Bienvenido a este Blog. Detectives de Guerra le brinda los mejores análisis de los conflictos internacionales de actualidad
Mostrando entradas con la etiqueta Fuerzas Democráticas de Siria. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Fuerzas Democráticas de Siria. Mostrar todas las entradas

28 julio 2017

KURDISTÁN: El mito de la excelencia moral del YPG kurdo (9)




Un breve prólogo


Lo hemos dicho antes, citando a Pepe Escobar, las valientes guerreras kurdas “corren un peligro mortal de ser, si no esclavizadas, cruelmente traicionadas”. La primera posibilidad no podrá ser, los yihadistas están siendo derrotados en todos los frentes de batalla. No obstante, la cruel traición sigue su curso, los líderes del PKK/YPG han desairado el honor de aquellas intrépidas mujeres, entregándose en alma, corazón y vida a los estadounidenses. Será otro ejemplo de la moderna esclavitud?. 

En esta oportunidad revisaremos lo que piensa un analista canadiense respecto a la guerra en el norte de Siria. Sus observaciones son valiosas ya que nos aclara de donde surgió ese ideal de “comunitarismo” que pregonan los kurdos y cuáles son las consecuencias de ese fraudulento intento de convertir una región tradicional y por excelencia árabe en un “protectorado” kurdo.

Los combatientes kurdos en el norte de Siria ofrecieron promesas a cambio del reconocimiento del gobierno de Estados Unidos, recibiendo el apoyo de algunos liberales / izquierdistas estadounidenses. Stephen Gowans explica que el antiguo PKK marxista ha cambiado su ideología al "federalismo democrático", influenciado por Murray Bookchin, de los Estados Unidos. Su perspectiva se asemeja al viejo movimiento del Bundist cuyos líderes establecieron Israel.

Este valioso ensayo escrito por Stephen Gowans hace una crítica no solamente a las pretensiones kurdas sino que es un llamado de atención a los movimientos que se califican de izquierda, concretamente se refiere a “The International Socialist Organization” (ISO) (Organización Internacional Socialista) y la orientación de la mayoría de la izquierda occidental en contra del gobierno nacionalista árabe de Damasco.

Ahora, es todavía muy temprano para saber cómo evolucionará este particular caso de los kurdos sirios tras la decisión del presidente Trump que ha rechazado la guerra terrorista para apuntalar la política exterior norteamericana, lo que implica dejar de financiar, entrenar y armar a los “opositores” democráticos al gobierno de Damasco. Trump lo está realizando! contra viento y marea de sus oponentes en casa y de sus aliados externos. Las preguntas son varias: Se extenderá la doctrina Trump a los kurdos del PKK/YPG?; desestimará el presidente la propuesta de fraccionar la República Árabe Siria?. Será posible que el Pentágono y, sobre todo, la CIA secunden las órdenes del mandatario?.

Esta investigación de Gowans refuerza con sobrado mérito nuestro duro trabajo de recopilación de datos y estudios sobre una región conocida como el Kurdistán, sintetizado desde la objetividad de los hechos, con los píes en la tierra y no desde el punto de vista personal de trasnochados "revolucionarios" con una romántica versión de una falsa ilusión. El lector sacará sus propias conclusiones. Por favor, si alguien va a comentar que lo haga luego de leer, no solo este reportaje sino los demás relacionados con el tema (o al menos den una “pasadita de reojo”). 

Me siento defraudado con mucha gente que se dice socialista, anarquista, utopista o no sé qué más cuentos, se que son apasionados pero sobrepasan la insensatez, convencidos que los “sionistas” y “agentes” del Mossad son contrarios a la creación del Kurdistán! 
Alguien me ha dicho “Estás en contra de un Estado Kurdo? Eres del Mossad?”

No me prolongaré más, lamento expresar que las mentes críticas escasean, precisamente en el sector que el autor de este ensayo (Stephan Gowans) califica de “izquierda” occidental (tipo Socialistas del PSOE español, no se diga de los “sociolistos” franceses y otros de Europa); y, de aquellos que se consideran Republicanos, anárquicos o que siguen creyendo en el cuento de hadas de la “utopía, paz y libertad”.

Un agradecimiento personal a Stephan Gowans por permitirme traducir y reproducir su investigación y gracias también a “San” Google Traslator que sin su ayuda me resultaría una tarea interminable traerles el siguiente texto.

Buena lectura al público reflexivo, que por suerte también me lee.

                                                                    t. andino



STEPHEN GOWANS, es autor del libro “Washington’s Long War On Syria” (La larga guerra de Washington sobre Siria), no traducido al castellano.

Stephen Gowans es un escritor y activista político canadiense, reside en Ottawa (Canadá). Escribía una columna regular para “Canadian Content” y es frecuente colaborador de “Media Monitors Network”. 

A menudo es entrevistado en el programa radial “The Taylor Report” (CIUT 89.5, Toronto). Gowans mantiene su propio sitio web, el popular y ampliamente leído "What's Left".


*****

El mito de la excelencia moral del
YPG kurdo




Al contrario de la propaganda del régimen de Lincoln lanzada por estalinistas como Karl Marx, el movimiento rebelde estadounidense también incluye capas sociales que se oponen a la esclavitud - simplemente no sabemos quiénes son, pero están ahí - detengan las bombas de los cañónes de Lincoln!
Si la ISO existía en 1865



By Stephen Gowans

Una crítica enérgica dirigida a la Organización Internacional Socialista, abarca una verdad sobre la orientación de grandes sectores de la izquierda occidental hacia el gobierno nacionalista árabe en Damasco. La verdad que se revela en el gráfico es que la ISO y sus cognados no dejarán de mover piedra alguna en la búsqueda de una fuerza nativa siria que apoye las armas contra Damasco, hasta el punto de insistir en que un grupo digno de apoyo debe seguramente existir, incluso si no puede ser identificado.

Washington presta una mano servicial denominando a sus protegidos en los términos más elogiosos. Los ”insurgentes” islámicos en Siria, principalmente Al Qaeda, no han sido desde hace muchos años ensalzados como un movimiento pro-democrático, y cuando ese engaño resultó ya no sostenible, se los denominó como “moderados”. Ahora que los llamados moderados han sido expuestos como lo opuesto, muchos izquierdistas se aferran a la esperanza de que en medio de los opositores islámicos del gobierno secular y socialista árabe de Siria se pueden encontrar votantes de los valores de la iluminación que Damasco ya abraza. 

Seguramente en algún lugar existen izquierdistas seculares anti-gubernamentales armados que se reúnan en retaguardia; parece que el objetivo es encontrar una razón, cualquier razón, por débil que sea, para crear un nimbo de excelencia moral en torno a algún grupo que se opone con las armas al gobierno en Damasco; algún grupo que pueda hacerse parecer no sectario, antiimperialista, socialista, comprometido con los derechos de las mujeres y las minorías, y pro-palestino; En otras palabras, un grupo como los socialistas árabes Ba'ath de Siria, excepto ellos.

El PKK es un grupo guerrillero anarquista demonizado como organización terrorista cuando opera en Turquía contra el aliado estadounidense, pero que lleva el nombre de YPG en Siria, donde es el componente principal de las "Fuerzas Democráticas de Siria". Tan atractivo es el YPG para muchos izquierdistas occidentales que algunos han ido tan lejos como para ser voluntarios y luchar en sus unidades. ¿Pero es el YPG la gran esperanza que se cree que es?

Kurdos en Siria 

Es difícil determinar con precisión cuántos kurdos existen en Siria, pero está claro que el grupo étnico sólo comprende un pequeño porcentaje de la población siria (menos del 10 por ciento según la CIA y el 8,5 por ciento de acuerdo con una estimación citada por Nikolaos Van Dam en su libro La lucha por el poder en Siria [1]. Las estimaciones de la proporción de la población total kurda que viven en Siria varían de dos a siete por ciento sobre la base de las cifras de población presentadas en ‘CIA World Factbook’. Mitad de la comunidad kurda vive en Turquía, el 28 por ciento en Irán y el 20 por ciento en Irak. Un informe desclasificado del Departamento de Estado de Estados Unidos de 1972 estimó que sólo entre el cuatro y el cinco por ciento de los kurdos del mundo vivían en Siria. [2] Aunque las estimaciones son aproximadas, está claro que los kurdos representan una proporción bastante pequeña de la población siria y el número de miembros del grupo que viven en Siria como proporción, en su conjunto es muy pequeño.


Mapa elaborado por la CIA en que se señala el “estado” de los kurdos y sus pretensiones territoriales en otras regiones.



Los combatientes kurdos en Siria operan bajo el nombre de YPG, que está "ligado al Partido de los Trabajadores del Kurdistán o PKK, un movimiento guerrillero radical que combina [ideas anarquistas] con el nacionalismo kurdo. Los guerrilleros del PKK han luchado contra el Estado turco desde 1978 y el PKK es clasificado como organización terrorista por la Unión Europea, Turquía y los Estados Unidos "[3]



El PKK

Cemil Bayik es el principal comandante de campo tanto del PKK en Turquía como de su encarnación siria, el YPG. Bayik "encabeza la organización protectora del PKK, la KCK, que une a los afiliados del PKK en diferentes países. Todos siguen al mismo líder, Abdullah Ocalan, que ha estado en prisión en Turquía" [4] desde 1999, cuando fue detenido por las autoridades turcas con la ayuda de la CIA. 


Abdullha Ocalan - PKK


Ocalan "fue una vez un devoto del marxismo-leninismo", según Carne Ross, quien escribió un perfil del líder nacionalista kurdo en The Financial Times en 2015. Pero Ocalan "llegó a creer que, el capitalismo, el comunismo se basaba forzosamente en la coerción”. Encarcelado en una isla en el Mar de Mármara, Ocalan descubrió "la obra maestra de un pensador político de New York llamado Murray Bookchin. Bookchin "creía que la verdadera democracia sólo podía prosperar cuando la toma de decisiones pertenecía a la comunidad local y no fuera monopolizada por distantes e inexplicables elites". El gobierno era necesario, razonó Bookchin, pero la toma de decisiones necesitaba ser descentralizada e inclusiva. Mientras anarquista, Bookchin prefirió llamar su enfoque "comunalismo". Ocalan adaptó las ideas de Bookchin al nacionalismo kurdo, calificando la nueva filosofía de "confederalismo democrático". [5]

El Sionismo Laborista tiene ideas similares sobre un sistema político basado en comunas descentralizadas, pero es, en el fondo, un movimiento nacionalista. Del mismo modo, las opiniones de Ocalan no pueden entenderse fuera del marco del nacionalismo kurdo. El PKK puede abarcar hermosos objetivos utópicos del confederalismo democrático, es, en su corazón, una organización dedicada a establecer el autogobierno kurdo, pero resulta que no sólo en el territorio tradicionalmente kurdo, sino también en territorios árabes, haciendo más fuerte el paralelismo con el Sionismo Laborista. Tanto en Siria como en Irak, los combatientes kurdos han utilizado la campaña contra ISIS como una oportunidad para extender el Kurdistán a territorios tradicionalmente árabes en los que los kurdos nunca han sido mayoría. (Nota del redactor del blog: El autor se refiere al mencionar el “Sionismo Laborista” al Partido Laborista Israelí, de ideología socialdemócrata, supuestamente de “centroizquierda”, partidario de la solución de los dos Estados y afiliado a la “Internacional Socialista” y al “Partido Socialista Europeo”).

El objetivo del PKK, escribe Sam Dagher, del Wall Street Journal, "es una confederación con las mismas reglas autonómicas en los enclaves gobernados por los kurdos en Irán, Irak, Siria y Turquía" [6] países en que las poblaciones kurdas tienen una presencia, sin embargo, como hemos visto, es insignificante en Siria. En la búsqueda de este objetivo "hasta 5,000 kurdos sirios han muerto luchando junto al PKK desde mediados de los años 80, y casi todos los principales líderes de la YPG y combatientes endurecidos por la batalla son veteranos de la lucha de décadas contra Turquía" [7].

En Siria, el objetivo del PKK "es establecer una región autónoma en el norte de Siria" [8], un área con una población árabe significativa.

Cuando los combatientes del PKK cruzan la frontera dentro de Turquía, se convierten en "terroristas", según los Estados Unidos y la Unión Europea, pero cuando regresan a Siria se transforman milagrosamente en guerrilleros luchando por la democracia como principal componente de las “Fuerzas Democráticas de  Siria”. Sin
embargo, la realidad es que, tanto en el lado turco como sirio de la frontera, el PKK utiliza los mismos métodos, persigue los mismos objetivos y depende en gran medida del mismo personal. El YPG es el PKK.


Una oportunidad

Washington siempre ha querido derrocar a los nacionalistas árabes en Siria, considerándolos como "un foco de lucha nacionalista árabe contra la presencia e intereses regionales estadounidenses", como alguna vez dijo Amos Ma'oz. Los nacionalistas árabes, en particular el partido socialista árabe Ba'ath, en el poder desde 1963, representan demasiadas cosas que Washington deplora: socialismo, nacionalismo árabe, antiimperialismo y el antisionismo. Washington denunció a Hafez al-Assad, presidente de Siria de 1970 a 2000, como un comunista árabe, y considera a su hijo, Bashar, que le sucedió como presidente, muy diferente. El Departamento de Estado se queja de Bashar, que no permite a la economía siria -basada en modelos soviéticos, según sus investigadores- integrarse a la super controlada economía global de los Estados Unidos. Además, Washington alberga quejas sobre el apoyo de Damasco a Hezbollah y al movimiento de liberación nacional palestino.

Los planificadores estadounidenses decidieron eliminar a los nacionalistas árabes de Asia invadiendo sus países, primero Irak, en 2003, que, como Siria, fue dirigido por los socialistas árabes Ba'ath y luego sería el turno de  Siria. Sin embargo, el Pentágono pronto descubrió que sus recursos se tensaron por la resistencia a sus ocupaciones de Afganistán e Irak, y que una invasión de Siria estaba fuera de cuestión. 

Como alternativa, Washington inmediatamente inició una campaña de guerra económica contra Siria. Esa campaña, aún está en vigencia 14 años después, acabaría con la economía y evitaría que Damasco proporcionara educación, atención de salud y otros servicios esenciales en algunas partes del país. Al mismo tiempo, Washington tomó medidas para reavivar la larga guerra santa que los islamistas de Siria habían emprendido contra el estado secular, que data de los años sesenta y culminó en la sangrienta toma de Hama, la cuarta ciudad más grande de Siria, en 1982.

A partir del 2006, Washington trabajó con la ‘Hermandad Musulmana’ de Siria para reavivar la yihad de los ‘Hermanos’ contra el gobierno secular de Assad. Los ‘Hermanos’ mantuvieron dos reuniones en la Casa Blanca y se reunieron frecuentemente con el Departamento de Estado y el Consejo de Seguridad Nacional.

El estallido de violencia islamista en marzo de 2011 fue saludado por el PKK como una oportunidad. Yaroslav Trofimov, del The Wall Street Journal, relata: "El PKK, una vez aliado de ... Damasco ... estuvo presente durante mucho tiempo entre las comunidades kurdas en el norte de Siria. Cuando la marea revolucionaria llegó a Siria, la filial siria del grupo tomó rápidamente el control de tres regiones de mayoría kurda a lo largo de la frontera turca. Los combatientes del PKK y las armas fluían allí desde otras partes del Kurdistán". [9] Los colegas de Trofimov, Joe Parkinson y Ayla Albayrak, escribieron que  los “kurdos sirios" consideraban "la guerra civil como una oportunidad para construir un enclave autogobernado similar al de sus vecinos étnicos en el vecino Iraq". [10] Ese enclave, respaldado por Estados Unidos e Israel, fue visto como un medio para debilitar al estado iraquí.

Damasco facilitó la toma del PKK retirando sus tropas de las áreas dominadas por los kurdos. Patrick Seale, especialista en Oriente Medio, escribió que los kurdos "aprovecharon la oportunidad" del caos engendrado por el levantamiento islamista "para impulsar su propia agenda política" [11], especularon que los objetivos del gobierno sirio al retirarse de la mayoría de las áreas kurdas era redirigir "tropas para la defensa de Damasco y Alepo", castigar a Turquía por su apoyo a los insurgentes islamistas; y "conciliar a los kurdos, para disuadirlos de unirse a los rebeldes". [12] El PKK, como resultado, no se unió a los insurgentes islámicos, como esperaba Damasco. Pero, sí se sumó a una parte muy significativa de la oposición a la Siria árabe nacionalista: los propios títeres de Estados Unidos. 

Para el año 2014, el PKK había "declarado tres gobiernos autónomos, o cantones como los llaman, en el norte de Siria: Afrin, en el noroeste, cerca de la ciudad de Alepo; Kobane; y Jazeera en el noreste, que abarca Ras al-Ain y la ciudad de Qamishli. Su meta era conectar los tres".[13] Esto significaría controlar los espacios intermedios ocupados por los árabes.

Un trato con Washington 

En este punto, el PKK decidió que sus objetivos políticos podían ser mejor aprovechados al llegar a un acuerdo con Washington. 

El Departamento de Estado había "permitido la posibilidad de una forma de descentralización en la que diferentes grupos -los kurdos, el gobierno secular y los insurgentes islámicos- recibieran cada uno una cierta autonomía dentro de Siria”. [14] Obsérvese la suposición implícita en este punto de vista, de que está dentro del alcance de Washington el otorgar autonomía dentro de Siria, mientras la cuestión de si el país debe descentralizarse, corresponde al ámbito interno y democrático de los sirios, negando ese derecho a las personas que viven y trabajan en Siria. Si tomamos en serio las ideas de Ocalan, inspiradas en Bookchin, sobre la inversión de la autoridad en la toma de decisiones por el pueblo, esta abominación antidemocrática difícilmente puede ser tolerada. 

De todas maneras, el PKK estaba entusiasmado con la idea estadounidense de dividir "Siria en zonas que correspondían aproximadamente a las áreas que ahora tienen el gobierno, el Estado islámico, las milicias kurdas y otros insurgentes". Se establecería un "sistema federal", no sólo para las zonas de mayoría kurda, sino para toda Siria. "Se crearía una región federal kurda en todo el territorio que ahora ocupa el PKK". La zona se expandiría para incluir el territorio que los kurdos esperaban "capturar en la batalla, no sólo al Estado Islámico, sino también de otros grupos insurgentes árabes". [15]

El PKK "presionó a los funcionarios estadounidenses" para que actuaran sobre el plan, comprometiéndose, a cambio, actuar como una fuerza terrestre contra el ISIS. [16] El grupo expresó que estaba "ansioso por unirse a la coalición encabezada por Estados Unidos contra el Estado Islámico a cambio de reconocimiento y apoyo de Washington y sus aliados para las administraciones autónomas dominadas por los kurdos que habían establecido en el norte de Siria". [17]

Los únicos satisfechos con este plan fueron el PKK, los israelíes y los estadounidenses.

"El apoyo estadounidense a estos grupos kurdos" no sólo en Siria, sino también en Irak, donde los kurdos también estaban explotando la batalla con ISIS para expandir su dominio en áreas tradicionalmente árabes, ayudó a “dividir Siria y dividir Irak", escribió el veterano corresponsal de Oriente Medio, Robert Fisk. [18] Esa división redundó en beneficio de los Estados Unidos e Israel, los cuales tienen el interés de perseguir la política de dividir y gobernar para ejercer una hegemonía conjunta sobre el mundo árabe. Patrick Seale señaló que el plan de los kurdos para el gobierno kurdo en el norte de Siria había sido satisfecho por "un júbilo silencioso en Israel, que ha mantenido una relación semi-clandestina con los kurdos, y da la bienvenida a cualquier desarrollo que pueda debilitar o desmembrar a Siria". [19]

Por su parte, los turcos objetaron, percibiendo que Washington había acordado dar al PKK un estado en todo el norte de Siria. [20] Mientras tanto, Damasco se opuso al plan, "viéndolo como un paso hacia una división permanente de la nación". [21]


Durante el Imperio Otomano la División Administrativa del Territorio se denominaba Eyalatos, uno de ellos fue el Eyalato de Damasco (1549 – 1586). Para  1874 Jerusalén se transformó en un distrito de administración general (Mutesarriyyet) bajo órdenes de las autoridades de Siria, comprendía además los distritos (Sanjak) de Nablus y de Acre. La disolución de la Gran Siria fue un plan de las potencias coloniales  a través del Acuerdo  Sykes – Picot (1916) que se implantaría una vez que el Imperio Otomano sea derrotado. Nuevas fronteras fueron impuestas y aparecieron nuevos Estados como Iraq, Siria, Líbano, Palestina. Palestina sería posteriormente dividida en Transjordania (Jordania) y Palestina. En otra futura división Palestina se dividió en dos territorios: la zona árabe y la zona judía.


La moderna Siria, debe recordarse, es producto de la división de la “Gran Siria” a manos de los británicos y franceses, quienes dividieron el país en Líbano, Palestina, Transjordania y lo que ahora es Siria. En marzo de 1920, el segundo Congreso General Sirio proclamó que "Siria era completamente independiente dentro de sus fronteras naturales, incluyendo el Líbano y Palestina". Concomitantemente "una delegación árabe en Palestina confrontó al gobernador militar británico con una resolución que se oponía al sionismo y peticionaba  convertirse en parte de una Siria independiente”. [22] Francia envió a su Ejército del Levante, principalmente las tropas reclutadas de su colonia senegalesa, para anular por la fuerza los esfuerzos de los árabes levantinos para establecer el autogobierno. 

Siria, ya amputada por las maquinaciones imperialistas británicas y francesas después de la Primera Guerra Mundial "es demasiado pequeña para ser un estado federal", opina su presidente, Bashar al-Assad. Pero Assad añade rápidamente que su punto de vista personal es irrelevante. Una cuestión tan importante como si Siria debería convertirse en un estado federal o confederal o unitario, dice, es asunto a decidir por los sirios en un referéndum constitucional [23], una visión refrescantemente democrática en contraste con la posición occidental de Washington que pretende dictar cómo los sirios deben arreglar sus asuntos políticos (y económicos).


Punta de lanza de los Estados Unidos 


Para Washington, el PKK ofrece un beneficio adicional a su utilidad como grupo guerrillero kurdo para avanzar en el objetivo estadounidense de debilitar a Siria fracturándola, es decir, el PKK puede ser impuesto como sustituto del ejército estadounidense, evitando la necesidad de desplegar decenas de miles de tropas estadounidenses en Siria, permitiendo así a la Casa Blanca y al Pentágono dar un paso adelante en varios dilemas legales, presupuestarios y de relaciones públicas. "La situación pone de relieve un desafío crítico que enfrenta el Pentágono", escribió Paul Sonne, de The Wall Street Journal; a saber, "apoyar las fuerzas locales ... en lugar de poner a las tropas estadounidenses en la punta de la lanza". [24]

Después de haber prometido apoyo para el gobierno kurdo del norte de Siria a cambio de que el PKK se convierta en la punta de la lanza estadounidense, Estados Unidos está "proporcionando armas pequeñas, municiones y ametralladoras y posiblemente alguna asistencia no letal, como camiones ligeros a las fuerzas kurdas". [25]

Las armas son repartidas en el denominado “arrojar y evaluar”. Con esa visión, los envíos se "dejan caer, se realiza una operación y los Estados Unidos evalúan el éxito de esa misión antes de proporcionar más armas", dijo un funcionario estadounidense, "les suministraremos sólo con las suficientes armas y munición para lograr cada objetivo interino". [26] 

Los soldados de infantería del PKK están respaldados por "más de 750 marines estadounidenses", los "Army Rangers" y las fuerzas especiales estadounidenses, francesas y alemanas, "usando helicópteros, artillería y ataques aéreos", en contravención de la ley internacional. [27]


Limpieza étnica

“Un gran número de residentes árabes pueblan las regiones que los kurdos designan como suyos”. [28] El PKK ha tomado "una gran franja de territorio a través del norte de Siria incluyendo ciudades y pueblos predominantemente árabes". [29]  Raqqa y las partes circundantes del valle del Eufrates, sobre las cuales el PKK ha fijado su mira, están principalmente pobladas por los árabes, observa el veterano corresponsal extranjero de The Independent, Patrick Cockburn, y los árabes se oponen a la ocupación kurda. [30]


Milicianos kurdos resguardando la prisión de la ciudad de Hasaka, noroeste de Siria. AFP


Las fuerzas kurdas no sólo están "retomando" las ciudades árabes cristianas y musulmanas en Siria, sino que están haciendo lo mismo en áreas de la provincia de Nínive en Irak "que en primer lugar nunca fueron kurdas. Los kurdos ahora consideran a Qamishleh y la provincia de Hasaka en Siria como parte del "Kurdistán", aunque representan una minoría en muchas de estas áreas". [31]

El PKK controla actualmente 20.000 millas cuadradas de territorio sirio [32], o aproximadamente el 17% del país, mientras que los kurdos representan menos del ocho por ciento de la población.

En sus esfuerzos por crear una región kurda dentro de Siria, el PKK "ha sido acusado de abusos cometidos a civiles árabes en todo el norte de Siria, incluyendo detenciones arbitrarias y desplazamiento de poblaciones árabes de los poblados en que el Estado Islámico retrocede" [33]. El PKK “expulsó árabes y turcomanos étnicos de grandes partes del norte de Siria", informa The Wall Street Journal. [34] Además, el diario señala que los grupos de derechos humanos han acusado a los combatientes [kurdos sirios e iraquíes] de impedir que los árabes regresen a las zonas liberadas [35]. 

Ni Sirio ni Democrático

El PKK domina a las “Fuerzas Democráticas Sirias”, un nombre equivocado conferido a un grupo de combatientes principalmente kurdos por su patrón Estados Unidos. El grupo no es sirio, ya que muchos de sus miembros no son sirios, se identifican como kurdos que inundaron la frontera de Turquía para aprovechar el caos producido por la insurgencia islámica en Siria y construir una zona de control kurdo. Tampoco es un grupo particularmente democrático, ya que pretende imponer el gobierno kurdo a las poblaciones árabes. Robert Fisk descarta que sean "Fuerzas Democráticas Sirias", son el "nombre de fachada para un gran número de kurdos y algunos combatientes árabes". [36]

El PKK se presenta como una Fuerza Democrática Siria y trabaja con un grupo simbólico de combatientes árabes sirios para disfrazar la realidad de las áreas árabes pobladas que controla y las que todavía tienen que capturar, las que terminarán bajo ocupación kurda.

De Facto (e ilegal) Sin Zona de vuelo (No Fly Zone) 

En agosto de 2016, después que "los bombarderos del gobierno sirio hubieran estado golpeando posiciones kurdas cerca de la ciudad de Hasaka, donde los Estados Unidos habían estado apoyando a las fuerzas kurdas" el Pentágono despachó "los cazas para protegerlos. Los aviones estadounidenses llegaron justo cuando salían los dos bombarderos Su-24 del gobierno sirio”.  Esto  "llevó a que la coalición dirigida por Estados Unidos comenzara a patrullar el espacio aéreo sobre Hasaka, y condujo a otro incidente ... en el que dos bombarderos Su-24 sirios intentaron volar a través de la zona, pero fueron interceptados por los aviones de combate de la coalición ". [37]

El Pentágono "advirtió a los sirios que se mantuvieran alejados. Los aviones de combate estadounidenses F-22 llevaron el mensaje al patrullar la zona”. [38
]

El New York Times observó que al usar "el poderío aéreo para salvaguardar áreas del norte de Siria donde los asesores americanos dirigen a los combatientes del PKK, los Estados Unidos habían establecido efectivamente una zona de exclusión aérea sobre el área”, pero señalaron que "el Pentágono se ha negado firmemente a utilizar el término”. [39]  Aun así, la realidad es que el Pentágono ha establecido ilegalmente una zona de exclusión aérea de facto sobre el norte de Siria para proteger a las guerrillas del PKK, la punta de lanza norteamericana que participan en una campaña de partición de Siria, incluyendo la limpieza étnica de la población árabe, para el deleite de Israel y de acuerdo con los designios de Estados Unidos de debilitar el nacionalismo árabe en Damasco.


Una analogía astigmática


Algunos encuentran un paralelo en la alianza de la YPG con los Estados Unidos con Lenin aceptando la ayuda alemana para regresar a Rusia del exilio en Suiza después de la Revolución de marzo de 1917. La analogía es inadecuada. Lenin estaba jugando a un poder imperialista contra otro. Siria no es un caso análogo de la Rusia imperial, que, hace cien años, estaba encerrada en una lucha por los mercados, los recursos y las esferas de influencia de los imperios rivales. Por el contrario, Siria es y siempre ha sido un país dividido, dominado, explotado y amenazado por imperios. Ha sido emancipada del colonialismo, y está llevando a cabo una lucha - ahora contra los esfuerzos contrarios del PKK - para resistir su recolonización.


Milicianos kurdos brindan resguardo a vehículos blindados estadounidenses en territorio sirio (Ghanamya) cerca de la frontera turca, la foto es de abril 2017. (EFE)


El PKK ha llegado a un acuerdo con Estados Unidos para lograr su objetivo de establecer un estado nacional kurdo, pero a expensas de los esfuerzos de Siria para salvaguardar su independencia de un esfuerzo estadounidense de décadas para negarlo. La partición de Siria a lo largo de líneas etno-sectarias, deseada tanto por el PKK como por Washington y Tel Aviv, sirve tanto a los objetivos estadounidenses como israelíes de debilitar un foco de oposición al proyecto sionista y la dominación estadounidense en Asia Occidental.

Una analogía más apropiada, equipara al PKK en Siria con el sionismo obrero (laborista), la fuerza sionista dominante en la Palestina ocupada hasta finales de los años setenta.  Al igual que Ocalan, el temprano sionismo enfatizó en las comunas descentralizadas.

Los kibutz eran comunidades utópicas, cuyas raíces estaban en el socialismo. Al igual que la encarnación siria del PKK, el Sionismo Laborista confió en el patrocinio de las potencias imperialistas, garantizada su protección se ofrecieron actuar como puntas de lanza de los imperialistas en el mundo árabe. Los sionistas emplearon la conquista armada del territorio árabe, junto con la limpieza étnica y la negación de la repatriación, para establecer un estado étnico, anticipándose a la futura extensión del PKK, quien por el uso de la fuerza, ejerce el dominio de un estado kurdo en territorio mayoritario árabe en Siria. Lo mismo en Irak.

Los anarquistas y otros izquierdistas pueden haber sido inspirados por las comunidades agrícolas colectivas judías en Palestina, pero eso apenas hizo progresista o emancipador al proyecto sionista, ya que sus elementos progresistas y emancipadores fueron negados por su opresión regresiva y el despojo de la población árabe indígena, a más de su colusión con el imperialismo occidental contra el mundo árabe. 


Conclusión

Representando a una comunidad étnica que comprende menos del 10 por ciento de la población siria, el PKK, un grupo guerrillero anarquista kurdo que opera en Turquía y Siria, está utilizando a los Estados Unidos, su Fuerza Aérea, el Cuerpo de Marines, como un multiplicador de su fuerza, en un esfuerzo para imponer una división de Siria, en la cual la población kurda numéricamente insignificante controla una parte significativa del territorio de Siria, incluyendo áreas habitada por árabes y en la cual los kurdos nunca han estado en mayoría.

Para lograr sus objetivos, el PKK no sólo ha llegado a un acuerdo con un régimen despótico en Washington que busca recolonizar el mundo árabe, sino que confía en la limpieza étnica y la negación de la repatriación de los árabes de las regiones que han huido o que se han visto obligados a aceptar el control kurdo del norte de Siria, tácticas que se asemejan a las utilizadas por las fuerzas sionistas en 1948 para crear un estado judío en la mayoría árabe palestina.

W
ashington e Israel (este último manteniendo desde hace tiempo una relación semi-clandestina con los kurdos) valoran un sistema confederal para Siria como un medio para debilitar la influencia nacionalista árabe en el Asia árabe, socavando un polo de oposición al sionismo, al colonialismo y a la dictadura internacional de los Estados Unidos. 


Las fuerzas que resisten la dictadura, la más odiosa de todas, los Estados Unidos, en gran parte del mundo, son las verdaderos campeones de la democracia, categoría a la que no pertenece el PKK, como lo demuestran sus acciones en Siria.



TEXTO ORIGINAL EN INGLÉS
By Stephen Gowans /  What's left


NOTA:  Las fuentes de consulta del original, dado su volumen, no las hemos incorporado en esta traducción. Las notas a pie de página se encuentran detalladas en el enlace al artículo en inglés de Stephen Gowans, a las que el lector podrá remitirse.

16 julio 2017

KURDISTÁN: ‘Rojava’ y la manipulación de los kurdos sirios (8)















Por: Tito Andino U.


Antecedentes

Iniciemos con el siguiente punto:  Recuerdan la ciudad de Kobane asediada y ocupada por el Estado Islámico en la frontera sirio-turca?.  Con el tiempo las cosas se van aclarando. Washington manipuló la crisis en Kobane para legitimar su clásica y retórica “ayuda humanitaria”, también conocida como “Responsabilidad de Proteger” (según Tony Blair, ex premier británico). Esa falsa premisa tuvo un doble fondo: Por un lado atacar y destruir grupos focalizados de yihadistas del EI; y, por otra, apoyar discretamente a ese mismo grupo radical, ya sea abasteciendo, por “error”, con armamento y pertrechos lanzados desde aviones o bombardeando por “error” a las fuerzas que los combate. La clásica política norteamericana de doble rasero.

En la ‘Rojava’ (es decir el Kurdistán Occidental, con tres provincias pobladas mayoritariamente por kurdos), por estrategia geopolítica, Estados Unidos detuvo a los turcos, en ese entonces muy deseosos de atacar Siria. Los turcos entorpecían el todavía realizable plan de “Rediseño del Medio Oriente Ampliado”. Kobane fue liberada junto a la zona que comprende la ciudad de Hasaka (Noreste de Siria bombardeado por la poderosa fuerza aérea estadounidense, eliminando en un par de días alrededor de tres mil yihadistas del EI).

Pero, también la “Coalición internacional anti Estado Islámico” procedió deliberadamente a destruir la infraestructura petrolera,  los graneros de alimentos sirios e hizo uso de la guerra química arrojando pesticidas en la región agrícola del norte de Siria. Es irónico que quienes dicen proteger al mundo contra el uso de armas químicas haya optado por esa opción, los Estados Unidos recurrió a la guerra química contra Siria al mismo tiempo que atribuye a ese país reiterados ataques “químicos” contra la población civil.

El experto internacional Thierry Meyssan afirmó, en su momento, que el “noreste de Siria es un territorio ideal para la implantación de un Estado pirata”. La gente sigue organizada en tribus que se desplazan a través del desierto. También razonó que “los únicos Estados que la OTAN ha logrado destruir hasta este momento son precisamente Afganistán, Irak, Libia y el noreste de Siria”, es decir, sociedades tribales, en otros casos, han fracasado como en Túnez, Egipto y la República Árabe Siria (excepto la sociedad tribal que sigue rigiendo en el noreste)  (1).  

Los estadounidenses aspiraban primero imponer el control por parte del Estado Islámico sobornando a los jefes tribales, ante el fracaso de ese inicial plan han recurrido a los kurdos del noreste de Siria, por el momento esta segunda opción está resultando bien. 

Como se llegó a tal situación: los otrora cuasi-comunistas, revolucionarios y anti imperialistas kurdos de la ‘Rojava’ hoy se han transformado en aliados incondicionales de los Estados Unidos, o al menos eso es lo que se aprecia en el día a día.


             Mapa de Rojava en el norte de Siria


Repasemos un monumental trabajo de investigación del investigador y analista Pepe Escobar, escrito a fines de octubre del 2014 (2).

“Rojava es el hogar de un modelo revolucionario que desafía ni más ni menos la hegemonía del sistema capitalista de nación-estado, mucho más allá de su significado regional”.

La ciudad kurdo-siria de Kobane es el ejemplo de este modelo singular, dice Escobar, “Kobane –una región agrícola– se encuentra en el epicentro de este experimento no violento en democracia, posibilitado por un acuerdo a principios de la tragedia siria entre Damasco y Rojava (no apoyéis el cambio de régimen contra nosotros y os dejaremos tranquilos). Aquí, por ejemplo, se argumenta que incluso si un único aspecto de un verdadero socialismo pudiera sobrevivir allí, millones de descontentos serían atraídos por Kobane.

En Rojava, la toma de decisiones es a través de asambleas populares, multiculturales y multireligiosas. Los tres máximos funcionarios de cada municipalidad son un kurdo, un árabe y un cristiano asirio o armenio; y por lo menos uno de los tres debe ser mujer. Las minorías no kurdas tienen sus propias instituciones y hablan sus propios idiomas. Entre una miríada de consejos de mujeres y jóvenes también hay un crecientemente famoso ejército feminista, la milicia Estrella YJA (Siglas de Unión de Mujeres Libres, la estrella simboliza la diosa mesopotámica Ishtar).

Lo que buscan el PKK –y las YPG– es «municipalismo libertario». De hecho es exactamente lo que Rojava ha estado intentando: comunidades con autogobiernos que aplican la democracia directa, utilizando como pilares concejos, asambleas populares, cooperativas dirigidas por trabajadores y defendidas por milicias populares. De ahí el posicionamiento de Rojava en la vanguardia de un movimiento mundial de economía/democracia cooperativa cuyo objetivo en última instancia sería dejar de lado el concepto de una nación-estado.

Kobane no es esencial en comparación con Deir ez-Zor (que tiene un aeropuerto que abastece al Ejército Árabe Sirio) o Hasaka (que tiene campos petrolíferos controlados por los kurdos con la ayuda del Ejército Árabe Sirio). Kobane no tiene aeropuerto ni campos de petróleo

Hasta aquí el recordado ensayo de Pepe Escobar. Bueno, han transcurrido tres años de ese emocionante relato que despertó la simpatía en muchos lugares del mundo por ‘Rojava’ y su modelo revolucionario.

Hoy, ese experimento social se está desmoronando por la decisión de unos cuantos “jefes tribales” sobornados por los Estados Unidos y sus aliados de las monarquías del Golfo, incluso Turquía dio posteriormente asilo por algún tiempo a Saleh Muslim, el líder de los kurdos sirios.

Era evidente que los Estados Unidos tenía que guardar las apariencias y “confirmar” a la opinión pública mundial que sigue siendo el paladín global de los derechos humanos y defensor de los indefensos. En el caso que nos ocupa, no tuvieron otra opción que archivar el plan A (apoyo a los yihadistas del EI) y bombardear al Estado Islámico en Kobane (no obstante seguía cometiendo “errores”, disimuladamente dejaban caer vía aérea pertrechos bélicos en zonas controladas por los yihadistas). El plan B se aplicó de inmediato: La inminente caída de Kobane provocaría, sin duda, la ira internacional testigo de las atrocidades que cometían los extremistas ante la mirada complaciente de Turquía y una supuesta coalición internacional que los “combatía” sin éxito.

La confusión fue latente, los expertos internacionalistas y políticos observaban incrédulos que los Estados Unidos, cambiando las reglas de juego, revertían la situación y volcaron su apoyo a los otrora “terroristas” del YPG (el PKK sirio). Turquía furiosa tuvo que aceptar los hechos consumados, pero acudió de inmediato a su aliado kurdo-iraquí, Massud Barzani.

La clave del enigma

Conforme Pepe Escobar, 

“Cuanto el YPG fue más o menos “reconocido” por Washington, el jefe del PYD (brazo político de la YPG), Saleh Muslim, fue a reunirse con el astuto líder del gobierno regional del Kurdistán de Irak, Masud Barzani. En esa ocasión el PYD prometió «compartir el poder» con los peshmergas de Barzani en el gobierno de Rojava".

Curiosamente, como presunto resultado, los kurdos sirios (que apoyaban a las YPG) obligados abandonar Kobane y exiliados en Turquía no pudieron retornar a Siria; al contrario, los kurdos iraquíes podrían ir y volver a su antojo.

Es, dentro del campo hipotético, porque no se ha podido comprobar por ningún medio que, aquel y astuto compromiso, pactado por Muslim y el jefe de inteligencia del Kurdistán Iraquí, Lahur Talabani, bajo visto bueno de Estados Unidos e Israel, pudo ser el preámbulo para que la Rojava se haya echado en brazos de los norteamericanos. Ese acuerdo sufrió de disentimiento  de una parte de las YPG y lógico del PKK kurdo que lo rechazaron al percatarse del juego de Barzani, sus peshmergas y Saleh Muslim. 




Saleh Muslim

Sin intención de confundir, ese juego de Saleh Muslim, no fue el primero. Previamente comprometió a Rojava en el plan turco francés del 2011, conocido como Juppé - Dovutoglu, es decir Muslim se alió con los turcos (recuerden en un anterior post que Muslim se reunió en secreto en París con Hollande y Erdogan, ellos le prometieron convertirlo en presidente de un estado independiente en el norte de Siria. Muslim debía limpiar el norte de Siria de cristianos y otras minorías y acoger a los kurdos que serían expulsados de Turquía !). Como hemos expresado Muslim estuvo un tiempo "exiliado" en Turquía; luego de un corto periodo, al poner los píes sobre la tierra y meditar que eso era algo irrealizable, Muslim volvió a condenar a los turcos y huyó de las autoridades otomanas, retornando en secreto a la Rojava, donde abrazó el plan B norteamericano.

Al final, los estadounidenses triunfaron en esta intriga al conquistar a los “jefes tribales” kurdos, asirios, árabes y hasta cristianos de la Rojava. La poca evidencia parece señalarnos que Saleh Muslim y otros líderes kurdos aceptaron la propuesta estadounidense y fusionaron sus organizaciones en el ente conocido como “Fuerzas Democráticas de Siria” (FDS), una genial maniobra de los servicios secretos (CIA).  (Ver mi artículo: KURDISTÁN, más cerca que nunca? (4)

Como vemos los aliados de la OTAN: Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Turquía (por mencionar los más protagonistas de esta guerra) manejan planes separados en busca de sus propios intereses. 

Los turcos estuvieron siempre muy activos. Recordemos que Erdogan pretendía, en su tiempo, que los peshmergas, feroces enemigos del PKK, se conviertan en la vanguardia contra el Emirato Islámico/ISIS, para debilitar la alianza YPG/PKK. Turquía utiliza ese viejo truco para enfrentar kurdos contra kurdos. He ahí la explicación de aquel risible acto de desvergüenza internacional en que Erdogan permitió que 150 peshmergas acudan en apoyo de la resistencia de Kobane. Su única intención fue restarle protagonismo a las milicias YPG-PKK y tratar de prevenir una posible unidad kurda antiturca.

El gobierno de Erdogan quedó en evidencia ante el mundo, acusó a Siria de ser la principal causa del Estado Islámico y “prometió” defender a los kurdos… si los Estados Unidos presentaban una propuesta para que Assad  abandone el poder. Erdogan se desplayó tratando de explicar porque los kurdos sirios deberían combatir a Damasco, bajo el mando del ‘Ejército Libre Sirio’; expresó que debían olvidarse de autonomías y que los kurdos debían aceptar que Washington cree una zona de exclusión aérea sobre Siria (un deseo que nunca se cumplió y por el cual Erdogan esconde un profundo resentimiento a los estadounidenses). El PYD/YPG y Washington negaron estas demandas turcas.

Otro hecho curioso es la propaganda que se hizo desde el gobierno autónomo del Kurdistán Iraquí. Los kurdos de Siria desmintieron haber recibido armas de sus “colegas” peshmergas, como anunciaban desde el gobierno de Erbil para apoyar a la ciudad de Kobane acosada por el Emirato Islámico. El 14 de octubre de 2014, el vocero de los kurdos de Siria, Alan Othman, declaró vía Skype que el cargamento anunciado seguía sin llegar a su destino. Por su parte, el jefe del Consejo de Defensa de Kobane, Esmat Al-Sheikh, agregó: “No hemos recibido ni una bala”. (3)

Los medios de desinformación masivos pro occidentales contaron cantidad de mentiras, afirmaron que fueron los peshmergas quienes consiguieron detener al Estado Islámico, la única verdad es que los kurdos turcos del PKK fueron los únicos que pusieron “el pecho a las balas” en la batalla de Kobane, así como en las montañas de Sinjar (junto a las todavía no corropidas YPG).


Qué podemos concluir de esto?


Fotografía de varias guerreras de las YPJ (Unidades Femeninas de Protección) en kurdo (Yekineyen Parastina Jine), la rama femenina de las YPG. Milicia compuesta exclusivamente de mujeres que combatieron al Estado Islámico en Siria. La fotografía es anterior a la abdicación kurda a los deseos de Washington y sus aliados. 


Con los antecedentes relatados, podemos lanzar nuestra hipótesis del por qué hoy la otrora ‘Rojava’ revolucionaria se ha transformado en un instrumento de batalla de los intereses estadounidenses en el norte de Siria y de la región, previamente tuvo que desechar el plan turco-francés que ofrecían un estado independiente a costa de una enorme limpieza étnica y acoger a millones de desterrados kurdos de Turquía, algo a simple vista irrealizable. En general los kurdos sirios optaron por entregarse al mejor postor para desmembrar y desestabilizar la unidad nacional y el gobierno legítimo de Siria. Otros propósitos se irán revelando según el curso que tome la guerra.

Decía Pepe Escobar en su momento, que “a largo plazo, el tejemaneje estadounidense es una seria amenaza para el experimento de democracia directa en Rojava, que Washington solo puede interpretar como –¡Dios nos libre!– un retorno del comunismo”.

Por tanto, Kobane constituyó un simple pero decisivo peón en ese despiadado juego de manipulación orquestado por Washington, Ankara y Erbil, ninguno de aquellos protagonistas querían que el experimento de democracia directa de Kobane y ‘Rojava’  llegara a tener éxito, mucho menos que se expandiera “infectando” otras regiones. Pepe Escobar señalaba con toda razón que las valientes mujeres guerreras  kurdas y casi toda la estructura militar de la YPG desconoce los hechos: “Las mujeres de Kobane corren un peligro mortal de ser, si no esclavizadas, cruelmente traicionadas”. (4)

Y eso es lo que ha pasado… las bravas y heroicas mujeres kurdas de Siria están siendo sacrificadas por sus jefes que bailan al ritmo del mejor postor. Los Estados Unidos han vencido en esta batalla.


Ayer Irak, hoy Siria: La colusión entre kurdos/ISIS/ EEUU se repite



Foto AP. Miembros de las YPG (Unidades de Protección Popular) resguardan vehículos blindados del ejército de los Estados Unidos dentro de territorio sirio.


Puede ser que muchos lectores critiquen mis reiterados puntos de vista. Pero es la única forma para que la gente se concientice, asimile y comprenda la magnitud del drama que sufren los estados de Siria, Irak (sin olvidarnos de Yemen y el Líbano).

Me refiero en concreto a aquella extraña simbiosis entre los kurdos, Estado Islámico y los Estados Unidos. Si antes pasó en Irak para fragmentar la República, los recientes acontecimientos demuestran que éstos mismos actores se trasladaron a Siria. Como vemos los protagonistas son los mismos (el trio de la muerte). Las víctimas ayer Irak, hoy Siria.

En Siria, el Estado Islámico después de haber sido obligado abandonar el norte fronterizo sirio-turco, ha optado por dar batalla, preferentemente, al Ejército Árabe Sirio; por otro lado, más que combatir y repeler los ataques combinados de kurdos y de la coalición internacional han optado por la misma estrategia en Irak ante estos mismos “enemigos”: RETIRADA sin combatir o escasa resistencia de focos aislados. Lo mismo sucedió con la penetración de las tropas turcas en el norte de Siria, los yihadistas han optado por la “retirada” táctica y escaso combate a los turcos.

Son decenas de documentos gráficos y visuales obtenidos por satélite y sobre el terreno que certifican que convoyes llenos de combatientes del EI emigraron de una Raqqa acorralada por kurdos y americanos, sin verse afectados. Alegrándose de la vía libre disponible, sin que los extraordinarios servicios de inteligencia militar estadounidenses hayan podido percatarse de las caravanas, no obstante que bombardean casi a diario la ciudad y matan decenas de civiles en cada ataque. Pese a estar rodeados los yihadistas del EI eluden fácilmente el cerco kurdo-americano con toda seguridad y abandonan Raqqa. Sin embargo, insistimos, las bombas caen sobre los civiles de la sitiada ciudad. Problemas de visión?

Rusia e Irán han venido denunciado la estrategia de esta inmensa conspiración.

Recordemos que en diciembre del año pasado tuvo lugar la salida desde Raqqa de inmensos convoyes llenos de tropas y material bélico del EI. Una de esas grandes caravanas “turísticas” fue divisada en la segunda toma de Palmira, convoyes provenientes de Mosul (Irak), con el visto bueno de los peshmergas kurdos, cruzaron territorio sirio hasta llegar a Raqqa, allí se unieron a más yahadistas y emprendieron el “tour” hacia Palmira, sorpresa! bajo la mirada cómplice de los kurdos-sirios que dieron vía libre junto a los “ciegos” servicios  de inteligencia norteamericanos y los también “invidentes” pilotos de las fuerzas aéreas de una supuesta coalición internacional contra el terrorismo.

La conclusión no puede ser otra, los EE.UU, los peshmergas kurdos de Irak y los kurdos sirios que son la mayoría de la denominada “Fuerzas Democráticas de Siria” (FDS) siguen intentando ocultar una connivencia con el Estado Islámico. Los primeros garantizan total seguridad para emprender retiradas tácticas que permiten a los segundos atacar áreas controladas por el gobierno y las fuerzas armadas sirias.

Dentro de Siria, las fuerzas rusas y sirias han contemplado las retiradas del EI sin combate y un innecesario bombardeo a centros urbanos en Raqqa produciendo cientos de víctimas inocentes. Las Fuerzas Aéreas de Siria y de Rusia han tenido que, al menos en dos ocasiones, parar este show, atacado de verdad las caravanas yihadistas que abandonan Raqqa rumbo a la región de Homs y Deir Ezzor.

Quienes hemos observado la crisis siria desde su inicio, tenemos claro el guión.

No es noticia que los Estados Unidos anhelaba destruir Siria, con ese fin asintió la constitución del ISIS, fue tal ese consentimiento y en tan corto tiempo  que el ISIS tenía una inmensa fuerza en 2014 capaz de apoderarse de  la tercera parte de Irak y hasta darse el lujo de ocupar vastas regiones de Siria. Como fue posible eso?

La Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) “profetizó” el fulminante ascenso de ISIS. Se ha divulgado parte de un informe clasificado del 2012 al respecto: “Si la situación se desenreda, existe la posibilidad de establecer un Principado Salafista declarado o no declarado en el este de Siria ... y esto es exactamente lo que los poderes de apoyo a la oposición quieren, con el fin de aislar al régimen sirio”.  (5)

Los “combates” y “bombardeos”, sin éxito, de la coalición internacional antiterrorista se debía a una sola razón: Los extremistas del Estado Islámico, al Qaeda o cualquier otra organización terrorista, pueden ser combatidas pero no aniquiladas, eliminadas, suprimidas, etc. Solamente deben debilitarse en ciertos puntos y apuntalarla en otros. “Caos perpetuo” en la región es la consigna para desestabilizar los gobiernos. He aquí un breve video que resume todo:


VIDEO:

Focus: ¿Se necesita 20 años para derrotar a Daesh? 


Más pruebas?

Os necesito recordar las siniestras declaraciones de John Kerry (audio filtrado) ex secretario de Estado? No fue solo él, los mandos militares y políticos en los Estados Unidos conocían que el ISIS se transformaba en una gran fuerza dentro de Siria. No queda duda que para los estadounidenses aquella era una excelente noticia, ya que su política sobre Siria solo tenía estas alternativas: Que Bashar al Assad se siente a negociar (algo que no era del agrado de los EEUU); o, que dimita (preferentemente); o, que al Assad sea eliminado.

Al respecto, ya que los incrédulos abundan y tuvieren más dudas, los propios medios de comunicación hicieron eco de esta inmensa y reciente colusión. Veamos:

El 27 de mayo (2017), la agencia de análisis israelí Debka informó que los kurdos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), dirigidos y apoyados por militares estadounidenses, concertaron establecer con los jefes del EI un corredor para la retirada de los combatientes de la sitiada Raqqa. Para mejor entendedor, la distancia que separa Raqqa de Palmira son 225 kilómetros.

El periódico ruso Sputnik confirmó la existencia de ese pacto. Ya en el pasado octubre del 2016, Sputnik informó que EEUU y Arabia Saudí pretendían trasladar 9.000 terroristas del EI desde Mosul a Siria (lo cual resultó cierto y desencadenó la segunda caída de Palmira). Ese convoy yihadista que salió de territorio iraquí fue observado y asegurado con la complacencia de los kurdos iraquíes, los peshmergas.

Los medios de información iraníes, como la agencia de noticias Farsnews, comunicaron en su tiempo y reiteradamente que la coalición internacional “anti” Daesh encabezados por los USA negociaron con los terroristas para facilitar su movimiento no solo en Siria e Irak sino por todo el Oriente Próximo.

Lo que realmente piensa la prensa norteamericana alineada con los Halcones se puede comprobarse con esta nota de prensa: “¿Derrotar al EI? ¿Para qué? Columnista de 'The New York Times' propone a EE.UU. nuevo plan en Siria” (6). En efecto, Thomas Friedman, ganador en tres ocasiones del Premio Pulitzer y columnista de 'The New York Times' mantiene la tesis de que los Estados Unidos "se alíe efectivamente con el Estado Islámico en Siria”. El 12 de abril pasado, en su columna de prensa solicitaba que Trump  debe "dejar que el Estado Islámico sea un dolor de cabeza" en Siria para Al Assad, Irán, Hezbolá y Rusia, "de la misma manera que alentamos a los combatientes muyahidines para desangrar a Rusia en Afganistán". También plantea "simplemente dejar de luchar contra el Estado Islámico en Siria" y  que Siria "luche una guerra en dos frentes: con los rebeldes moderados por un lado y con el EI por el otro". 

La ignorancia de Friedman es tal que afirma que Siria debe combatir en “dos frentes”. Su “analfabetismo” respecto a la guerra en Siria provoca este tipo de alusiones que 'The New York Times' gustoso se lo publica. 

Siria no enfrenta uno ni dos ni tres ni cuatro frentes de guerra. Siria está acosada por todos lados con una guerra de invasión no convencional, no de ejércitos regulares sino de miles de mercenarios, yihadistas, “voluntarios” provenientes de decenas de países del mundo y “asesores” occidentales, turcos, israelíes y de las monarquías del Golfo.  

Siria tiene múltiples frentes de lucha. Citemos de memoria los que vienen a la mente: Por el Norte: Turquía, los kurdos, el Estado Islámico y otras agrupaciones menores, a más de los bombardeos de la “coalición” internacional contra las infraestructuras sirias y la actual presencia de tropas estadounidenses en suelo sirio. Por el Sur: Israel, Frente al Nusra, rebeldes “moderados”, el Estado Islámico con sus bases en el Líbano (región de Arsal). Por el Este: El Estado Islámico, Jordania, Estados Unidos. En el interior del país existen centenares de frentes de guerra no definidos, según el grado de radicalización de la organización armada que ocupa tal o cual región y que dependen de los países que auspician la guerra en Siria (grupos respaldados por Arabia de los Saud, Qatar, Turquía, Jordanía, Estados Unidos, etc). Y eso que no hacemos mención a la efectivas aunque ocasionales intervenciones militares de potencias occidentales como Francia y el Reino Unido.

Volvamos a lo principal. Como expresamos párrafos más arriba, Damasco y Moscú tomaron, en mayo, las suficientes medidas para imposibilitar la retirada del Estado Islámico de Raqqa hacia Palmira. "Según informaciones confirmadas a través de varios canales independientes, los mandos de unidades kurdas pertenecientes a las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias y los líderes locales de Daesh en Al Raqa llegaron a un acuerdo sobre la apertura de un corredor de seguridad que dé a los terroristas la oportunidad de abandonar libremente la ciudad a condición de que se dirijan a la zona de Palmira(7)

En efecto, en una de esas acciones de contención, el reciente 25 de mayo, la aviación rusa detectó y destruyó una caravana de Daesh integrada por 39 camionetas que se dirigía hacia Palmira. No ha quedado otra opción que implementar medidas de control electrónicas que vigilen las posibles rutas de salida de los yihadistas, aun así es imposible saber cuántos y en cuántas ocasiones se consintió el traslado de terroristas desde Raqqa a otras regiones del este de Siria.

VIDEO:


Siria - PalmIra Sur - Drones Rusos Destruyen un Gran Convoy del ISIS - 25 Mayo 2017


Otra investigación afirmó por esas mismas fechas, bajo autorización de los Estados Unidos alrededor de 120 cabecillas del Estado Islámico de origen occidental habían abandonado Raqqa con su armamento y trasladados al poblado de Al-Sujna, próximo a Palmira. Esa operación se realizó a pesar de las acciones de combate de la aviación rusa y siria en la zona. (8)

Con los ejemplos citados, no debería quedar duda de que existe colusión entre los kurdos sirios enarbolados por la FDS (Fuerzas Democráticas de Siria) y el Estado Islámico, todo con el visto bueno del padrino de los dos supuestos enemigos, los Estados Unidos. Tampoco la opinión pública debe dejarse convencer que la declaración de guerra de los kurdos al EI se vaya hacer efectiva en el campo de batalla. Combates existen, pero Raqqa ha sido casi abandonada por el EI, los kurdos que dicen venir combatiendo a los extremistas desde noviembre del 2016 van ocupando lento y sin mayor esfuerzo la otrora capital del Califato, mientras las fuerzas aéreas de la “coalición antiterrorista” se dedica a bombardear a los civiles de la ciudad.

Debemos destacar que en esa supuesta “coalición antiterrorista” el consenso para ejecutar las tareas de “liberación” de la ciudad de Raqqa es inexistente, planificación de acciones conjuntas es algo que no se ha escuchado ni de lejos, no olvidemos que los turcos se oponen rotundamente dar protagonismo a los kurdos y nadie consulta al gobierno de Siria ni a los rusos.

Un nuevo factor a tener en cuenta es el serio análisis que hace una ex parlamentaria turca, Oya Akgonenc Mugisuddin, su interesante enfoque atribuye la actual crisis de Qatar con otras monarquías del Golfo como una crisis de carácter artificial, carente de una justificación fiable, afirma que es evidente que solo sirve como maniobra de distracción para crear el Estado kurdo en Siria. "Si prestas atención al momento y a las condiciones en las que apareció este escándalo, todo esto te hace preguntarte: '¿Es posible que esta sea una maniobra de distracción de los acontecimientos en Siria?...  mientras Turquía y otros países se ocupan de la solución de la crisis de Catar, las unidades kurdas en Siria liberan la ciudad de Al Raqa de los yihadistas de Daesh, formando 'de facto' un Estado kurdo”. (9)


Continuaremos.



NOTAS:

(4) El regreso del plan yanqui de rediseño del «Medio Oriente ampliado». Ob. Cit.

AddToAny