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16 febrero 2015

Mercenarios en Siria




 Combatientes chechenos en Siria


Desatando la guerra




por: Tito Andino U.



La República Árabe Siria cuya población es predominantemente musulmana es un Estado cien por cien laico y multicultural. Antes del infierno desatado en contra de este país convivían pacíficamente, sin problemas políticos, culturales, sociales, económicos o religiosos musulmanes chiies, sunnies y otras derivaciones del Islam junto a grandes comunidades cristianas y judías, sin duda un ejemplo de convivencia pacífica, al igual que lo fue el Líbano antes de la atroz guerra civil que asoló esa nación en los años 80 del siglo pasado. (Beirut en otrora tiempo fue considerada el París del Medio Oriente).


Como un hecho curioso, en Siria, entre mediados de marzo del 2011 empezaron a salir a luz organizaciones armadas “espontáneas” de corte fundamentalista, bien equipadas con un aparato logístico digno de cualquier fuerza armada estatal e inclusive con capacidad de pagar salarios a sus militantes y enviar sus heridos a otros países para restablecerse, algo que un grupo de verdaderos revolucionarios espontáneos no podrían darse el lujo.

Una sublevación, insurrección, levantamiento “popular” no surge de la nada, es evidente que existen clandestinas fuerzas que mueven los hilos y se aprovechan, en ciertas ocasiones, del descontento de una nación contra sus gobernantes; eso, de por si, es algo normal, descontento popular lo hay en cualquier parte del mundo, ningún estado se encuentra exento de la queja de la ciudadanía, las crisis económicas, morales, culturales, de seguridad y otros factores endógenos pueden provocar la ira popular, pero ningún movimiento de lucha o resistencia aparece por arte de magia o, insistimos, “espontáneamente” como en Siria, así  han querido vendernos las notas de la prensa comercial.

Es incuestionable que en Siria hubo protestas y alzamientos contra el gobierno, inclusive en las fuerzas armadas, si, en efecto, esos hechos se dieron al inicio de una crisis orquestada fuera del territorio nacional, ese brote de insurrección fue una tentación para acariciar el poder y con perspectivas de hacer grandes negocios por parte de un grupo de dirigentes opositores que desencadenaron en contra de su propia patria una guerra sin parangón en la historia.

La catástrofe que sufre la República Árabe Siria, declarada objetivo militar por los Estados Unidos, OTAN, Israel y las Monarquías del Golfo no es más que la continuación de la política desestabilizadora del Medio Oriente, la repetición –con otro guión– de la falsa “primavera árabe”, financiada por las mencionadas monarquías y los autodenominados países ’’amigos de Siria”, con la aplicación táctica, sobre el terreno, del proyecto del rediseño del “Medio Oriente ampliado” (1) implantado desde hace ya más de una década por los halcones de la Casa Blanca, con la punta de lanza y fuego encubierto de falsos “rebeldes” sirios que no son más que un aparato logístico de organizaciones internacionales de mercenarios, terroristas y yihadistas que disponen de grandes recursos económicos y armamento.

En cualquier medio de difusión masiva internacional el lector encontrará solamente silencio sobre la mejor arma del pueblo sirio, “los Comités de Reconciliación Nacional”. El gobierno sirio unificando esfuerzos con verdaderos garantes de la paz en el mundo musulmán, como los clérigos del auténtico Islam, con sectores intelectuales y políticos, con las comunidades cristianas y otras confesiones religiosas sirias, con el apoyo de la Cruz Roja y la Media Luna, creó estos Comités que permiten que a diario  se produzca la entrega de armas y sometimiento a las autoridades de ciudadanos sirios agrupados en organizaciones armadas anti gubernamentales.

Este instrumento de verdadera justicia y reinserción es tan efectivo que la oposición externa que apoya la “revuelta popular” se encuentra alarmada e intenta frustrar el efectivo programa, se han dado casos de asesinatos a las autoridades locales de determinadas ciudades que lo dirigen para sabotear su éxito. Estos Comités, luego de un proceso relámpago, establecido dentro del marco de un estatus jurídico especial, otorga amnistía a los sublevados, quienes se comprometen a no volver a realizar actividades que puedan afectar la seguridad del país ni atentar contra la vida de otros ciudadanos por motivaciones políticas.

En el post anterior aseveramos, hoy ratificamos, que alrededor de quince mil opositores al gobierno se han acogido a este programa convencidos y mirando con sus propios ojos que la tal “revolución nacional” contra el Estado de derecho era una falacia urgida por mercenarios de la clase política desde el exterior y llevada a cabo, sobre el terreno, no por sirios sino por miles de combatientes extranjeros que ignoran las causas que originaron este conflicto. Estos hechos incuestionables desmienten las tergiversadas y falsas informaciones de sistemáticos atentados a los derechos humanos a los opositores sirios.

Quiero recordar el bulo de “los miles y miles de ciudadanos sirios torturados y asesinados por el régimen” y que, supuestamente, fueron “fotografiados” por un desertor del ejército. Alguien recuerda?, cuyo falso informe fue elaborado a petición de Qatar y enviado a la ONU a través de una firma de abogados de Londres.  Esa falsa información era uno de los preludios, al igual que el supuesto uso de armas químicas por parte de las tropas de Bashar Al Assad, para desencadenar la invasión y bombardeo de Siria por parte de los Estados Unidos y la OTAN con el fin de apoyar a sus tropas que actúan sobre el terreno (“rebeldes moderados”, yihadistas, islamistas, mejor dicho bandas armadas terroristas bajo diferentes etiquetas según el auspiciante internacional de cada grupo).  


Una paz impuesta desde el extranjero es imposible.


Los "Amigos" de Siria, en la foto solo quedan los malos amigos. 


El enviado especial de la ONU a Siria, Steffan de Mitsura,  afirmó que hay que dedicar todos los esfuerzos para encontrar una solución política y pacífica, con todas las partes dentro y fuera de Siria, en paralelo con la lucha contra el terrorismo y el proceso de reconciliación nacional. (2).

Pero, dicho acuerdo no puede ser viable. En efecto, no puede haber paz en Siria, sencillamente porque el problema NO son los sirios, ni la verdadera oposición política que siempre ha permanecido en el país,  el problema no son siquiera los supuestos rebeldes “moderados” del otrora ‘Ejército Sirio Libre’ que dejó  de existir política y militarmente a pesar de ser auspiciados y financiados desde el extranjero, sus ex mandos políticos y militares se hallan en retirada y los pocos obstinados no son más que asalariados de Occidente y de los petrodólares saudíes y qataríes.

El problema real en Siria es que esta nación viene sufriendo desde hace ya cuatro años una invasión terrorista internacional, orquestada por los “defensores” de la democracia en el mundo (ya sabemos quienes son). Sostengo con toda convicción y argumentos que actualmente NO hay una guerra civil en Siria. El Gobierno legítimo no lucha contra su pueblo, como siguen pretendiendo mentirnos a través de los medios de comunicación occidentales, ni combate contra los opositores del llamado “Consejo Nacional Sirio” que lo único que han hecho es exiliarse y cobrar  dorados sueldos en el extranjero.

No puede haber paz en Siria, a pesar de sinceros esfuerzos por alcanzarla y mientras las billeteras de las monarquías árabes sigan alegremente repartiendo miles y miles de millones de dólares y los Estados Unidos con la OTAN continúen repartiendo juguetes bélicos a los grupos yihadistas.  Ginebra 1 y Ginebra 2 fracasaron rotundamente en claro sabotaje a la paz por estos entrañables “amigos de Siria”, cuando todavía era posible lograrla; a pesar que la verdadera oposición interna siria ha dialogado en días pasados con delegados del gobierno con la mediación rusa en Moscú, aun llegándose a un acuerdo, la paz no vendrá, las decenas de miles de mercenarios extranjeros no responden a ningún mando político opositor interno sirio, ellos tiene su particular guerra y para eso reciben sus salarios de sus padrinos wahabíes y europeos. 

Siria no necesita intermediarios internacionales para traer la paz a su país, sin embargo, Siria acepta con agrado los buenos oficios de los delegados de la ONU para las rondas de negociaciones con la oposición interna y para coordinar la ayuda humanitaria internacional para millones de refugiados.

Conforme hemos demostrado, la verdadera paz dentro de Siria la están construyendo ya los propios sirios con los Comités de Reconciliación Nacional, ese es un asunto que los reales opositores son conscientes de su éxito, pero callan junto a los organismos internacionales.

Para que haya paz total, Siria necesita del apoyo de la ONU en un único sentido, que por su intermedio se logre parar el flujo de terroristas y mercenarios que llegan por miles a combatir en Siria desde territorios colindantes (Turquía, Jordania, Líbano, Israel). Misión imposible para la ONU.


Decenas de miles de yihadistas concurren de los más diversos lugares del mundo a combatir en nombre del “pueblo” sirio y … del Califato.




Un informe del Consejo de Seguridad de la ONU señala que “15000 personas viajaron a Siria e Irak para luchar junto al Emirato Islámico y otros grupos extremistas similares. Esas personas vienen de más 80 países”. (3), transcurrido mucho tiempo se ha ampliado la cifra a veinte mil combatientes foráneos. Falso. 

En esta guerra sucia, nunca antes vista en la historia moderna, contemplamos una invasión, no de un ejército convencional, sino de diversas organizaciones con decenas de miles de mercenarios y terroristas internacionales asalariados, provenientes de todo el mundo musulmán, a la cual debemos sumar el reclutamiento de miles de combatientes voluntarios extranjeros y también sirios, que por sus convicciones religiosas extremistas creen formar parte de una verdadera y literal yihad, son generalmente jóvenes en búsqueda de encontrar un sentido a sus vidas, terminan convirtiéndose, por efecto de la droga y el adoctrinamiento radical, en la carne de cañón de las ofensivas yihadistas. Este increíble híbrido de masas que concurren a Siria, según las monarquías del Golfo, no son más que simples “migraciones espontáneas”.

En realidad, todo indica que esos informes que divulgó el Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas, fueron redactados por Peter Neumann, director del “Centro Internacional de Estudios sobre la Radicalización del King’s Collage” de Londres, organización que recibe financiación del “Centro Interdisciplinario de Herzliya” (Israel), además, el señor Neumann trabaja como experto para la “Open Society” de George Soros (les dice algo estos detalles o son meras coincidencias?). (4)

Párrafos arriba habíamos calificado esos informes de falsos, la razón?. Dichos informes NUNCA toman en cuentan las cifras del flujo de combatientes extranjeros presentados por las partes afectadas en esta invasión internacional: Siria e Irak. Estamos ante otro descomunal, malintencionado y artificioso engaño internacional, propiciado por quien ya sabemos (Estados Unidos-OTAN, Israel, Turquía, Monarquías del Golfo), esos informes barajan cifras de combatientes “espontáneos” que se unen a la revuelta “contra el tirano sirio” como fruto de una investigación seria e imparcial de especialistas de la ONU, la única verdad es que son cifras entregadas por contratistas de Estados Unidos e Israel, conforme se desprende de las entidades a las cuales presta servicio el señor Peter Neumann.

Las cifras de combatientes extranjeros son alrededor de quince veces inferiores a las presentadas por el Ejército Árabe Sirio. Para muestra un ejemplo del mismo señor Neumann, según afirma, el Estado Islámico (EI) atacó Irak, conquistó un territorio más grande que Jordania y ha estado administrándolo con solo 800 hombres, afirma que desde allí ha reforzado grandemente sus tropas, eso bordea el ridículo más grande, es que no habéis dado cuenta?. Según Neumann el Estado Islámico con menos de 5000 hombres a puesto de rodillas a Irak y a humillado a la coalición internacional (estadounidense) que se ve “incapaz” de combatirlo. (5)

Giulietto Chiesa, periodista y ex miembro del Parlamentario Europeo, en una entrevista para la televisión italiana expresó entre otros interesantes detalles: 

“Nosotros, y cuando digo «nosotros» estoy hablando de Estados Unidos y de una parte de Occidente, hemos fabricado enteramente el terrorismo islámico y lo hemos hecho desencadenarse contra una parte de Occidente. Eso es lo que hemos hecho. Las pruebas de lo que estoy diciendo existen y son numerosas.
Pregúntense, ¿cómo puede crearse un ejército de más de 50 000 hombres en menos de un año, el ejército del famoso Estado Islámico (EIIL)?.
¿Cómo puede hacerse eso sin disponer de miles de millones de dólares?.
¿Y quién proporcionó todo ese dinero? ¡Arabia Saudita!
Y si piensa que los servicios secretos saudíes son independientes de los de Estados Unidos, si ustedes creen eso, se equivocan. Los servicios secretos de Arabia Saudita, los de Turquía, los de Qatar, son filiales de la CIA.
Así que si se han utilizado millones y millones de dólares en financiar un verdadero ejército de 50 000 hombres, hay que mirar de dónde salió todo ese dinero. Pero eso no es todo. Hay cosas peores.
La guerra contra Siria fue organizada por los europeos.
Y sabemos todo eso porque hemos visto al senador [estadounidense] McCain fotografiado junto a jefes del Estado Islámico, hace 2 años. ¡Dos años! ¿Qué hacía el senador McCain en Siria? ¿De dónde vienen las armas del llamado Ejército Sirio Libre (ESL)? ¿De dónde vienen? De Turquía, país miembro de la OTAN... Yo participé como parlamentario europeo en la Comisión sobre las prisiones secretas de la CIA… “(6)

Aun este valeroso periodista italiano se queda corto en la cifra de yihadistas que combaten en las filas del ISIS, hoy Estado Islámico o Emirato Islámico, veremos por qué. 



DATOS Y CIFRAS A TENER EN CUENTA

Una de los hechos trascendentales que debemos tener presente es que los yihadistas del Estado Islámico controlan o, controlaban hasta hace poquísimo tiempo, una tercera parte de Irak y en parecida proporción territorios sirios, algo así como 250.000 kilómetros cuadrados, con una población mayor a los diez millones de habitantes.

Es de simple lógica intuir que el Estado Islámico tiene una capacidad fabulosa para lanzar ofensivas sincronizadas desde diferentes y lejanos frentes de lucha entre Siria e Irak, eso es imposible realizar con menos de 200.000 hombres, una cifra que multiplica por diez  las “estimaciones”  de la CIA, entre 20.000 y 31.500  el número de militantes del EI. Nuevamente nos encontramos ante las mentiras de la CIA, que oculta la verdad, así como engaña descaradamente a la comunidad internacional.

El Ejército Árabe Sirio, en junio del 2014 estimaba en 250.000 la cantidad de yihadistas extranjeros que han viajado a Siria desde hace dos años (si doscientos cincuenta mil combatientes), cifra sumamente probable dado la intensidad de la lucha. Otras fuentes amplían hasta 280.000 los militantes del Estado Islámico. Varios entendidos en estrategia aseguran que el yihadismo internacional y sus patrocinadores tienen la capacidad de movilizar hasta medio millón de combatientes, porque recluta, incluso a la fuerza, a  jóvenes árabes de los territorios en que ejerce control. (7)

Como ejemplo citamos nuevamente al señor Neumann, en el 2012 llegaron a Siria dos grupos de hombres desde Libia. El primer contingente era el “GICL” (Grupo Islámico Combatiente en Libia, representante de al-Qaeda en Libia), con al menos 3 000 hombres,  para Neumann solo eran  556 hombres en 3 años. El otro grupo, se integraba por 1500 afganos, según el profesor Neumann solo eran 23 afganos en 3 años.

El Ejército Árabe Sirio calcina los cuerpos de los yihadistas muertos en combate, se exceptúa de esta regla los cuerpos de los individuos cuyos países de origen tienen firmado con Siria acuerdos de repatriación. Un ejemplo más, el gobierno sirio y la Fundación “Emir Abdelkader” de forma totalmente discreta organizaron la repatriación de más de 1000 cadáveres de yihadistas argelinos, aunque el señor Neumann afirma que solo son 250 argelinos muertos en Siria.

En una nota de prensa aparecida en el diario británico “The Independent” (16 noviembre 2014), el Jefe del Estado Mayor de las tropas kurdas en Irak de forma categórica afirmó "Al menos 200.000 hombres luchan en el ejército del Estado Islámico". "En Kurdistán el mes pasado [los yihadistas] lanzaron ataques en siete lugares diferentes, como en Ramadi [capital de la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak] y Jalawla [una ciudad árabe-kurda cerca de la frontera iraní]. Es imposible hablar de menos de 20.000 personas". (8)

Cuál es el propósito de este engaño?

Ocultando la cifra real de combatientes extranjeros y otros reclutados, la prensa comercial, versión OTAN, de las billeteras wahabies-takfires de los reinos árabes, de las “viudas” lloronas turcas (léase el Sultán Erdogan y su Corte, que derraman lágrimas porque no se les permitió a sus ahijados yihadistas del EI exterminar a los kurdos sirios en Kobani) e Israel, difunden al mundo un guión prefabricado:

“Siria vive una revolución interna respaldada por algunos yihadistas extranjeros”.  La República Árabe Siria denuncia una agresión externa en la que participan algunos sirios y sobre todo los yihadistas extranjeros que llegan masivamente del exterior. Este humilde comentarista, es menos diplomático que la diplomacia siria, no se trata de una “agresión externa”, estamos presenciando, en vivo y en directo,  una invasión de mercenarios y terroristas extranjeros, en una guerra nunca vista en la historia.


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ACTUALIZACIÓN:
10 de agosto 2016

Este artículo ha sido uno de los más estudiados en este blog, miles de visitantes lo han consultado. Por esa razón pongo a disposición del amable lector una última actualización con datos sobre los combatientes extranjeros en Siria.

El estudio de investigación estadística elaborado por el Centro Alemán de Estudios “Ferrell” proporcionó nuevas cifras sobre el número global de combatientes extranjeros que se han enrolado en diferentes organizaciones terroristas para invadir Siria (alrededor de 93 nacionalidades). Los números van variando con el pasar de los años.

Según la fuente:

- Desde abril del 2011 hasta finales de 2015 ingresaron a Siria 360.000 elementos foráneos con la intención de combatir contra el gobierno sirio. Esta cifra, según “Ferrell” agrupa hombres y mujeres agrupados en organizaciones terroristas. A más de los combatientes, otros brindan apoyo militar y logístico, atención médica e incluso se coloca en la lista a las denominadas “yihadistas sexuales” (las mujeres extranjeras en Siria -yihadistas-, según el estudio, confirman que Túnez ocupa el primer lugar en la  ‘yihad sexual’.

- Se estima en 95.000 los extremistas y mercenarios extranjeros  eliminados en combate. Se afirma que la mayoría de terroristas extranjeros muertos en Siria son de nacionalidad saudí. De alrededor de 25.000 saudíes incorporados a los grupos yihadistas se calcula que rondan los 6000 terroristas eliminados.

- Según el estudio, no son los saudíes quienes tienen el mayor número de extranjeros combatiendo en Siria. Es el régimen de Erdogan en Turquía quien lleva el estandarte de intervencionismo. Turquía ocupa el primer lugar, Se incluye terroristas y yihadistas propiamente dichos; además, cientos de miembros de las agencias de inteligencia turcas (servicios secretos (Milli İstihbarat Teşkilatı –MIT-) y oficiales del ejército; los turcomanos (en el norte de Siria: Alepo y Latakia, principalmente), cuya tarea básica es combatir a las guerrillas kurdas y lógicamente al Ejército Árabe Sirio; tenemos al poderoso grupo paramilitar y mafioso conocido como “Los Lobos Grises” (Bozkurtlar). Se cuentan por centenares las bajas en esas diversas organizaciones comprometidas con destruir el gobierno sirio.

- El estudio resalta que el número de combatientes con nacionalidad europea y estadounidense ascendió alrededor de los 21.500 (según datos comprobados). De esa cifra, se tiene la certeza que 8.500 retornaron a sus países de origen luego de realizar “turismo de guerra”.

- Siempre siguiendo los datos de la fuente, actualmente  se estima que la cifra de combatientes extranjeros en suelo sirio bordea los 90.000. Significativamente la mayoría de esos mercenarios y terroristas foráneos se encuentran enrolados en las mayores organizaciones consideradas como terroristas (inclusive por los USA/OTAN), es decir, “Estado Islámico” y “Frente al Nusra”, recientemente rebautizado Jabhat Fathá al Sham (Frente de Conquista del Levante).

- El estudio señala que se ha monitoreado el significativo aumento de terroristas procedentes del Asia central hacia Siria desde el 2015. Ese hecho es uno de los factores por los que Rusia y China se han involucrado en el conflicto. Combatir a los extremistas procedentes de las repúblicas del Cáucaso ruso y de las provincias musulmanas de China como medidas preventivas para evitar su retorno. 

- Finalmente, se calcula que alrededor de 45 mil millones de dólares se han derrochado por parte de los auspiciantes de los grupos terroristas y mercenarios extranjeros para costear la invasión, eso incluye operaciones militares, suministro de armamento y demás apoyo logístico, repatriación, cuidado de heridos y pago de salarios del personal de las organizaciones yihadistas o “rebeldes moderados” (según USA y sus socios).
FUENTE: Agencia Árabe Siria de Noticias –SANA- citando el estudio realizado en Berlín por el Centro Alemán de Estudios “Ferrell”.



Próximo capítulo
Mercenarios en Siria. II parte


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Notas:

(1) El regreso del plan yanqui de rediseño del «Medio Oriente ampliado»
por Thierry Meyssan.- http://www.voltairenet.org/article185356.html
(2)  El gobierno sirio está dispuesto a seguir cooperando con el Enviado Especial de Naciones Unidas, dentro de los intereses del pueblo sirio manifestó  el Presidente Bashar al Assad al enviado especial de la ONU a Siria, Steffan de Mitsura, en entrevista celebrada en Damasco el 9 de septiembre del 2014.
(3) Un articulo de Spencer Ackerman, del 30 de octubre de 2014 en el diario británico “The Guardian” (no precisa el autor del documento, pero todo indica que es Peter Neumann) anunció que «un informe del Consejo de Seguridad de la ONU señala que 15 000 personas viajaron a Siria e Irak para luchar junto al Emirato Islámico y otros grupos extremistas similares. Esas personas vienen de más 80 países». El Consejo de Seguridad no redacta informes, los solicita al secretario general de la ONU, este a su vez pide su redacción a sus delegados y comités.
(4) Peter Neumann, Director ICSR.- http://icsr.info/about-us-2/staff/peter-neumann-director/
(5) Uno de los trabajos de Neumann, que nos lleva a la certeza de la autoría del informe para el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas es el siguiente articulo: ‘ICSR Insight: Up to 11,000 foreign fighters in Syria; steep rise among Western Europeans”, del 17 diciembre 2013, http://icsr.info/2013/12/icsr-insight-11000-foreign-fighters-syria-steep-rise-among-western-europeans/  
(6) Giulietto Chiesa habla sobre los europeos y el terrorismo.- entrevista en la TV italiana, 14 enero 2015.  Red Voltaire. 2015,www.voltairenet.org/article186467.html
(7) “Abu Bakr al-Baghdadi, autonombrado Califa del Estado Islámico de Irak y Levante (Ahora Estado Islámico) ha superado en poder económico y captación a bin Laden. Cuenta con una fuerte capacidad para la formación militar de brigadas bien organizadas con unos 4.000 hombres cada una, se estima que cada división cuenta con unos 25.000/30.000 mujhidines desplegadas en Europa, Irak, Levante, Arabia, Oriente Medio, Magreb y Somalia, el ejército islámico de Al-Baghdadi supera los 280.000 hombres, 70.000 viven en occidente, lo que indica que dispone de un financiamiento sólido y sostenido desde Arabia Saudita, Qatar y otros estados terroristas”.
Fuente:http://jihad-e-informacion.blogspot.com.es/2013/12/abu-bakr-al-baghdadi-lider-del-llamado_13.HTML
(8) War with Isis: Islamic militants have army of 200,000, claims senior Kurdish leader 
http://www.independent.co.uk/news/world/middle-east/war-with-isis-islamic-militants-have-army-of-200000-claims-kurdish-leader-9863418.html
* Este articulo se inspiró tras la lectura de una ponencia de Red Voltaire, de donde se obtiene datos estadísticos: ¿Cuántos yihadistas hay en Siria e Irak?.- http://www.voltairenet.org/article185801.html

12 febrero 2015

Bashar Al-Assad, el oftalmólogo de la auténtica resistencia siria.




“No soy una marioneta, no fui creado por Occidente y no iré a Occidente ni a ningún otro país. Soy sirio, debo vivir y morir en Siria”.  Bashar Al-Assad.



por: Tito Andino U.



Desde el punto de vista geográfico, en muchos territorios árabes, en especial en las remotas zonas desérticas del Medio Oriente y África del Norte, a pesar de las fronteras existentes, hay espacios estatales sin control gubernamental, ahí, en esos sitios, es donde predomina una excepcional administración de tipo tribial y familiar, para quienes las demarcaciones fronterizas son inexistentes y donde la tutela del Estado no llega nunca.

Esa idiosincrasia y la formación cultural de la población árabe musulmana siempre conservan la tendencia de buscar un líder natural que ejerza el papel de guía de su nación, eso desde tiempos remotos, incluso antes de la aparición del Islam y la posterior interacción con las políticas de estado. Un líder significa para el musulmán el guía secular que garantiza la armonía entre la ley y la religión.

Para nadie es extraño que líderes políticos del Medio Oriente se perpetúen en el poder y que inclusive haya una fase de sucesión, al estilo monárquico, nada raro, es el reflejo del principio natural del liderazgo que prevalece en esa cultura que sigue manteniendo, en amplias zonas, rasgos tribales, consejos de sabios o de ancianos, clanes y tribus, un sistema legal basado en la tradición y costumbre (derecho consuetudinario), todo un conglomerado de aspectos difíciles de digerir para una sociedad “moderna” y “democrática” como la occidental. 

En general, el mundo árabe no es muy afecto y, en ciertos casos desconoce, lo que nosotros llamamos democracia basada en derechos individuales fundamentales garantizados por una Constitución Política estatal. Así, por citar un ejemplo, El Reino de Arabia Saudí, carece de una Carta Magna, esa monarquía proclama que la Ley debe dictarse en armonía con el Corán y la tradición. 

Otrora, con la llegada de los Imperios foráneos y la supremacía de la fuerza militar, la civilización árabe fue paulatinamente infiltrada y sus líderes contemporáneos no han tenido otro camino que forjar alianzas políticas con sus dominantes, es así como se ha dado desde el siglo XX –preferentemente - una extraña simbiosis entre los imperios occidentales (británico, francés, etc, y luego con los Estados Unidos al surgir como potencia mundial) y las monarquías arábigas. Una convivencia de intereses mutuos, de poder y dominio regional, manipulación de la fe, negocios de petróleo, armas, drogas y más hechos que forjaron una coalición de conveniencias, pero nunca exenta de traiciones.

Con estos antecedentes, en la Siria actual, muchísima gente, confiada en la buena “fe” de la prensa comercial occidental, se creía a pie juntillas que los valerosos “rebeldes” sirios luchaban contra un “tirano” oftalmólogo que recibió, como legado, el cargo que su difunto padre ostentaba. Bashar Al-Assad siempre fue objeto de burla por las monarquías absolutistas e intolerantes del Golfo, no porque representaba al “malo”, sino por su formación profesional, un médico que, al contrario de otros líderes árabes, se formó académicamente en su propio país (su especialización en oftalmología la realizó en Londres) y nunca tuvo aspiraciones ni formación política, hasta que fue llamado en 1994 tras la muerte de su hermano Basel.

Para el mundo árabe, en especial para los reinos wahabíes que intentan manejar la política exterior del mundo islámico, Bashar Al Assad no representaba nada, ni siquiera en su familia. Su padre, Hafez, veía en sus otros hijos, sobre todo en Basel al futuro presidente. Para Bashar, sin embargo, el destino le deparaba otras tareas, quizás la más dura para la que él no se había preparado, enfrentar el caos y la destrucción de su país por parte de invasores extranjeros, en su mayoría provenientes de tierras árabes, pero financiados, armados y equipados por las potencias occidentales y las susodichas monarquías.  

Es casi seguro que las retrogradas monarquías wahabíes del Golfo (Arabia Saudita, Qatar, Emiratos Árabes Unidos) veían en la formación de Bashar Al Assad una debilidad, un hombre que no tendría el temple de enfrentar la cruel acometida que desataron esos reinos contra su pueblo; pero, se equivocaron, Bashar, el oftalmólogo, resultó estar a la altura del duro reto, dotado de un carisma y liderazgo innato, ha logrado mantener unificada a la machacada sociedad siria como un ente monolítico férreo y afrontando la amenaza externa.

El Presidente sirio defendió desde el inicio de la invasión el derecho de las minorías religiosas y la prerrogativa innegociable de un estado laico y multicultural, apostó por las reformas constitucionales (ajenas a la cultura árabe) para satisfacer las demandas de cambios (reclamados desde occidente por “los amigos de Siria” y sus portavoces de la “oposición” siria). Estos cambios en la política interna del gobierno sirio contraponen el deseo oculto de una pseudo oposición radical y fundamentalista que proclama el surgimiento de caducos regímenes de gobierno como los emiratos y califatos regidos por la Sharia.

En la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la República Árabe Siria, el 27 de abril del 2011 (tener en cuenta la fecha), el representante de Siria, señor Jafari, señaló:



   Bashar Jafari, Embajador de la República Árabe Siria ante las Naciones Unidas


Han transcurrido más de seis semanas desde el inicio de los actos de violencia perpetrados por grupos extremistas cuyo objetivo fundamental es claramente la caída del Gobierno de Siria… Como bien sabe el Consejo de Seguridad, el Gobierno ha adoptado muchas medidas en respuesta a las legítimas demandas populares, incluido el levantamiento del estado de emergencia, la abolición del Tribunal de Alta Seguridad y la promulgación, por primera vez en la historia de Siria, de un decreto legislativo sobre el derecho de manifestación pacífica. También se han tomado medidas para combatir la corrupción y responder a las demandas populares sobre cuestiones relacionadas con la vida diaria de los ciudadanos sirios. Asimismo, deseo señalar a la atención del Consejo el hecho de que el Gobierno tomará ulteriores medidas para impulsar las reformas en el país, tras las solicitudes de varios miembros del Consejo.
En lugar de replegarse, a la luz de las medidas reformistas adoptadas por los dirigentes sirios, lamentablemente, los partidos que fomentaron las manifestaciones han respondido con más ataques contra posiciones del ejército y destruyendo instalaciones de seguridad, matando a un gran número de miembros del personal de seguridad, mutilando cadáveres, incrementando las consignas de incitación y quemando establecimientos privados y públicos… En respuesta a las demandas populares, el Presidente de la República Árabe Siria se ha reunido con delegaciones de todas las provincias del país, a fin de responder directamente a las quejas y solicitudes de los ciudadanos. El Presidente ha emitido instrucciones para responder a todas las demandas legítimas, incluida la investigación de todos los asesinatos, y ha declarado que todas las víctimas civiles y militares deben considerarse mártires.Ante estas iniciativas de apertura del Estado y sus instituciones, aquellos que están intentando debilitar a Siria han intentado aprovechar el entorno favorable para erosionar la seguridad y la estabilidad del Estado bloqueando carreteras, amenazando a los ciudadanos, forzando a escuelas e instituciones gubernamentales a cerrar sus puertas y llevando a cabo más actos que van en contra de los intereses de los ciudadanos, de su seguridad y de su capacidad para seguir normalmente con sus vidas en todo el país.La campaña dentro de Siria ha ido acompañada de una campaña mediática sin precedentes en la región contra Siria y sus políticas nacionales y árabes. Se ha incitado al terrorismo y al sabotaje. Se ha dudado de las intenciones del Gobierno. En muchos casos, se han distorsionado los hechos en sus mentes. Se ha incitado a los manifestantes a quemar bienes públicos y se han avivado las dudas sobre su posición en los hechos. Se han alentado los actos de violencia y la justificación para los mismos, en un intento de anular y contrarrestar los esfuerzos reformistas del Gobierno. También se han promulgado “fatuas” fuera de nuestras fronteras exhortando a la oposición a las instituciones del Estado y la autoridad.Esa campaña ha ido acompañada de información que confirmaba que partidos oficiales fuera del país han estado financiando actos de sabotaje contra Siria, su pueblo y sus dirigentes y son responsables de la incitación de los mismos. Me referiré, por ejemplo, a un artículo publicado en el Washington Post fechado el lunes 18 de abril, en el que se afirma que desde el año 2006 el Departamento de Estado ha proporcionado hasta 6 millones de dólares a diversas figuras de la oposición siria a fin de mantener una emisora de televisión por satélite llamada ‘Barada’, con sede en Londres. Además, desde 2005, el Gobierno de los Estados Unidos proporciona apoyo financiero a figuras de la oposición siria. Todo ello es parte de una campaña a largo plazo que, según el Washington Post, “va dirigido contra el régimen del Presidente Bashar Al-Assad”….Las autoridades, conforme a la responsabilidad que les incumbe de proteger el territorio de Siria y sus fronteras con los países vecinos, han requisado numerosos cargamentos de armas destinados a grupos que pretenden socavar la estabilidad y la seguridad en el país. Ha quedado demostrado que esas armas fueron enviadas desde el extranjero por grupos de extremistas religiosos a sus agentes en el interior del país con el objetivo de matar a personas inocentes, incendiar edificios públicos y privados y, en definitiva, provocar el caos en el país. Resulta natural que, ante semejantes circunstancias, el Estado asumiera como haría cualquier otro Estado ante amenazas y peligros similares— su responsabilidad fundamental de atender las peticiones de sus ciudadanos, que venían disfrutando de una situación de paz y seguridad.Las autoridades sirias están convencidas de que estos círculos extremistas no desean reformas; pretenden derrocar al Gobierno recurriendo al asesinato y al caos. Por lo tanto, es natural que las autoridades sirias hayan atendido las peticiones de protección de sus ciudadanos frente a las acciones de esos grupos terroristas extremistas y de restauración del orden en el país. Siria no ve ninguna justificación para que se debata esta cuestión en el Consejo de Seguridad… Nos parecen muy sospechosos los intentos de algunos de transmitir la impresión de que el Estado sirio no protege a su pueblo. Mientras los grupos armados sí han cometido actos de asesinato y destrucción, como he dicho permítaseme subrayar que nadie tiene el derecho de proteger, ni incluso de insinuar que pretende proteger, a esos grupos. El Estado sirio está defendiendo a su pueblo; lo está salvaguardando de las tramas sediciosas que vienen urdiendo los enemigos de Siria con el propósito de socavar su seguridad e independencia. Está contrarrestando la inmensa presión política ejercida por algunos desde el extranjero con la intención de cambiar las políticas nacionales que están al servicio de los intereses del pueblo y de la nación…
Creemos que algunas de las declaraciones que hemos escuchado hoy contra Siria sólo pueden considerarse una manifestación de apoyo al extremismo y al terrorismo. El precio lo pagarán personas inocentes tanto en Siria como en el resto del mundo. La estabilidad y la paz en la región también saldrán perdiendo. No nos parece que la convocación de estas reuniones pueda redundar en interés del pueblo sirio, más aún si los grupos extremistas consideran estas reuniones como una muestra internacional de apoyo tanto a ellos mismos como a sus prácticas ilegales.Reafirmamos que la era del colonialismo terminó. Todos los pueblos del mundo son ahora conscientes de los nuevos métodos a los que recurren algunos Estados para injerirse en los asuntos de otros Estados, ya sea aduciendo la llamada responsabilidad de proteger o la intervención humanitaria, nociones que han sido rechazadas por todos los países en desarrollo, aún cuando se pretenden imponer a través de los foros internacionales, incluidas las Naciones Unidas. Siempre hemos temido que el uso de conceptos tan elevados socave la unidad, la soberanía y la independencia de los pueblos de los países en desarrollo.Siria insiste en que lo que está ocurriendo sobre el terreno no puede de ninguna manera calificarse como manifestaciones pacíficas. De ser así, ¿cómo podrían haber caído tantos mártires entre nuestras fuerzas de seguridad, nuestro ejército y nuestros civiles inocentes? Siria también recalca que seguirá avanzando en el camino de las reformas, tal y como lo anunció el Presidente de la República Árabe Siria. Seguiremos atendiendo las legítimas demandas de nuestros ciudadanos; seguiremos protegiendo su vida y sus propiedades. No permitiremos que el terrorismo o el extremismo maten a nuestro pueblo. Esperamos que los líderes de los miembros del Consejo de Seguridad alienten las reformas nacionales en lugar de pretender hacer caso omiso del camino de reformas ya emprendido y sembrar dudas acerca de los continuados proyectos de reforma acometidos por mi Gobierno, reforma que está en marcha y que proseguirá…”.

En pocas partes del mundo, donde la religión es parte de la política, como en las sociedades islámicas, un pueblo como el sirio, lucha por defender la libertad de cultos, a costa, incluso del sacrificio de miles de soldados sirios. Debemos tener muy presente que el Ejército Árabe Sirio es uno de los pocos (al igual que el libanés) donde combaten codo a codo, en una verdadera hermandad, musulmanes shiíes y  suníes, cristianos, alulíes, drusos, judíos y otras pequeñas confesiones religiosas en defensa de su Patria.

Siempre insistiremos que Siria es un Estado laico, sin privilegios por razones de creencias religiosas. La Constitución de Siria de 1920 (non nata) declaró la división de poderes y la libertad de cultos, estableció que todos los sirios tenían los mismos derechos y obligaciones por ser iguales ante la ley en contraparte a las tradiciones jurídicas islámicas.



    Issam al-Zaherdinne, el General druso del Ejército Árabe Sirio


 muchísima gente en el mundo le consta como soldados cristianos del Ejército Árabe Sirio han ofrendado su vida defendiendo mezquitas de los criminales takfires, reverenciando la fe musulmana los soldados cristianos suelen sacarse sus botas de combate -como señal de respeto al templo que defienden- y suelen caer heridos por las cortaduras que les producen en sus pies los vidrios destrozados fruto del cañoneo de los yihadistas contra las mezquitas. Si, un grupo de vándalos que se declaran combatientes por la fe islámica destruyendo mezquitas. Muchos de esos valientes soldados cristianos han sido capturados por las sanguinarias bandas y sometidos a tortuosa muerte, nadie puede olvidar a esos verdaderos mártires. (Recomiendo ver el documental  "El Diario Sirio", anexo en este blog en la barra lateral derecha).

Todo esto, debe hacernos reflexionar que, en Siria, a pesar del aparente levantamiento –manipulación de sectores sociales y militares– al inicio del conflicto, las cosas han ido tomando su cause: la gente, que en un principio, bajo engaño, se puso en contra del estado sirio, ha advertido el timo que ha sufrido, ha identificado quienes manipulan la conciencia del pueblo con falaces e interesadas desinformaciones.

Los sirios y, la comunidad internacional, se han asombrado al comprobar que, salvo escasos grupos, no eran los sirios quienes proclamaban el alzamiento y la revolución contra el “tirano”. De la noche a la mañana aparecieron decenas de miles de “rebeldes” y “revolucionarios” que en nada se parecían a los habitantes sirios y que ni siquiera hablaban árabe, ni tenían sus costumbres. Eran las bandas de yihadistas mercenarios provenientes del extranjero, grupos radicales que venían de sembrar la “democracia” en Libia. Aquellos incautos sirios engañados también pudieron apreciar como los líderes de los “revolucionarios sirios” no eran connacionales, sino expertos combatientes chechenos, saudíes, qataríes, argelinos, turcos, libios y muchos agentes encubiertos franceses, israelíes, británicos, etc.

Ante esa disyuntiva, aquellos renegados sirios hicieron lo correcto, encaminar sus pasos por el sendero de la razón, aunque no apoyen al jefe del gobierno, lo primordial es defender a su Patria de la agresión.

Hoy, miles de sirios (se estima que alrededor de quince mil hasta la fecha), engañados por el grupo de países autodenominados “amigos de Siria” y que torpemente creyeron a los militantes extranjeros, han bajado las armas. La ley siria les garantiza su seguridad y derecho a vivir con decoro dentro de su país, en sus casas (o lo que queda de ellas tras la salvaje destrucción), cientos de desertores del ejército y civiles sublevados, al reincorporarse al estado de derecho, prestan sus servicios nuevamente en las unidades de la defensa nacional, de las fuerzas armadas o de la policía. Otro ejemplo de que en Siria no existe el “tirano” que los medios de desinformación masiva internacional nos venden todos los días en sus tiradas noticiosas. 















La prensa comercial occidental, sobre todo los medios de habla inglesa, está comprometida al servicio de los intereses de los Estados Unidos-OTAN, son la fuente de desinformación a nivel global. Sus articulistas, con un guión prefabricado, al estilo “Hollywood”, no guardan el más mínimo grado de justicia para una nación que resiste una invasión extranjera maquillada de “oposición” interna. Por ejemplo, el mero hecho de dar protagonismo y citar constantemente los incendiarios comentarios del senador John McCain, confirma lo evidente, tergiversado, malicioso y afrentoso de la “noticia” que correrá como pólvora por el mundo, citar como fuente creíble al gángster McCain es una afrenta, no al lector, sino a las victimas de esa política, el senador McCain es una víbora que fomenta en sus viajes internacionales la guerra y la destrucción de todos los que se oponen a la política globalizadora de los Estados Unidos y sus socios.

La prensa comprometida con los poderes fácticos elogia al verdadero terrorismo internacional, se niega, por obvias razones, dar crédito de la verdadera resistencia del pueblo sirio. Los sirios no quieren terroristas asesinos de Al Nusra, del  Estado Islámico (antes ISIS) o del ficticio Ejército Sirio Libre como sus defensores contra el “tirano”. Miles de veces prefieren al “tirano’ que a un montón de dementes criminales que cortan cabezas y comen hígados humanos, que matan impunemente a sencillos ciudadanos musulmanes por no saber recitar de memoria el Corán, que masacran a los cristianos y les cobran impuestos por el simple hecho de ser cristianos y les expulsan de sus tierras, que destruyen a tiro de artillería y explosivos las mezquitas que no son de la corriente que ellos practican.

La población siria, desde el más humilde habitante de los desérticos parajes, miles de veces preferirá al ‘tirano’ contra esas hordas genocidas. Miles de veces lo elegirá porque representa la lucha y protesta contra los genocidas israelíes que impunemente asesinan a musulmanes, mientras los ‘rebeldes’ de Al Nusra y Estado Islámico no se pronuncian en absoluto.

-Qué extraño- se preguntará mucha gente, por qué esos “rebeldes” son socios de Israel? Cuál es la razón para que Israel les proporcione armamento y hospitales para sanar sus heridos?. Esos “rebeldes” que hacen el trabajo sucio, que el estado hebreo no quiere realizar para evitar la crítica internacional pero que coadyuva en la destrucción de los únicos países árabes que pueden oponérsele, no son otros que las milicias terroristas del Frente Al Nusra, organización calificada de terrorista por las Naciones Unidas. Los “rebeldes” se han entregado en cuerpo y alma, incluso, como fruto de esa traición, han ofrecido entregar definitivamente la soberanía del territorio sirio del Golán a cambio que Israel ayude a destruir al “tirano”.

Por eso y muchas otras razones, el pobre y sufrido ciudadano sirio preferirá mil veces al ‘tirano’ Al-Assad que a una aborrecible masa de psicópatas que, en vez de hacer su yihad contra el verdadero enemigo de los estados islámicos se alía con éste (Israel). Mil veces preferirán los sirios al ‘tirano’ que a la humillación pública de los “rebeldes”, quienes vendieron desde el principio su alma y conciencia por un ridículo puñado de dólares a las verdaderas tiranías, representadas por los reinos takfiríes – wahabíes (Arabia Saudí, Quatar y otros estados del Golfo), quienes llevan una guerra de intolerancia contra otros estados musulmanes, por profesar una corriente distinta a su radicalismo, les resulta intrascendente gastar miles de millones de dólares financiando a esos asesinos dispuestos a aniquilar una nación.
 
En este contexto, Bashar Al-Assad representa no solo a su pueblo, ante el salvajismo y la intolerancia y los execrables crímenes que se perpetran contra su nación. 



Bashar Al-Assad constituye un símbolo que personifica la civilización y la verdadera convivencia entre Occidente y Oriente en antítesis con la doctrina del “choque de civilizaciones” que pregonan los agoreros globalizadores del nuevo orden mundial.  Bashar Al-Assad ha logrado con la auténtica resistencia siria paralizar por siempre el plan estadounidense de “Rediseño del Medio Oriente Ampliado”.

No es exagerar decir que el caudillo sirio, con la firmeza heroica de su nación, ha demostrado que no hay poder en el mundo que pueda revertir el auténtico sentir popular, el amor a la Patria.



09 febrero 2015

MUNDO BELICO, los héroes del cine americano


















por: Tito Andino U.


Desde comienzos de año mucho se ha publicitado un film de guerra “El francotirador” (American Sniper), una producción americana dirigida por el famoso “Harry el Sucio”, Clint Eastwood. Según los críticos de cine es una autobiografía de Chris Kyle, un militar estadounidense retirado que formó parte de los SEAL (fuerza especial del cuerpo de la Infantería de Marina de los Estados Unidos).

A Kyle se le atribuye más de cien bajas al enemigo, en este caso “terroristas” iraquíes, este detalle le enmarca dentro del selecto club mundial de los francotiradores más mortíferos que han existido en la historia reciente como el finlandés Simo Häyhä, el mítico fusilero ruso Vassili Zaitsev o la también rusa  Natalya Kovshova y varios miembros de la infantería de marina americana a quienes se les atribuye más de cien blancos en la guerra de Vietnam.

El motivo de este artículo no es hablar de francotiradores ni del número de bajas que ocasionaron, queremos enfocarnos en algo sorprendente, como el Pentágono explota en su beneficio el sentimiento popular manipulado por intermedio de la industria cinematográfica a través de ingentes recursos financieros que genera publicitar el “arte de la guerra” al estilo Hollywood. 

El cine es uno de los mejores aliados con que cuenta el complejo militar industrial, por ende constituye el medio propagandístico de la política exterior norteamericana, que nos vende la imagen de los salvadores y pacificadores de las crisis internacionales (que ellos mismo provocan).

Esta difusión mundial del cine de guerra de Hollywood aparenta ser nada más que eso, cine, películas de acción con un matiz histórico, pero tras bastidores se encuentra una alianza tácita entre los productores cinematográficos, inversores privados,  la industria militar, el Pentágono, el Gobierno estadounidense y los servicios secretos en una alianza para enaltecer el poder, la grandeza de una nación y dotar de una supuesta fuerza moral a sus combatientes por la "libertad" en todo el mundo. Lo último, debemos entender como propaganda, lógicamente.


¿Cuáles son los objetivos que persigue la alianza Pentágono - Hollywood?. 

No pretende conseguir solo el visto bueno de la ciudadanía para una política intervencionista global, sino, al mismo tiempo ganar muchos, muchísimos millones de dólares utilizando a famosos artistas que tienen la capacidad de influir en las mentes y actitudes de las masas:

1) Adoctrinar a la población con un engañoso sentimiento de patriotismo mediante los programas de guerra psicológica preparados por la CIA;

2) Crear el mito del invencible héroe guerrero americano, tipo Rambo, un solo fornido y valeroso comando eliminando a decenas de ‘malos’;

3) Exaltar la guerra como medio “lógico” de la solución de las controversias internacionales;
4) Inculcar a la gente que el gobierno tiene el derecho de matar en nombre de su país, aunque los antecedentes que originan un conflicto sean sumamente dudosos;
5) Validar cualquier objetivo –civil o militar – en la lucha contra el  “terrorismo”, son los resultados los que cuentan y no las vidas destruidas;
6) Desconocer, cuando es necesario para sus intereses, las normas del derecho internacional que garantizan la protección de los no combatientes (civiles);
7) Acusar a cualquier estado por crímenes de guerra, excepto los Estados Unidos de Norteamérica, porque al auto nombrarse “Policía Mundial” tiene libertad para señalar la diferencia entre el bien y el mal, de allí que se enfatice en los países miembros del “eje del mal” como dictaduras tiránicas, promotoras del terrorismo, etc., por consiguiente un objetivo legítimo;
8) Enviar un mensaje al mundo entero, cualquiera que ose alzar la voz será punto de mira de sus francotiradores;

9) Eliminar cualquier vestigio de duda o culpa en la población y en las tropas por el frecuente uso de la tortura en su lucha contra el “terror”, argumentando que hacen el trabajo necesario para mantener la paz y estabilidad en el mundo, clarísimo, el fin justifica los medios;
10) Garantizar, únicamente mediante la  propaganda del cine de guerra, un alto índice de reclutamiento de nuevos voluntarios para las fuerzas armadas estadounidenses, valiéndose de famosos actores. ¿Quién no desea imitar a Stallone, Schwarzenegger, Brad Pitt, Tom Cruise, George Clooney, Tom Hanks y los clásicos de antaño, etc.?

Antecedentes históricos de la relación Hollywood – Complejo militar industrial – Casa Blanca.



“Ustedes creen lo que nosotros queremos que crean", Karl Rove (1)

En cierto tiempo y lugar, durante la época del gobierno de George W. Bush, que declaró la “guerra contra el terror” y el “advenimiento de un nuevo orden mundial”, acaeció una fructífera y apasionada sesión laboral, a ella asistieron los magnates de la Meca, del cine claro está, la banca inversora, representantes del Congreso y los delegados del Pentágono y los servicios secretos, entre ellos destacaba un asesor de Bush, quizá pocos han escuchado sobre él, pero en su época dejó huellas (no muy buenas), Karl Rove es su nombre, a quien debemos la célebre frase “ustedes creen lo que nosotros queremos que crean", en referencia a como Hollywood debía crear y favorecer a la política estadounidense en sus guerras pro globalización; mejor dicho, para que suene más entendible: en la guerra contra el “terrorismo”.

David Robb, periodista y experto conocedor del mundo del cine publicó un libro fruto de su experiencia en el mundillo del espectáculo: “OPERATION HOLLYWOOD. How the Pentagon Shapes and Censors the Movies” (2). Sin duda producir una película cuesta mucho dinero y, por supuesto, hay que mirar el mercado, “más que una buena película, lo que gusta en Hollywood es un buen negocio", afirma el autor.

Los productores de cine encontraron la alianza con los militares sumamente beneficiosa, ya que los costes de la escenografía serian monstruosos sin la participación directa del Pentágono que aporta con  tropas como actores extras, armamento, barcos, aviones y otros materiales logísticos. En compensación los guiones de las futuras películas deben ser “acomodadas” a los intereses de la cúpula militar, cualquier objeción a esos “arreglos” en el argumento puede ocasionar que el film no se realice. No termina allí el asunto, el Alto Mando suele enviar “consejeros” a los escenarios de rodaje para verificar el correcto seguimiento del guión aprobado, así como tienen que ser los primeros en verificar el producto final antes que llegue a las carteleras públicas.



Esta alianza tiene una vieja data, veamos algunos detalles:

Los primeros pasos para “promover el espíritu americano en el mundo” se dieron ya por 1917 en la presidencia de Woodrow Wilson, se llegó a un acuerdo para que Hollywood produzca films informativos para la ciudadanía. 

La Casa Blanca tuvo que otorgar subsidios en la segunda guerra mundial para que Hollywood alimente la propaganda bélica no solo en el ámbito interno sino con proyección  a todo el mundo.

Al llegar la era de la Guerra Fría, Hollywood se unió en el esfuerzo para la caza de fantasmas en la industria del cine al crear listas negras de personas vinculadas a la industria cinematográfica a quienes consideraban sospechosos de simpatizar con el enemigo, el comunismo. De allí surgieron los héroes de fantasía como James Bond.

Luego, Hollywood y el Pentágono necesitaron crear un nuevo enemigo, la industria del cine bélico  corría “peligro” por falta de libretos de acción y guerras (los conflictos de baja intensidad no cuentan, no dan espectadores), por suerte ya estaban presentes los “tiranos” gobernantes que auspiciaban el “terrorismo” en el mundo. Desde el castrismo en Cuba, pasando por la Libia de Gadafi en el África hacia Medio y Extremo Oriente con los terroristas palestinos y  Sadam Hussein, el Viet-cong vietnamita y los malévolos coreanos del norte entre otros  “villanos”, hasta volviéndose a los rezagos del “totalitarismo” en Europa (Yugoslavia) y ni hablar de los perversos rusos con su anterior “Imperio del Mal” según Ronald Reagan y el peligroso Putin que encabeza el actual “Eje del Mal“ junto a los "terroristas" ayatolás iraníes y el "dictador" sirio.  


Las cintas de guerra volvieron a florecer y el Pentágono interpretó una vez más su rol estelar del bueno de la película; por eso, ha sido Hollywood quien determinó y lo seguirá haciendo, mientras ejerza un monopolio en la industria del cine, quien será el vencedor, aunque en este caso, la realidad sea sobrepasada por la ficción.

Desde el fin de la URSS e inconformes con los resultados (económicos – políticos), argumentos para unos excelentes guiones y escenarios brotan de maravilla en el presente, la oportunidad ha llegado gracias a los descerebrados representantes del “terrorismo global”, organizaciones de corte fundamentalista islámico se ofrecieron, conscientes o no, a ser los nuevos coprotagonistas del cine bélico americano, una gran oportunidad para Hollywood y sus socios para seguir haciendo pingues negocios y que el gobierno siga enalteciendo la desinteresada devoción de defender la civilización y la democracia.

De todo esto, es absolutamente irrelevante que la mayoría de los grupos de energúmenos yihadistas sean concebidos por los servicios secretos occidentales, a quién diablos le importa ese insignificante detalle? Lo que importa es el buen cine y las excelentes ganancias.

No pretendo hacer uso de la lista de películas de Hollywood en el género bélico, cualquier lector en este momento tendrá ya en su mente los recuerdos de aquellas emocionantes escenas que han impregnado por siempre el deseo de la niñez y la juventud de convertirse en hombres y enrolarse en el ejército e ir a matar a los malos, como bien señala el autor de “Operation Hollywood”:

“La propaganda persigue un fin común, reclutar personal y vender al público la necesidad de un cuerpo militar victorioso”Por generaciones enteras las fuerzas armadas estadounidenses tienen garantizado un material humano bien adoctrinado desde la infancia.

Como corolario, para la “Guerra contra el Terror” proclamada por George W. Bush, una concepción maestra de un conglomerado de socios notables: Casa Blanca - Pentágono - Complejo Militar Industrial - Hollywood, se resume en que:

No puede haber héroes sin villanos.  


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(1) El ‘cerebro’ del presidente de los EEUU, BUSH –ROVE: POLITICA Y DELITO.- Red Voltaire, 23 septiembre 2004, http://www.voltairenet.org/article122090.html.
(2) “Operación Hollywood: La censura del Pentágono” (versión en castellano).- David L. Robb. Océano Editorial, Primera edición febrero 2006. Páginas 453, ISBN:9788449426964. Barcelona – España.

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