la URSS por temor al comunismo o porque eran simplemente rusos?
- La dirigencia soviética calcula que los occidentales van a dejarla sola en caso de guerra con Alemania, mientras que franceses y británicos se sentarán a contemplar el conflicto. Eso es exactamente lo que hicieron cuando Alemania invadió Polonia, pura retórica: "declaración de guerra". Si no ayudaron a Polonia abriendo el frente occidental, cómo ayudarían a la URSS?
- Los británicos podían enviar varias divisiones a Francia al comienzo de la invasión a Polonia, el Ejército Rojo pudo movilizar de inmediato cien divisiones; las fuerzas soviéticas venían de golpear a los japoneses en la frontera de Manchuria.
- El pacto Molotov-Ribbentrop es el resultado de largos años de fracasado intento soviético por concretar un tratado de seguridad colectiva, en forma de una alianza antinazi con las potencias occidentales. Aceptar las propuestas de los nazis sorprende al mundo, Stalin accede a la oferta que marcará de polémica la historia de la segunda guerra mundial.
- El pacto gemano-soviético establece cláusulas secretas sobre las "zonas de influencia" en Europa del Este en caso de guerra (como era lo previsible). Es un acto reprochable pero no dista mucho de otra aberración firmada en Munich por las mayores potencias coloniales de la época, el sacrificio de Checoslovaquia por parte de británicos y franceses en aras de la seguridad colectiva, sin pedir la opinión de la URSS... ni de los checoeslovacos.

El primer ministro británico Neville Chamberlain en una de sus varias vistas a Alemania para dialogar con el líder nazi. 

- Gran Bretaña y Francia se ponen en pie de guerra solo cuando sus cálculos no resultan, es decir, esperan que Alemania lleve la guerra lejos de Occidente. Los nazis les deparan una sorpresa seduciendo a Stalin.
- Stalin es un verdadero rufián, políticamente habilidoso, al aceptar el pacto gana tiempo y evita una guerra inmediata con Alemania, pero cometerá el gran error de no aceptar las advertencias de sus mandos militares. Hitler continúa con su plan de invadir la URSS, Stalin duda que Hitler vaya a emprender una campaña en su contra al estar enfrascado en una guerra en el frente occidental. 

Finalmente, Gran Bretaña y Estados Unidos se unen a la URSS contra el nazismo, en una calculada alianza. No se debe olvidar que los ingleses luchan con valentía por defender Francia y su propia isla, pero la URSS se enfrentará sola a los nazis en Europa hasta septiembre de 1943 cuando los Estados Unidos ponen pie en Italia, donde quedarán estancados (a pesar de los avances) hasta el final de la guerra. Solo a mediados de 1944 los Aliados occidentales entran en acción en Europa continental propiamente dicha. Para ese momento la Wehrmacht ya no es una gran armada, ha quedado severamente golpeada y debilitada ante el embate soviético en el frente oriental. 


La seguridad colectiva y asistencia mutua con la URSS no prosperó porque todos los países europeos confiaban en la Gran Bretaña, si ellos decían que sí a los soviéticos todos los demás se alinearían, pero eso no sucedió.



Referencias en este blog:





Nota: La cronología se basa en un reportaje del profesor Michael Jabara Carley, de la Universidad de Montreal.  

A History Lesson For Westerners Parrotting The Lie That Stalin 'Colluded With Hitler to Start WW2'

21 febrero 2020

ARGELIA: la historia no tan secreta del colonialismo francés (2)




Neocolonialismo francés, "Argelia Libre", los "años de sangre", la nueva dictadura, la amenaza islamista.


Ir a la primera parte



Introducción por el redactor del blog.

Para quienes se interesan por la historia del colonialismo europeo en África, sin duda, Argelia tiene un significado especial. Durante el periodo de independencia, precisamente Argelia experimentó uno de los procesos más violentos en el continente, el grado de represión llegó a límites insospechados. Francia se negó a concederles independencia, los EEUU y la OTAN se alinearon con París, temían por el advenimiento de un régimen de corte comunista. Pero tras la proclamación de independencia en 1962, nada cambió, Francia siguió manejando los hilos del destino del país magrebí a través de los testaferros de la política, la clase militar y usando una de las armas favoritas de la OTAN, la violencia islamista.

Argelia se "liberó" en 1962, pero en la práctica nunca han experimentado una verdadera democracia, mucho menos libertad, otras fuerzas coaccionadas con la Metrópolis francesa formaron una nueva casta de poder, una dictadura (a veces civil,  a veces militar) que ha sembrado lo mismo de la etapa independentista, un "baño de sangre", pero esta vez con la irrupción en el escenario de grupos yihadistas.

Y eso sucedió no solo en Argelia, la mayor parte del Sahel (norte y centro de África) sigue siendo llamado la "Francáfrica", donde antes y ahora se mantiene -con las excepcionalidades de la época- el colonialismo imperial francés. Francia nunca ha dejado de manejar el destino de la región, es la "autoridad" a la que se consulta en caso de disputas en la zona. Aquí entra en juego un aliado valioso para los intereses de París, el yihadismo, el terrorismo islámico garantiza que Francia despliegue miles de efectivos militares en la región para "contener" a los radicales. Sensacionalistas notas de prensa, por ejemplo: "Francia arma un muro de contención al terrorismo islámico del norte de África" (Infobae, 9 feb. 2020) coadyuban al objetivo único: controlar económica, política y militarmente el Sahel por encontrarse bajo "amenaza del ISIS y otras fuerzas yihadistas". Como un acto de "bondad", el gobierno francés (Macron) "asume un incómodo liderazgo en sus ex colonias". El pretexto del gobierno galo es evitar la expansión del yihadismo en el Sahel; defender sus antiguas colonias de ultramar y la frontera sur de Europa; velar por su seguridad interna porque en el Sahel "está el origen de algunos de los terroristas que atentaron en Francia en los últimos años". Son más de cinco mil los militares desplegados en la zona, como centro de operaciones está Mali. Qué tan cierto son esas afirmaciones del estado francés que la prensa atlantista hace eco?. Lo comprenderemos a continuación. 

En una notable ENTREVISTA el historiador y periodista francés Lounis Aggoun (nacido en Argelia), autor del libro "La Colonie française en Algérie. 200 ans d’inavouable" (Argelia, colonia francesa. 200 años de algo inconfesable; editorial Demi Lune, 2010), denuncia "las nefastas implicaciones de personalidades mediáticas y políticas francesas en los asuntos argelinos, su apoyo a las facciones que boicotearon el proceso democrático en Argelia, con todas las violencias y sufrimientos que ha generado". Aggoun es coautor, junto a Jean-Baptiste Rivoire de Françalgérie, del libro "Crimes et mensonges d’États, La Découverte" (2004) que relata los pormenores de la guerra sucia en Argelia. 

Bien cabe recordar a nuestros lectores, las ponencias y entrevistas que publicamos en este blog sobre las investigaciones de Daniele Ganser, el paralelismo es el mismo; mejor dicho, la Guerra Secreta de Francia en Argelia era parte de la estrategia de la tensión, de la lucha de los ejércitos secretos de la OTAN contra un enemigo invisible -el comunismo-. Era la época de la "Guerra Fría" y la caza de brujas estaba en pleno auge.

Silvia Cattori, de quien también hemos publicado algunos de sus trabajos, entrevistó a Lounis Aggoun. He intentado realizar un compendio, preciso y sustancial de aquella larga entrevista realizada en 2010, ya que el material es amplio respecto a esa dura etapa histórica para lograr la independencia de Argelia y la posterior "guerra" contra el yihadismo.  

La entrevista original, conforme su formato, fue presentada en dos partes tituladas: "Argelia, los años de sangre y las complicidades de Francia"; y, "Argelia, los años de sangre y el papel de los agentes de influencia". Evidentemente el francés fue el idioma de las publicaciones, la entrevista fue traducida al castellano en octubre de 2010 por Beatriz Morales Bastos. También es necesario señalar que prestigiosas redes alternativas de noticias acogieron este esclarecedor documento: Rebelión, Red Voltaire, Global Research, Webislam, entre otras. 

Entonces, el lector se preguntará para qué reeditarla nuevamente? La respuesta es sencilla, ha transcurrido una década de la aparición del libro de Aggoun, sin que hayamos tenido la suerte de tenerla en castellano; y, sobre todo, porque Francia (y la UE) decidieron volver al ataque para "reconquistar" sus ex colonias africanas, tal como lo analizamos en "La Unión Europea, África y el neocolonialismo". 

En realidad,  la imposición colonial bajo la denominación común de "neocolonialismo" nunca ha dejado de estar vigente en África. El último proceso electoral en Argelia lo demuestra, Francia se inmiscuyó tratando de evitar que Abdel Mayid Tebbún sea electo presidente de Argelia en diciembre 2019 (tal como dejamos sentado en el artículo anterior). 

Respecto a la entrevista, tomamos las notas de presentación de Red Voltaire (2010) que resume esta entrevista: 

La independencia no permitió a Argelia salir de la violencia, lejos de eso. No se devolvió el poder al pueblo, sino que un grupo inicialmente elegido por Francia para proteger sus intereses lo acaparó. Para mantenerse, este grupo no dudó en manipular a unos islamistas y en sumir al país en un nuevo ciclo de violencia. En una documentada obra, «Argelia, colonia francesa. 200 años de algo inconfesable», Lounis Aggoun denuncia un sistema elaborado por unos argelinos con el apoyo de Francia y después de Estados Unidos en detrimento de todo un pueblo (Argelia, los años de sangre y las complicidades de Francia)

Los crímenes cometidos por el régimen militar que gobierna Argelia han sido tapados bajo la etiqueta de lucha contra el terrorismo, crímenes que han sido blanqueados o ignorados en la prensa internacional por los agentes de influencia. En el corazón de este dispositivo podemos distinguir quiénes son esos marionetistas (Jacques Attali, Bernard-Henry Lévy, etc.) y sus espadones mayordomos menos escrupulosos (Yasmina Khadra, Daniel Leconte, Xavier Raufer, Mohamed Sifaoui etc.). (Argelia, los años de sangre y el papel de los agentes de influencia)

T. Andino



Entrevista con Lounis Aggoun
por Silvia  Cattori

"Argelia, los años de sangre y las complicidades de Francia"

Lounis Aggoun y su libro

➤  Sivia Cattori: "Argelia, colonia francesa. 200 años de algo inconfesable" es impresionante. 600 páginas densas y cautivantes que se basan en una amplia documentación y que hablan con empatía de un pueblo maltratado, al que se ha puesto de rodilllas. Se comprende que es el relato de un hombre herido por el sufrimiento de su pueblo y decidido a enfrentarse a esta realidad brutal, a la realidad. ¿Es así como lo vive usted?

Lounis Aggoun: No quiero mezclar mis escritos con el desbordante raudal de contrasentidos y controversias en los que consisten las obras sobre Argelia. ¿Cómo no sentirse herido cuando se es testigo permanente del espectáculo de su pueblo martirizado? ¿Cómo no sentirse indignado después de ver al tirano investirse de virtud y presentarse como el garante de la libertad, de ver al violador, al ladrón, al canalla, en suma, todo lo que hace el Estado argelino, venir cotidianamente a asestarnos lecciones de moral? En el drama argelino no hay término medio. Por una parte está el territorio de los colonos (los nuevos, se entiende) y por otro el de los colonizados, que viven una realidad espantosa. ¿Podemos dedicarnos simplemente a nuestras obligaciones una vez que se ha tomado conciencia de esto? Por más que lo intento no lo logro.

➤ Silvia Cattori : Usted afirma en el libro que la historia reciente de Argelia, de sus relaciones con Francia, es muestra de una permanente mentira. Al querer preservar a cualquier precio sus intereses estratégicos en Argelia, ¿verdaderamente obró Francia de manera que después de 1962 Argelia no pudiera acceder a la plena posesión de su soberanía? ¿Para Francia, Argelia valía más que otras ex-colonias?

Lounis Aggoun : Las cosas no se presentan de una manera tan maniquea. Dicho esto, es conocida la obra falsamente liberadora del general de Gaulle en África. ¿Cómo creer que haya concebido en Argelia el proyecto contrario al que era el suyo en el resto del continente? Esto no quiere decir que les deseara el mal a los argelinos, lejos de eso. Pero entre su proyecto de una Argelia independiente pero en manos de un poder garante de los intereses franceses (sus propias palabras dan testimonio de ello) y la concretización de ello (una abominable dictadura que exacerbó todas las ignominias de la ex-colonia) hay un margen y un río de sangre. Los argelinos son responsables de los abusos del gobierno tras el alto el fuego del 19 de marzo de 1962 (sean cuales sean las influencias externas, que son reales). Pero la mentira original (que difunden los mismos que pretenden militar por la verdad y la historia) consiste, medio siglo después, en negar que en el punto de partida está la voluntad por parte del poder francés de infiltrarse en la administración argelina. Después es trivial afirmar que el aprendiz de brujo perdió el control de su diabólica criatura.

Los creadores de opinión podrán seguir pretendiendo (no me hago ilusiones) que Francia no tienen nada que ver en el desastre argelino tras la independencia y que quienes afirman lo contrario no son sino unos excitados inmaduros; los hechos son abrumadores y prevalecerá la demostración.

➤ Silvia Cattori : ¿ La afirmación de que la Independencia vino seguida «de una primera década de eliminación de las elites y de infiltración» deja en mal lugar la visión romántica que vigente durante las décadas de 1960 y 1970 de una Argelia socialista triunfante, admirable, completamente comprometida con los movimientos de liberación, dotada de brillantes diplomáticos, avalada por una destacable política exterior? ¿Era una visión completamente equivocada? ¿Puede explicitarlo?

Lounis Aggoun : En la escena internacional y la realidad que se imponía al pueblo argelino hay una diferencia como de la noche al día. Y como en toda ilusión, la desilusión es tanto más dolorosa cuanto más hermoso es el sueño. Por lo que se refiere a los brillantes diplomáticos (y no se trata de decir que no los hubo), sólo sirvieron de apoyo a unos políticos que estarían implicados en crímenes contra la humanidad si la justicia internacional pudiera estudiar la cuestión. Por lo demás, la respuesta a su pregunta es simple: se puede medir fácilmente la calidad de esta administración con el hecho de que uno de sus miembros más eminentes, Abdelaziz Buteflika, se convirtió en presidente en 1999, casi cuarenta años después de abonar el terreno para la dictadura argelina y que en este mismo momento prosigue su obra devastadora. Siempre hay que desconfiar de las historias románticas. La vocación de la elite es no sumirse en ellas. Ahora bien, observadores y comentaristas de todo tipo siguen propalando las sandeces que justifican el mantenimiento en el poder del que pretende ser la oposición.

➤ Silvia Cattori : Sin duda usted tiene razones que le permiten asociar a Ahmed Ben Bella con Boumédiène y Bouteflika. Ben Bella, invitado a la tribuna principal y muy aplaudido, como pude constatar en el Foro Social Europeo (FSE) en Florencia, Italia, en noviembre de 2002, sigue siendo muy apreciado. ¿Qué tiene en común con ellos?

Lounis Aggoun : Ben Bella es el hombre que confiscó a los argelinos la libertad. A ese título, asume la mayor responsabilidad en la desgracia de su pueblo. No recuerdo haber oído de su boca un inicio de autocrítica desde que fue destituido, al contrario, cada vez que interviene es para agobiar a los mejores cuadros políticos de la revolución y para justificar la suerte que les ha sido reservada (con frecuencia sus asesinatos). Son muchos en la esfera de influencia comunista quienes tras haber sido engañados apoyando a Stalin (antes de resituarse en la Resistencia) después de 1956 votaron a favor de otorgar poderes especiales al ejército (para actuar en Argelia, de la misma manera apoyarán otra guerra sucia en 1992 pretendiendo querer salvar a los argelinos de sí mismos y tomando el relevo de una política completamente genocida, llamada sin complejos "erradicación"), creyeron rehacerse una virginidad apoyando al poder totalitario que se instalaba en Argelia. Convirtieron este apoyo en la obra positiva de sus vidas. Por mucho que ahora se les ponga en evidencia, prefieren mirar a otra parte.

Su pregunta merece ser ampliada. Cuando se descubren los horrores del actual poder, en comparación los crímenes del anterior parecen veniales (los 200.000 muertos de la década de 1990 son un crimen de masas imborrable, pero las vías destructivas en funcionamiento en aquel momento tendrán a largo plazo las más graves consecuencias). A fin de cuentas, viendo la década de 1990, considerada en perspectiva la de 1980 con Chadli parece bastante suave. Y si se tienen en cuenta los horrores de la década de 1980 de Chadli, el reino de Bumedian parece ser muestra de la edad de oro de la independencia argelina. Por lo tanto, conociendo las abominaciones del régimen de Bumedian, la era de Ben Bella (en la que, sin embargo, se fundó la dictadura) parece ser muestra de una época de ensueño. Además de que el tiempo calma los horrores engendrados por los sucesivos poderes, esto traduce el inexorable descenso a los infiernos de los argelinos



Ex gobernantes argelinos, de izquierda a derecha: Ahmed Ben Bella, el primer presidente de la República Argelina Democrática y Popular tras su independencia en 1962 (al final del gobierno provisional de Ferhat Abbas), el 15 de septiembre de 1963 - depuesto por un golpe de estado el 19 de junio de 1965. Houari Boumédiène, su nombre real es Mohamed Ben Brahim Bou Kharouba, en castellano lo conocemos como Houari Boumedian. Presidente de Argelia entre 1965-1978. Chadli Bendjedid, Presidente entre el 9 de febrero de 1979 y el 11 de enero de 1992. Fue oficial del Ejército francés, desertó para unirse al FNL (Frente Nacional de Liberación), guerra de independencia. Fue Ministro de Defensa de Boumedian entre noviembre de 1978 a febrero de 1979, nombrado Presidente del país a la muerte de Houari Boumedian.


➤ Silvia Cattori : Todos los capítulos de su libro son apasionantes y merecen ser debatidos. En particular me gustaría hablar con usted de estos acontecimientos que usted describe con precisión y que desde 1988 preparan lo peor. Creo que pocas personas saben lo que ocurrió verdaderamente durante estos «años de sangre». Todo esto es extremadamente abrumador. ¿Hasta qué punto el rosto de Argelia ha quedado trastornado para siempre? ¿Cuando se podrá decir que todo esto pertenece al pasado?

Lounis Aggoun : Un pueblo enjaulado, eso es lo que son los argelinos hoy. Para escapar, hombres y mujeres liquidan todos sus bienes para poder comprar un hipotético pasaje a Europa en barcos destartalados que se hunden en alta mar o en barcos en los que corren el riesgo de ser arrojados por la borda por unas tripulaciones que no desean tener problemas con los servicios de inmigración de los países en los que atracan. Si el alma del pueblo argelino se desvive por escapar de la furia, el paisaje en el que evoluciona la población ha sido totalmente destruido.

Los argelinos deseaban la libertad, se les ha sumido en la dictadura. Quisieron imponer la democracia en 1988 y se les sumió en el horror. Hoy sólo conocen enemigos: quienes se pelean a las puertas de su casa para acaparar las riquezas (petróleo, gas, minerales …) que oculta su subsuelo. Hay también quienes venden armas al régimen que los asesina. Quienes querrían salvarles de su supuesta propensión a la barbarie y que experimentan con ellos el arsenal del terror. Quienes les acusan de todas las desgracias del mundo y que en nombre de ello se arrogan el derecho a machacarlos. No olvidemos a los medios de comunicación y a las elites occidentales que desinforman al respecto cuando hablan sobre ellos y que se volatilizan cuando se vuelve imperativo defenderles.

En diez años se descubrirá que las operaciones que se llevan a cabo hoy (por parte de un gobierno al que se recibe con gran pompa en los salones occidentales) son muestra de crímenes contra la humanidad. Y entonces se asistirá no a la condena de estos crímenes sino a la elaboración de nuevos crímenes aún más abominables que impedirán a la opinión pública occidental abordar en detalle los de hoy. Y, por consiguiente, hoy en día, naturalmente, para evitar que se traten los crímenes de la década de 1990, el poder está tratando de corromper a la población en lo que ésta tiene de más íntimo, sus engranajes sociales. Y en las columnas de los medios de comunicación franceses se retrata a este país que le estoy describiendo como El dorado económico, un ejemplo de democracia.

➤ Silvia Cattori : Hoy ha quedado claro que el Grupo Islámico Armado (GIA) era una emanación de los servicios de seguridad argelinos, una «organización tapadera». ¿Estaba claro para usted en la década de 1990?

Lounis Aggoun : Estaba claro para quienes habían escapado de las masacres desde el mismo momento en que enterraban a sus allegados. Pero, ¿qué vale la palabra de un torturado cuando nadie consiente en escucharlo, ni siquiera en entenderlo? Basta con no perder lo que es propio del ser humano, la facultad de razonar, para saber que si ciertos atentados eran, efectivamente, obra de islamistas radicales, los más emblemáticos, los que tuvieron mayor repercusión en Occidente, eran demasiado beneficiosos para el régimen y sólo para él como para no ser sospechosos: era esencial que no se hicieran preguntas sobre la identidad de quienes verdaderamente los habían ordenado. Pero, para qué sirve saber, para qué sirve incluso que todo el mundo lo sepa si las únicas palabras que se oyen en los medios de comunicación franceses hoy, diez o veinte años después de los hechos, repiten la misma cantinela falsa. Quienes hace quince años afirmaban ya que los emires más sanguinarios, por ejemplo, Djamel Zitouni y Ali Touchent, eran agentes del DRS (siglas en francés de Departamento de Información y de Seguridad) son algunos de los grandes responsables de los servicios de seguridad franceses. Es un secreto a voces. Esto no impide a los medios de comunicación hacer como si nadie lo supiera y soltar contrasentidos en todo el periódico.

➤ Silvia Cattori : Quienes están al corriente de estas prácticas secretas que son muestra de la «estrategia de la tensión» que utilizan los Estados a espaldas de sus ciudadanos saben o pueden comprender inmediatamente que todo lo que usted describe y que parece pertenecer a lo inimaginable, por desgracia es muy real, a saber, que un puñado de generales argelinos sumieron deliberadamente a su propio país en el caos con el objetivo de acusar al Frente Islámico de Salvación (FIS) y que la «guerra de erradicación» contra los islamistas tenía unos móviles ocultos. Pero, ¿cómo podría imaginar el gran público, que está desinformado e ignora todo de estas maquivélicas estrategias, que los culpables no son islamistas sino los generales que los manipulan? ¿Sabe el pueblo argelino lo que verdaderamente se trama?

Lounis Aggoun : En primer lugar, para que una gran mentira sea viable debe basarse en una parte de verdad. En Argelia siempre ha habido y hay islamistas radicales. Hay islamistas que desean sumir al país en el terror. Hay islamistas que desearían reeditar las «hazañas» de la generación de 1954 contra el colono interior. Pero, como en toda sociedad, son una ínfima minoría a la que los resortes democráticos existentes habrían podido confinar en esta dimensión marginal. El poder, cuyas detestables intenciones se han confirmado, planificó (se trata de una premeditación y no de algo descontrolado) injertarse en esta minoría, a la que hizo crecer con sus propios efectivos, para empujar a los islamistas no a la moderación sino al radicalismo. A título de ejemplo, el " majliss echoura " del FIS, su instancia dirigente, pasó a estar en un momento dado bajo el control absoluto del DRS; algunos de sus dirigentes son hoy ministros de Buteflika o diputados y ofrecen el país al saqueo internacional. De todos los dirigentes de primera fila sólo Ali Benhadj era sin lugar a dudas un hombre sincero.

¿Cómo escapar a esta desinformación? Los argelinos lo saben y no se dejan engañar. Evidentemente, no hablo de los argelinos que frecuentan los periodistas u hombres de negocios franceses en los bares de Alleti o Aurassi y para los que la vida es bella. Hablo de la Argelia profunda, de la Argelia de tercera fila. Por lo que se refiere a los europeos que desean librarse de la ceguera saben que hay que leer y escuchar. Yo añadiría que «los franceses de la Francia profunda» padecen hoy los mismos ataques por parte del Estado francés y son víctimas al mismo título que los argelinos. Por ello, decir la verdad, toda la verdad, cuando se la conoce y siempre que se presente la ocasión es una operación de higiene pública que supera el marco de Argelia. 

Pero hay que examinar su pregunta con más perspectiva. En una manipulación no haya que confundir manipulador y manipulado(s), lo mismo que hay que distinguir al desinformador de las personas a las que engaña. No hay que caer en este defecto argelino que consiste en acusar a la víctima de ser víctima. No creo que al pueblo le guste que le mientan. La mayoría de los «guardianes de las líneas editoriales» que me han llamado para escribir se han apresurado a ponerme salvaguardas. Me han reprochado decir demasiado, describir una verdad demasiado cruda. En definitiva, me piden maquillar la verdad para, según creen ellos, no asustar al lector. ¿Acaso ignoran que la menor brecha en una verdad la envenena y mata?


Logos de El Grupo Islámico Armado (GIA) y del Frente Islámico de Salvación (FIS). El GIA se formó tras el golpe militar de 1992 e internamiento de miles de funcionarios del FIS, luego que ganara las elecciones parlamentarias en diciembre de 1991. El GIA fue dirigido por diferentes emires que iban siendo arrestados o asesinados uno tras otro. El GIA perseguía desestabilizar al gobierno y su lema era: "sin acuerdo, sin tregua, sin diálogo". El grupo creó la inseguridad general mediante secuestros, asesinatos y bombas contra  fuerzas de seguridad y civiles. Hizo presencia fuera de Argelia (Francia, Bélgica, Gran Bretaña, Italia, Estados Unidos). El Frente Islámico de Salvación FIS fue un partido político islamista argelino, con dos líderes principales. Abbassi Madani y Ali Belhadj. En las elecciones de gobierno locales (1990) obtuvo más de la mitad de los votos válidos. Cuando parecía ser el ganador de las elecciones generales en enero de 1992, un golpe militar desmanteló al partido e internaba a miles de sus funcionarios en el Sahara. Algunos líderes del FIS querían establecer un Estado Islámico y eliminar la lengua y la cultura francesa. Por un lado, Madani condenaba la violencia "de donde sea que viniera", partidario de la democracia y respeto de las minorías. Belhadj, por su parte, expresaba: "No hay democracia en el Islam"  y "Si la gente vota en contra de la Ley de Dios ... esto no es otra cosa que blasfemia. El ulama ordenará la muerte de los delincuentes que han sustituido su autoridad por eso". Aclarando que en la actualidad Argelia cuenta con otras organizaciones yihadistas como el al "Qaeda en el Magreb Islámico" (AQMI)


➤ Silvia Cattori : Durante estos años de represión salvaje François Mitterrand estaba en el poder en Francia. No parece que usted haya apreciado las implicaciones de su gobierno en este asunto. ¿Favoreció este gobierno la política de estos generales argelinos que multiplicaban las operaciones sangrientas contra su pueblo? ¿Las consideró realmente "la muralla defensiva contra el islamismo radical del FIS"?

Lounis Aggoun : La coartada de la "muralla defensiva contra el terrorismo" es cómoda. Es una burda artimaña para enmascarar secuestros a gran escala. La responsabilidad de François Mitterrand es monumental. Lo he demostrado. Pero Mitterrand es un hombre y la política es obra colegiada. Presidió gobiernos de izquierda y de derecha: de todos los políticos que le han rodeado no son muchos los que pueden jactarse de haber mostrado un sentido del honor concerniente a las relaciones con Argelia. Si la responsabilidad es compartida, la de François Mitterrand rebasa todos los límites en el sentido de que él tenía el poder de actuar en un sentido noble y sistemáticamente actuó de forma detestable. 

Dicho esto, no hay que minimizar los peligros del islamismo radical. Y muchos de los ex-dirigentes del FIS (aquellos que aspiraban a devolver al pueblo argelino su dignidad) tienen una enorme responsabilidad por haber contribuido, por descuido, a sumir al país en el caos. Pero, veinte años después de los hechos se siguen parapetando en el silencio y se niegan a aportar el testimonio que podría ayudar a los observadores a comprender mejor la historia reciente de su país. En otras palabras, se niegan deliberadamente a ayudar a su pueblo a conocer la verdad que les permitiría librarse de los tiranos que padece. Ejemplo entre otros, es más que evidente que su jefe, Abassi Madani, trabajaba hombro con hombro con el DRS

 Silvia Cattori : El Eliseo no podía ignorar que los atentados que causaban miles de muertos estaban controlados por los servicios secretos argelinos. ¿Qué interés tenía Francia en acabar con el proceso de democratización en Argelia y en utilizar la instrumentalización de la amenaza islamista?

Lounis Aggoun : La respuesta a su pregunta daría para escribir un libro, es el que acabo de publicar. El interés de Francia y de François Mitterrand no es algo a lo que se pueda responder puntualmente por medio de una afirmación o una negación. Es cuestión de dinámicas, de engranajes, de realpolitik, de depredaciones económicas, de chantajes, de prejuicios, de un espíritu de revancha mal consumido, a veces de miedo, etc. Además, no hay que confundir el interés de Francia con el de sus gobernantes. Cada día que pasa se demuestra que son incluso antinómicos.

➤ Silvia Cattori : Por consiguiente, ¿las potencias occidentales permitieron a los generales argelinos abrir las puertas del infierno por no haber aceptado que prosiguiera el proceso democrático en Argelia y haber aprobado la irrupción por la fuerza del acceso al poder del Frente Islámico de Salvación (FIS)?

Lounis Aggoun : Una vez más, las dinámicas y los engranajes en funcionamiento se extienden durante años, durante décadas. Si se hubiera explicado a los dirigentes franceses que la interrupción de la democracia en Argelia en 1991 engendraría la década mórbida que se produjo después, sin lugar a dudas se lo habrían pensado dos veces. Pero el arte de un manipulador es hacer que las decisiones y los actos que pide ratificar o apoyar oculten las consecuencias que se desprenderían de ellos. Una vez que se revelan las consecuencias es demasiado tarde, hay que arreglárselas con la realidad y evitar que las cosas empeoren y, por consiguiente, apoyar a una dictadura a la que basta con presentar como una muralla defensiva contra lo peor.

Desde hace 20 años se pretende que la democracia en Argelia va a llevar a los islamistas al poder. Nada es más falso. Cuando su movilización era más fuerte, es decir, en el momento en que el régimen neutralizó a todas las fuerzas democráticas y ayudó al FIS a estructurarse, la popularidad que gozaban los islamistas no superaba el 30 %. En junio de 1991 unas elecciones legislativas deberían haber llevado al poder a una coalición democrática. Los generales argelinos simularon una guerra civil que duró una noche para acabar con el proceso democrático y eliminar al único gobierno que había actuado en interés del pueblo argelino, el gobierno Hamrouche. En cuanto se interrumpió el proceso democrático (con la aprobación del poder francés), el DRS designó un gobierno que tenía el objetivo de lanzar otro proceso electoral con el fin de que ganara el FIS y justificar el final de la democracia que no merecía el pueblo. Después de seis meses de una manipulación gigantesca el general Larbi Belkheir, artífice de esta operación, anuncia esta victoria cuidadosamente planificada de los islamistas. Sabemos lo que ocurrió después.

➤ Silvia Cattori : Después de la desaparición de Larbi Belkheir y Smaïn Lamari, ¿qué ocurrió con las relaciones entre el régimen de Buteflika y el Eliseo? ¿Y con las actas que se han atribuido a Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI)? ¿Qué se oculta tras este nombre?

Lounis Aggoun : La respuesta a su pregunta se reduce a una frase: el AQMI y el DRS son una misma organización y todo lo demás es literatura. Los sinsabores de Francia con el poder argelino provienen de que sus agentes más fieles (Larbi Belkheir y Smaïn Lamari) murieran respectivamente en 2010 y en 2007. Por lo tanto, Francia se encuentra con un interlocutor que no tiene la misma disposición respecto a ella. El actual amo del régimen, Tufik Mediene, prefiere jugar otras bazas, estadounidense, china, etc. Esta guerra subterránea es lo que en el terreno se traduce en secuestros y en las continuas humillaciones infligidas por el AQMI (el DRS) a Francia. Lo peor es que ni los políticos ni los periodistas, que han practicado permanentemente la mentira, pueden explicar los verdaderos entresijos. Y lo que encontramos en todos los platós de televisión es a los expertos-impostores de siempre, manipuladores para los que la vida de los rehenes tiene un valor ínfimo.


ARRIBA: Logo del DRS (Département du Renseignement et de la Sécurité) Departamento de Inteligencia y Seguridad de Argelia. Su existencia data desde la lucha por la independencia. En 2016 fue disuelto por el presidente Abdelaziz Bouteflika y reemplazado por la Dirección de Servicios de Seguridad. Vendría a ser el equivalente francés de la Dirección General de la ‎Seguridad Externa (DGSE - Direction Générale de la Sécurité Extérieure; o de la Dirección General de Seguridad Interna (DGSI - Direction Générale de la Sécurité Intérieure). El AQMI o Al-Qaeda en el Magreb Islámico es una organización islamista de Argelia (filial de al -Qaeda ) su objetivo es luchar contra el gobierno argelino e instituir un estado islámico. Tuvo su origen como Grupo Salafista de Predicación y Combate (GSPC). Sus actividades se han expandido a países fronterizos con Argelia. ABAJOLarbi Belkheir, Mayor General del ejército y político argelino, colaborador del presidente Chadli Bendjedid del cual fue Jefe del Consejo Superior de Seguridad, Secretario General de la Presidencia y Jefe del Gabinete, entre octubre de 1991 a julio de 1992 fue Ministro del Interior. En 1992 ayudó a liderar el golpe militar que depuso a Chadli Bendjedid, iniciándose la Guerra Civil. En 1999, ayudó a Bouteflika a convertirse en presidente, en octubre de 2000 fue designado Jefe de Gabinete (murió el 28 de enero de 2010); Mayor General Smain Lamari, fue jefe del servicio de inteligencia argelino, del Departamento de Contraespionaje y Seguridad Interna. (Smain Lamari murió en 2007).  Los generales Mohamed Lamari, Khaled Nezzar, Larbi Belkheir, Smain Lamari y "Tufik" Mediene fueron los generales argelinos más influyentes en la política argelina, junto a otros militares han sido llamados la "Mafia de los generales argelinos". 

➤ Silvia Cattori : En muchas ocasiones usted vuelve sobre el papel de Jack Lang, Hubert Védrine, Jean-Louis Bianco, Jacques Attali. ¿Por qué son particularmente censurables estos personajes, tan presentes todavía hoy en los medios de comunicación?

Lounis Aggoun : Algunos de estos hombres son buenos consejeros del poder en la sombra en Argelia, en torno a Larbi Belkheir. Por lo tanto, en diferentes grados son los arquitectos de la obra de este hombre: la destrucción de Argelia y de que se haya devuelto a su pueblo a los tormentos de una colonización peor que la colonización y que no osa decir lo que es…


"Argelia, los años de sangre y el papel de los agentes de influencia".


Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI), es un seudo grupo islámico controlado por el DRS argelino, es decir los servicios de inteligencia de Argelia y que sirve a justificar la guerra al terrorismo y conceder una razón de existir y ejercer plenos poderes al régimen militar argelino.
➤ Silvia Cattori : En 1999 los telespectadores francófonos pudieron ver horrorizados “Bentalha, autopsia de una masacre”; este reportaje mostraba que la noche del 22 al 23 de septiembre de 1997 el ejército argelino mató salvajemente a unos doscientos habitantes del pueblo. Leyendo su libro se comprende que estas revelaciones no lograran entonces desvelar los crímenes de Estado, sobre todo a causa de “la influencia de Bernard-Henri Lévy y de una banda de intelectuales negativos (André Glucksmann, Denis Jeambar, Daniel Leconte, etc.), bien secundados por políticos influyentes”, entre ellos Jack Lang y Hubert Védrine. ¿Puede explicitar cómo se manifestó esta “influencia”?

Lounis Aggoun : En primer lugar, hay que saludar a la redacción de France 2 que tuvo el valor de presentar este documento; en aquel momento estaban Paul Nahon y Bernard Benyamin. No se han atrevido a repetir la experiencia, sobre todo desde que se nombró directora a Arlette Chabot y desde que la cultura de la mentira alcanzó su apogeo.

Por lo que se refiere a Bernard-Henri Lévy (apodado BHL), es conocido su papel habitual en la galaxia mediática y la nefasta influencia que ejerció en 1998 publicando en Le Monde (tras una visita de dos días a Argelia con escolta militar) un texto en el que exoneraba a los generales argelinos de todos sus crímenes, excepto quizá, decía él, el de incompetencia. Bernard-Henri Lévy, este pensador mediocre al que se presenta en todas partes como un intelectual, este ensayista comprometido con los poderosos (en este caso con criminales de masas) logró ocultar un movimiento de opinión naciente en Francia, favorable al pueblo argelino.

Esto ocurría unos meses antes de la masacre de Bentalha en la que, recordémoslo, los militares a los que él exoneraba de toda responsabilidad habían planificado y ejecutado (dirigiendo unos escuadrones de la muerte formados por terroristas “islamistas” que estaban a sueldo de ellos) la masacre indecible de mil personas en unas horas de la noche, en un sector cuidadosamente balizado por el ejército, el cual por toda actuación se limitó a impedir a la población de los pueblos vecinos ayudar a quienes estaban asediados y a cerrar el paso a las víctimas para obligarlas a volver al escenario de la masacre.

El día en que los medios de comunicación admitan esta verdad, que sólo discuten estos “agentes” de la desinformación, aparecerá el verdadero rostro de Bernard-Henri Lévy: el de un cómplice de muchos crímenes de masas, de muchos crímenes contra la humanidad y el encubridor de muchos crímenes que se desprenden de ello. Mientras, se le considera el filósofo contemporáneo con más talento del mundo.

La verdad, las elucubraciones de Bernard-Henri Lévy sólo hacen ilusión en el microcosmos mediático-político francés que contra toda evidencia y de manera deliberada trata de imponer una visión binaria del mundo en la que hay por un lado los buenos demócratas, ellos, el Bien, y por otro los “islamoterroristas” y sus cómplices, es decir, todos aquellos que no toman lo que ellos profesan por dinero en efectivo, el Mal. Y si Bernard-Henri Lévy tiene esta influencia es porque puede contar con sólidos apoyos en los medios.


Bernard-Henri Lévy, magnate y neoconservador francés. Controla con una mano de hierro el contenido ideológico de una gran parte de los medios de comunicación y de la edición en Francia.

En Arte, una cadena de televisión en la que, sin embargo, no faltan expertos, periodistas e historiadores íntegros, Daniel Leconte hace estragos como un déspota y parece tener un poder exorbitante. También es copropietario (con Bernard-Henri Lévy) de una productora, Docs en stock, en la que hace películas muy discutibles desde el punto de vista de la deontología y el rigor. BHL y Daniel Leconte juegan sobre seguro, Arte organizó un programa Thema en el que BHL y Leconte escupieron su hiel en el plató a través de reportajes en los que la imparcialidad era el menor de sus defectos. A continuación el bombardeo mediático hizo su trabajo ya que el dogma que defendía esta maléfica cohorte era el siguiente: ¡los asesinos que actuaron en Argelia eran, de manera evidente, únicamente fanáticos islamistas como afirmaban los generales en el poder! Decretados así inocentes por esencia, los verdaderos criminales, esencialmente agentes del DRS, escuadrones de la muerte, ninjas y milicias, pudieron seguir su obra con total impunidad. Y si había que deplorar algunos deslices, según él eran perfectamente excusables porque tenían como misión pionera cerrar el paso a la “barbarie islamista” que amenazaba a Francia y Occidente.



Bernard- Henri Lévy y Daniel Leconte


Hacer pasar a los generales genocidas por salvadores del mundo, ésta fue la obra en Argelia de Bernard-Henri Lévy, este “Mickey Mouse” del pensamiento intelectual (la comparación es de Emir Kusturica, con ocasión del conflicto de los Balcanes en el que Tartarin-BHL había tenido compromisos similares). Es conocido su compromiso a favor de la política israelí contra el pueblo palestino, su ensañamiento con Irán, con la Venezuela de Chávez y no me detengo más en ello.

El efecto inmediato fue detener de golpe el naciente movimiento de opinión, lo cual no dejó de tener consecuencias para el pueblo argelino que continuó sufriendo asesinatos masivos sin que ninguna persona en el mundo pudiera protestar so pena de ser acusada de apoyar al fanatismo islámico. Concretamente el régimen, que estaba a punto de ser denunciado a escala mundial, salió de ello blanqueado, reforzado y legitimado para proseguir con su acción asesina.

Bernard-Henri Lévy y Daniel Leconte, como ángeles del terror, tienen una enorme responsabilidad en la muerte violenta de decenas de miles de inocentes masacrados después de su intervención, ya que el ejército gozaba de una impunidad adquirida gracias a esta carta blanca.

Si Argelia fuera hoy independiente, estaría capacitada para llevarlos ante los tribunales internacionales por complicidad en crímenes contra la humanidad. En vez de ello, Bernard-Henri Lévy sigue siendo el embajador de la postura francesa en el mundo y Daniel Leconte sigue arrojando en la televisión su veneno sobre los magrebíes y los inmigrantes musulmanes, ya que ve bárbaros en todos los banlieues desfavorecidos que rodean París.



Mohamed Sifaoui, periodista argelino neo-conservador.

➤ Silvia Cattori : ¡Es asombroso todo esto! La “banda” de personalidades a las que usted incrimina en su libro se amplia al hilo de las páginas: Jack Lang, Hubert Védrine, Jean-Louis Bianco, Jacques Attali, Jean-Louis Bruguière, Antoine Sfeir, Daniel Leconte, Franz-Olivier Giesbert, Guillaume Durand, Yves Calvi, Mohamed Sifaoui, Yasmina Khadra. ¿Qué tienen en común estas personas a las que usted agrupa? ¿Tienen la misma responsabiliad en la colaboración con “este simulacro de Estado” argelino, en el curso de estos “años de sangre” y de esta “guerra sucia” que ha causado más de 200.000 muertos? Según usted, ¿qué lugar ocupan precisamente Mohamed Sifaoui y Yasmina Khadra ?

Lounis Aggoun : Mohamed Sifaoui es un hombre dispuesto a “erradicar” a un pueblo si esto puede aportarle un minuto de “gloria” en la televisión. Es una bendición para un medio al que hacía falta un “moro de turno”. Tiene un perfil ideal para profesar el odio al musulmán, el odio al joven de la banlieue que, según la dialéctica de Sifaoui, sueña con aterrorizar a Francia; el odio de los argelinos, que desde su punto de vista son indignos de la democracia y lo único que saben hacer es elegir a terroristas para que los dirijan; el odio de los emigrantes que, según él, no pararán hasta que no hayan islamizado Francia. Si se comporta de este modo no es en absoluto por convicción sino porque en este momento lo que paga es la isalmofobia; profesaría el mismo odio al francés si estuviera en Argelia, el odio al Satán judeo-estadounidense si estuviera en Irán, odio que se preocupa de verter ante sus invitados elegidos, cuidadosamente seleccionados y tan encarnizados como él. Los medios franceses y hombres como Jean-François Kahn o Paul Amar promueven a un Mohamed Sifaoui que, si llegara al poder, los enviaría a la hoguera sin la menor duda.


Mohammed Moulessehoul (alias Yasmina Khadra), oficial argelino encargado de la represión contra los islamistas en la región de Orán (Oeste de Argelia). Se retira repentinamente del ejército argelino. escribe novelas y encarna una falsa oposición al régimen militar en el país.

El caso de Yasmina Khadra (pseudónimo de Mohammed Moulessehoul) pretende ser más sutil. Habiendo aniquilado a la oposición, los generales argelinos necesitaban a alguien que los encarnara en los medios franceses y de ahí la pseudo-retirada del ejército de este hombre para personificar una oposición en un universo en el que está prohibido cualquier desvío de la versión oficial. Un supuesto oponente, cuyo papel es subestimar la amenaza o negarla cuando existe, e inventarla cuando no existe. Un “intelectual” al que le sopla una brigada de redactores del DRS. 

Pero la ambición de Moulessehoul (Khadra) tropieza contra una realidad ineludible: no sabe expresarse, lo que obliga a restringir sus intervenciones en la televisión a las operaciones de promoción de “sus” obras donde un discurso pobre viene a contradecir sistemáticamente la supuesta erudición de los textos que firma. Sifaoui y Khadra son enemigos del pueblo argelino, enemigos de la democracia, aliados del terrorismo internacional, aliados de las estrategias de tensión, en resumen, todo lo que constituye un buen agente del DRS.

➤ Silvia Cattori : Un pasaje de su libro (página 535) también me parece que aclara las manipulaciones que ha rodeado la guerra contra el pueblo de Afganistán y siguen alimentando la propaganda contra Irán, propagada bajo mano por Israel: “Quienes han apoyado deliberadamente un programa que proclama abiertamente la erradicación de una parte de la población, aquéllos que han ofrecido su ayuda a una tiranía a punto de ser desenmascarada y han asegurado el relevo de su propaganda a un régimen mafioso no son simples espectadores sino cómplices. El periodista, el experto mediático y el político pueden bloquear esta máquina y, sin embargo, han contribuido a engrasar sus mecanismos. Se trata del estadio supremo de la complicidad. (…) Esta innoble tarea es la que en 1998 cumplieron fríamente Bernard-Henri Lévy y André Glucksmann, bien secundados por Daniel Leconte y algunos otros líderes de opinión. (…) No contentos con no hacer nada en beneficio de las víctimas, han militado activamente para impedir que se organice la movilización para frenar a los verdugos…”. Este pasaje produce inquietud acerca de las complicidades que contribuyen a asegurar una audiencia a estos personajes maquiavélicos. Con lo que se sabe hoy de su alineamiento con Israel y los neoconservadores ¡se deduce que no han llegado ahí por casualidad, por error! ¿Están vinculados a semejante aparato?

Lounis Aggoun : Me guardo de enunciar cosas sobre las que no sé nada y me esfuerzo por no escribir nada que no sea capaz de defender ante un tribunal. Me contento con dar por cierto lo que sé y esto es ya suficientemente abrumador para esta comunidad de parásitos. Sin embargo, las redes financieras, industriales, mediáticas, intelectuales, etc., están bien documentadas por muchas obras publicadas en los últimos años y los delitos que Bernard-Henri Lévy atribuye al pueblo argelino son lo suficientemente graves para que sea inútil añadir más. Cada una de sus intervenciones ha sido un atentado contra la simple razón, un atentado contra la humanidad.

 Silvia Cattori : “Resulta penoso escuchar a los medios tratar temas concernientes a los argelinos”, escribe usted al final del libro. ¿En qué son especialmente censurables las cadenas de televisión TF1 y France 2, que usted pide que no se vean? ¿Cree que su redacciones sabían que las masacres atribuidas al Frente Islámico de Salvación (FIS) o al Grupo Islámico Armado (GIA) formaban parte de una “estrategia de la tensión” mantenida por las grandes potencias, entre ellas Francia? ¿Siguen solicitando, para sofocar lo “inconfesable”, a Alain Bauer y Xavier Raufer, que según usted pertenecen a una “nueva clase de expertos, de agentes de influencia que han hecho carrera en los servicios”?

Lounis Aggoun : Cuando se ha comprendido que TF1 fabrica mentiras, que su telediario no hace información sino propaganda machacona hay que ser lógico con uno mismo y no contribuir a engordar las audiencias que legitiman sus agresiones a la verdad. Siendo así, TF1 es una empresa privada que no tiene vocación de informar sino de ayudar a su jefe a ganar contratos para llenar el mundo de hormigón y, a fin de cuentas, lo hace bien. El caso de France 2 es mucho más grave porque su ambición declarada es informar y porque tiene una misión de servicio público que le debería prohibir jugar con la verdad. Ahora bien, su redacción hace el tour de force de hacerlo peor que TF1


Christian de Bongain (alias Xavier Raufer), periodista y criminólogo francés. Ha trabajado y rendido servicio a diversas coberturas de la CIA, especialmente a la National Strategy Information Center de Bush padre.

➤ Silvia Cattori : ¿Nos llevó esta “segunda” guerra de Argelia al clima de desconfianza y de rechazo que hoy conocen los árabes musulmanes, sobre todo en Francia? ¿Y al hecho de que ahí donde se encuentren los argelinos tienen razones para estar inquientos? En resumen, ¿todo se desarrolló como querían los estrategas del Estado?

Lounis Aggoun : La estrategia del miedo no es nueva. Los generales argelinos querían conservar el poder, aún a riesgo de “eliminar a dos millones de argelinos”. Y se ha hecho.

➤ Silvia Cattori : En Argelia la verdad es peligrosa para aquellos dirigentes que no tienen la conciencia tranquila, pero, ¿es también el caso de Francia?

Lounis Aggoun : El hecho de que la verdad sea peligrosa no impide que los argelinos la reclamen, poniendo en peligro sus vidas. El valor de las familias de las víctimas del terrorismo y de sus comités de defensa es infinitamente más meritorio que todos los libros que se pueden publicar al abrigo de la represión inmediata. Los medios de comunicación franceses ocultan sistemáticamente los incesantes esfuerzos de los argelinos para recuperar un poco de dignidad y de soberanía de su propia tierra. Por desgracia, una gran parte del drama argelino se vive en Francia. Pero los medios franceses han llegado a tal grado de compromiso que practican la omerta en una medida aún más importante que en Argelia. 

➤ Silvia Cattori : Hay personas que tienen una exigencia de verdad, pero el gran público casi nunca tiene acceso a esas personas, no es a ellas a quienes se suele invitar a expresarse. Usted les hace honor en su libro. Pienso en este importante testimonio de la connivencia franco-argelina: Lucile Schmid. ¿Existe una autoridad que se le oponga?

Lounis Aggoun : Todo el mundo puede constatar a diario, hasta el punto de que resulta caricaturesco, que cada vez que alguien está dispuesto a denigrar al pueblo argelino y a elogiar los méritos del poder militar es acogido entre cumplidos en todos los platós de televisión. Por el contrario, cualquiera que adopte la defensa del pueblo y critique al régimen se le prohibe en seguida. Anne Dissez estaba presente en las oficinas del FIS en diciembre de 1991 y cuando se anunciaron los resultados de las elecciones fue testigo directa de cómo empalideció el entonces dirigente del FIS, Abdelkader Hachani (un intelectual, vinculado a la democracia y al interés de su país, y no menos islamista), que no deseaba en absoluto la victoria. Después el DRS asesinó a Hachani porque no cuadraba bien con la imagen del islamista degollador de bebés que querían presentar los generales... podría citarle una larga lista de periodistas capaces de hablar inteligentemente de Argelia y a los que no se puede acusar de ser fanáticos del Islam. 

La exterminación mediática de todos los intelectuales argelinos del paísaje audiovisual francés ha sustituido al genocidio físico. Para nadie es un secreto que el poder francés, los medios franceses, están bajo la influencia directa de los servicios secretos argelinos. De hecho, en el estado actual de cosas no hay nada que el poder argelino no pueda permitirse en Francia. Puede hacer estallar bombas, asesinar, sembrar el terror y los medios y politicos franceses vendrán en su ayuda para proclamar que está libre de toda sospecha. El poder que ejerce Argel sobre París es exorbitante. Los generales compraron a cualquiera que detentara un poder o una influencia en el año 2003, hermosamente bautizado “año de Argelia en Francia”; por su parte, se fue apartando gradualmente a los refractarios. Durante todo un año se dieron millones a todos aquellos que se declaraban dispuestos a promover al régimen, a “colaborar” con Argelia, como repetía entoces el representante de Bouteflika, Cheb Mami. El escándalo Khalifa y sus 7.000 millones de euros de fondos dilapidados (que no son sino la parte emergente de la espoliación) no es un asunto entre argelinos, es casi un asunto entre franceses; lo único que ha hecho Argelia, como siempre, es poner la pasta.

➤ Silvia Cattori : Me gustaría volver sobre las relaciones entre el régimen de Bouteflika y el Eliseo, y sobre las acciones que se atribuyen a al-Qaeda en el Magreb islámico (AQMI) evocadas durante la anterior entrevista. En efecto, la entrevista provocó muchos correos de los lectores que, para mi sorpresa, parecían convencidos de que los actos atribuidos por los diversos poderes al AQMI están manipulados por el Estado argelino con la complicidad, sobre todo, de los servicios de inteligencia franceses.

Lounis Aggoun : Se lo decía anteriormente, el AQMI, es el DRS. Dése usted cuenta de que en un momento en que el mundo occidental proclama unánimemente que el terrorismo es el azote promordial que hay que combatir, los interesados se conceden como condición previa a sus investigaciones el excluir de la lista de sospechosos al principal culpable. Por más que el DRS firmara sus actos terroristas, los jueces, los políticos y los medios franceses concernidos organizan unas mascaradas para disculparle y para tratar de identificar a un culpable por esencia imposible de confundir porque, por decreto, estaba libre de toda sospecha. Quedan los subalternos, quienes tienen los pies atrapados en la red, aceptan como los perfectos chivos expiatorios para eliminar el problema creándose buena conciencia, mientras que quienes han ordenado estos actos son recibidos fastuosamenbte en el Eliseo para organizar el saqueo de los recursos de Argelia.


Amari Saïfi (alias Abderazak el Para o Abou Haydara), llamado «el Bin Laden del Sahara», líder del GSPC. Este «terrorista islámico» es en realidad un antiguo comandante de la guardia del Ministerio de la Defensa de Argelia y un agente del Departamento de la Inteligencia y la Seguridad Estatal argelina (antigua Seguridad Militar).

AQMI tiene ante sí una buena época. Pero el nombre de esta organización es en sí mismo una obra maestra de la manipulación. En dos palabras, se les margina de la humanidad, sin otra justificación que la de ver estas palabras así unidas, el Islam y todos los pueblos del Magreb, uniéndolos a al-Qaeda y Osama Ben Laden. En una declaración se pretende que al-Qaeda apoya a la organización y la financian países y organizaciones muy ricos, y en la misma frase que necesita secuestrar a europeos para financiarse. En un momento se afirma que está sobreequipada (sin que nunca, nunca jamás, se pongan en peligro los intereses del régimen argelino contra el que se supone que lucha) y en el siguiente que es un ejército de mendigos. Se otorga a la organización el propósito de llevar a cabo una guerra total contra los invasores y los occidentales, y todo el mundo encuentra normal que nunca haya atentado contra sus intereses (y, sobre todo, contra los estadounidenses que pululan por la zona) cuando el desierto, en el que se supone que vive “como pez en el agua”, oculta miles de kilómetros de oleoductos que sería muy fácil hacer estallar.

Se afirma que la organización está decimada y sin transición que el medio millar de sus soldados controla un territorio tan grande como Europa del este, en un terreno que es de los más hostiles del planeta, donde, sin embargo, se concentran las fuerzas armadas de cuatro países que oficialmente las acosan con el apoyo de las fuerzas especiales de Francia, de la OTAN, de Estados Unidos, etc. Se proclama que estos terrorista pueden atacar donde quieran, cuando quieran y cada vez que atacan es con una finalidad turbia aunque tarde o temprano se descubre que sirve a objetivos puramente crapulosos que, en todo caso, en absoluto tienen nada que ver con ningún móvil religioso. Se pretende que estos hombres son irreductibles y regularmente se difunden sus avisos contra tal o cual país que no se conforma a sus exigencias, como por ejemplo, abrogar la ley sobre el burka en Francia. ¿Quiere esto decir que si Francia se plegara a esta exigencia el AQMI aceptaría dejarla saquear los recursos de los países del Sahel?


Combatientes de Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI)


¿Cómo conciliar esto con el propósito incial de al-Qaeda, que es llevar a cabo una guerra total contra los occidentales? Nunca el AQMI (y antes de él el GSPC (Grupo Salafista para la Predicación y el Combate) o siquiera el GIA) ha cometido en 20 años de existencia un acto que haya contribuido a debilitar al régimen y a servir al pueblo. Se puede probar fácilmente que cada una de sus acciones de envergadura ha ocurrido en un momento clave que ha tenido como consecuencia perjudicar al pueblo argelino y reforzar al régimen.

En las abundantes obras sobre el AQMI, ¿quién recuerda que Amara Saïfi, alias Abderazak El-Para, alias “el Bin Laden del Sahara”, vive apaciblemente en el Club de los Pinos de Argel tras haber sido presentado como la persona que llevó a la adhesión del GSPC a al-Qaeda? Todo esto podría ser alucinante, pero “expertos”, “especialistas”, “directores de institutos”, de “centros de investigación”, de “observatorios” se turnan en los platós de televisión para contarnos, sin reirse, una patraña que sólo se mantiene porque la dicen sin que nadie la contradiga, unos individuos que tiene dificultades para ocultar su afiliación a los servicios secretos. Por ello se impone la prohibición de cualquier palabra que se desmarque de la historia oficial.

La lucha antiterrorista a escala mundial es un fracaso evidente. No tiene como consecuencia difundir la democracia ahí donde no existe sino que la ha destruido ahí donde existía. Es exactamente el objetivo de los terroristas. La única respuesta concreta de los poderes occidentales consiste en proponer medidas de fichaje de la población, la multiplicación de los sistemas de vigilancia, de biometría y, por consiguiente, aniquilar todo lo que las democracias tienen de democrático. ¿Y con qué resultado “pragmático”?

A la larga la presencia de franceses en el Sahel corre el riesgo de ser indefendible. Sin embargo, si se aborda la cuestión desde el punto de vista puramente cínico del interés francés, el interés estratégico es vital. Roland Jacquard, Xavier Raufer, Antoine Sfeir, Louis Caprioli, Jean-Louis Bruguière, Mohamed Sifaoui, estos son los enemigos de Francia porque son los cómplices directos del terrorismo internacional ya que su discurso se articula para disculpar a los verdaderos responsables y echarles la culpa de todo a los subalternos.

Entonces, el AQMI es el DRS.  Quienes pretenden lo contrario son peligrosos falsificadores.  Desafío a cualquiera de todos aquellos que detentan estos poderes (medios, policía, justicia, política, investigación de todo tipo) a aportarme el menor elemento que no sea un chisme inverificable, supuestos atentados desbaratados, confidencias de agentes secretos que no aportan el menor esbozo de prueba.

Desafío a todos estos “expertos” juntos a presentar un solo elemento tangible de lo que ellos afirman sobre el AQMI, si no mensajes virturales enviados por terroristas virtuales que sostienen unas tesis grotescas, que se desarrollan según unos escenarios rocambolescos y se enuncian ante periodistas que parece tener por pliego de condiciones solo tragarse tanto más encantados la mentira cuanto mayores sea, no tienen ambición de acabar con el terrorismo, favorecen la diseminacióm y legitiman la instauración de la dictadura en las sociedades occidentales.

A finales de noviembre de 2010 Nicolas Sarkozy participa en una reunión de la Unión por el Mediterráneo. Cuando se vea en la televisión a los jefes de Estado así reunidos podemos estar seguros de tener ante nosotros a algunos de los claros responsables y organizadores del terrorismo internacional y a sus cómplices, así como a los encubridores de sus acciones. Así es como un puñado de depredadores ejercen su férula sobre la casi totalidad de la humanidad, atribuyéndole las fechorías de las que ellos son instigadores y luego imponiéndole aportar la prueba de su inocencia tras haberle quitado todos los medios que le permitían reunirla.

Es el momento de que esto acabe. Se puede hacer no permitiendo más que pase la mentira, poniendo ante la evidencia a los propagandistas, ahí donde se expresan, en un plató de la televisión o en un bar: ellos son los cómplices indiscutibles del terrorismo. Tendrían muchas dificultades para demostrarles a ustedes lo contrario a pesar de los poderes y de los infinitos medios de los que disponen. 

 Silvia Cattori : Los grandes medios ocultaron su anterior libro, que tuvo una amplia acogida. ¿Cree usted que éste tiene posibilidades de ser mejor acogido mediáticamente?

Lounis Aggoun : Cuando se pretende alinear la crónica insostenible de doscientos años de hechos incofesables no se puede esperar ver a los intermediarios de la mentira permanente promover una obra que describe su propio fracaso...   La “guerra sucia” empezó en 1999, salpicó incluso a Francia y continúa hoy a pesar de las apariencias es la consecuencia directa de esta obsesión argelina de François Mitterrand. 

Cuando se publicó Françalgérie, crimes et mensonges d’Etats, simplemente hemos demostrado por A+B que es patente la mano del DRS a propósito de varias cuestiones sobre las que circulan tesis mentirosas. Nunca se ha hecho el menor desmentido de ninguna de las acusaciones muy graves y con el nombre de los culpables que hay en el libro; la historia nos ha dado la razón sobre muchas cuestiones. Con todo, perdura la mentira y la verdad oficial que harán de los argelinos un pueblo de terroristas en potencia y de los generales asesinos los guardianes de la libertad, los parangones de la democracia.

En resumen, cuando la verdad histórica no es una mentira debe ser calibrada para ser “comercializable”. La historia se ha convertido en un fondo de comercio que gestionan con erudición sus propietarios “legítimos”. A cuenta gotas conceden una verdad molesta, a ese ritmo haría falta un siglo de éxitos de ventas para esperar ver emerger finalemente toda la verdad recontruida a base de retazos. Mientras tanto un pueblo se muere. Es consentir un sacrificio demasiado grande para no cometer un crimen de lesa-autoridad mediática.


Jacques Attali, francés, economista y escritor de ensayos políticos, nacido en la ciudad de Orán (Argelia). Fue escriba del ex presidente François Mitterrand, juega un rol central en las relaciones franco-argelinas y el desarrollo del poder militar.

 Silvia Cattori : En conclusión, ¿qué perspectivas tiene Argelia?

Lounis Aggoun : El problema de Argelia no se resolverá mientras Francia esté bajo influencia argelina y viceversa. El problema principal es de orden mediático, vinculado directamente a la información. No es casual que quien ayudó a Larbi Belkheir y a su gobierno negro a apropiarse de Argelia en la década de 1980, el arquitecto de la descomposición del país, quien concibió el liberalismo salvaje y bárbaro (la forma moderna de tiranía) que arruinó a Argelia sea la misma persona a la que Nicolas Sarkozy confia la tarea de hacer la lista de las “reformas” que hay que llevar a cabo en Francia, el arsenal de la expoliación del pueblo por parte de los poderosos: Jacques Attali, un hombre omnipresente en los medios franceses.

He respondido que hacía falta una revolución y que ésta consiste en no caer en la trampa de la violencia (de la que sólo se benefician los poderosos, los dictadores, las fuerzas ocultas, los aprendices de brujo, los traficantes de armas, los depredadores de toda calaña, los manipuladores, los garantes de la mentira oficial y los terroristas), sino simplemente en exigir la verdad. La revolución pude ser tan simple como una postal enviada asiduamente, una vez al mes (a coste de un sello y hasta que se restablezca la equidad) a la redacción de France 2, a David Pujadas, a Arlette Chabot, para recordarles su misión de informar; a un diputado, a un presidente, a todos aquellos que han traicionado para hacerles saber que no se les votará la próxima vez, ¡y mantener la promesa!


***

Silvia Cattori
Lounis Aggoun

Traducción del francés para Rebelión:
Beatriz Morales Bastos (15.11.2010)

Enlaces originales:
Rebelión

Parte de las fotografías y notas a pie de foto de la entrevista corresponde a Red Voltaire (2010); otras son adiciones del editor del blog.

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