Bienvenido a este Blog. Detectives de Guerra le brinda los mejores análisis de los conflictos internacionales de actualidad
Mostrando entradas con la etiqueta Zimbabwe. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Zimbabwe. Mostrar todas las entradas

07 diciembre 2021

Rhodesia: cavilaciones sobre un antiguo estado de colonos coloniales

 



por Adeyinka Makinde

Sobre el autor: Adeyinka Makinde, de origen africano, nació en Lagos - Nigeria, radicado en Inglaterra. Es Abogado y catedrático invitado en la Facultad de Derecho de Westminster desde 2002, su especialidad docente es el derecho constitucional y política internacional. Investigador de la historia política, historia militar e historia del espionaje en el género de los "estudios de inteligencia y seguridad". Ha participado en conferencias internacionales organizadas por el Centro de Estudios Internacionales de Inteligencia y Seguridad (CIISS). Su análisis de los peligros de la guerra entre la OTAN y la Federación de Rusia fue el tema de una entrevista que concedió a The Voice de Rusia. El aporte de Adeyinka también implica artículos en la Revista Internacional de Criminología y Sociología. (Linkedin)

Adeyinka Makinde presenta sus ponencias en su blog: adeyinkamakinde.blogspot.com, sitio en que se publicó originalmente este artículo (el cual lo transcribimos y adaptamos a otro artículo suyo publicado por Global Research, ver notas a pie de página)

* Todas las fotografías y notas a pie de foto son interpuestas por el editor del blog. 

 

***

El proyecto de los colonos coloniales contra el cual la rebelión fue una reacción perfectamente natural: Expropiación de tierras, explotación laboral y genocidio: esa fue la base de Rhodesia.


Cecil Rhodes y el dominio global

Cecil Rhodes, el hombre que dio al país su nombre, estaba en el corazón del sistema a través del cual los trabajadores negros africanos eran brutalmente explotados. Si tal declaración le sorprende a alguien por ser de alguna manera “marxista”, demuestra el punto de la lente distorsionada a través de la cual algunos viejos rodesianos eligen ver el mundo. Las masacres del pueblo ndebele antes y después del Acuerdo Rudd utilizando armas de fuego fue una crueldad deliberada más allá del enjuiciamiento de la guerra. Fue un genocidio.

Rhodesia fue un proyecto de colonos coloniales. Esto implicó subyugación, expropiación de tierras y la imposición de un sistema de castas dentro del cual los africanos negros subyugados eran explotados por blancos de ascendencia principalmente británica. El sistema social y económico puede haber parecido benigno para los rodesianos que lo compararon favorablemente (y todavía lo hacen) con el sistema del apartheid en la vecina Sudáfrica, pero no obstante era un sistema basado en los blancos que monopolizaban el acceso a los recursos naturales del país y mantuvieron en raya a los africanos cuyas tierras fueron arrebatadas.

La guerra librada durante la década de 1970 en el estado nacional antes conocido como Rhodesia (hoy Zimbabwe) fue un conflicto asimétrico que enfrentó a las Fuerzas de Seguridad de Rhodesia contra las milicias de los movimientos de liberación de África Negra, las más prominentes fueron ZANLA y ZAPU. Alternativamente conocida como la "Guerra de Rhodesia Bush" y la "Guerra de Liberación de Zimbabwe", se caracterizó por una brutalidad incesante que se cobró la vida de muchos no combatientes. Tanto el gobierno como las fuerzas guerrilleras brutalizarían acciones contra los civiles. Sin embargo, con el paso del tiempo, muchos viejos rodesianos, que se sienten reivindicados por el malestar político y económico de Zimbabwe, han tratado de caracterizar la guerra como si hubiera sido procesada por el gobierno de la minoría blanca de una manera ética y respetuosa de las reglas. Entre sus fuerzas, los Selous Scouts a menudo se promocionan como un modelo de eficiencia marcial e ingenio, cuyos códigos de conducta eran irreprochables. Esto no podría estar más alejado de la verdad. 


La verdadera carta de presentación de los Selous Scouts del ejército de Rhodesia estaba dirigida a la eliminación clandestina de los "terroristas" (combatientes negros de los movimientos de liberación), tanto dentro como fuera del país.


A juzgar por los muchos comentarios hechos por los partidarios de la desaparecida Rhodesia, la historia de la humanidad está repleta de sociedades que se han rebelado contra tal estado de cosas. Este fue el caso de Argelia, Palestina, las tierras eslavas de Europa del Este y Kenia. Y donde las poblaciones nativas que eran consideradas de diversas maneras como “untermensch” o “incivilizadas” (el término nacionalista blanco hoy en día sería pueblos de “bajo coeficiente intelectual”) evitaron el exterminio, lucharon para recuperar sus tierras nativas.


Los negros africanos de lo que llegó a ser el territorio de Rhodesia no eran diferentes de los católicos irlandeses que resistían la colonización británica; los musulmanes argelinos resistiendo la dominación francesa, los negros africanos kenianos resistiendo a los británicos o los palestinos resistiendo las milicias de la Agencia Judía en Palestina y el Estado de Israel una vez establecido.


Una alusión al pensamiento marxista como la raíz del mal que estimuló a los negros africanos a luchar contra el "paraíso" de Rhodesia es tan absurda como perezosa en su construcción. El hecho de que la Unión Soviética y China brindaran ayuda y apoyo a los movimientos de liberación en África y Asia, y hasta cierto punto en América Latina, fue más un accidente de la historia. La resistencia contra cualquier entidad de colonos, como Rhodesia, es una faceta ineludible de la psique humana.

Los polacos y otros eslavos a los que los nazis consideraban infrahumanos no estaban preocupados por la afirmación de Hitler de que los vecinos eslavos de Alemania debían todos los logros culturales a la raza alemana. A los irlandeses que eran ridiculizados como simios, alborotadores y propensos a la fecundidad, no les importaba demasiado la civilización británico-inglesa que bajo Cromwell los había masacrado. Después de todo, fue bajo el dominio británico que tuvo lugar la devastadora hambruna. Hoy en día, esta mentalidad persiste en las comunidades republicanas irlandesas que perciben a Israel como un estado colono colonial injusto y opresivo y apoyan la causa palestina, mientras que los unionistas adoptan el punto de vista opuesto.

Los kenianos correctamente querían recuperar su tierra, al igual que los argelinos y los palestinos. ¿Por qué los viejos rodesianos resienten la idea de que los negros querían recuperar su tierra? Al igual que con los pueblos antes mencionados, el africano negro resintió del sistema paternalista opresivo y resistió.


Rhodesia era una pequeña nación de unos pocos de miles de blancos, principalmente agricultores cuyos hijos fueron reclutados para formar parte de los Selous Scouts.

La insurgencia en Rhodesia: banderas falsas, propaganda negra y guerra psicológica.

El asesinato de los misioneros católicos europeos en 1977 como posiblemente una operación llevada a cabo por los exploradores Selous han sido recibidos con incredulidad y recurriendo al cansado mantra de los "medios marxistas sesgados" (abordaremos a los Selous más adelante).

Cualquiera que investigue el asesinato de los misioneros descubrirá que no fue un caso abierto y cerrado para responsabilizar a ninguna de las partes. Como en todas las guerras, se libraba una guerra de propaganda y Rhodesia no era la excepción. El uso de las artes oscuras de las operaciones de bandera falsa era evidentemente parte de esto. De hecho, dos miembros africanos negros de los Scouts que participaron en la plantación de explosivos en iglesias en Salisbury en febrero de 1980, fueron ellos mismos accidentalmente volados por una de sus bombas. El objetivo de esta operación Selous Scouts era hacer parecer que los operativos que trabajaban para el ala militar de la organización ZANU-PF de Robert Mugabe habían colocado las bombas (la literatura ZANU se dejó en varios lugares) porque, como marxista, Mugabe (el jesuita marxista) estaba "en contra" del cristianismo.

Por tanto, no es inconcebible que miembros negros de los Selous Scouts disfrazados de guerrilleros africanos fueran utilizados para llevar a cabo las masacres de los misioneros con el fin de presentar a las milicias africanas como anticlericalistas.

Los Selous Scouts actuaron con salvajismo, matando a civiles inocentes en los países vecinos, no por error, es decir, el eufemístico "daño colateral", sino como un medio de guerra psicológica. Un buen ejemplo de esto fue la incursión de los Scouts en un campamento de ZANLA, situado en Nyadzonya - Pungwe, Mozambique en agosto de 1976. Llegaron al campamento disfrazando sus vehículos blindados con los colores del Ejército de Mozambique (una táctica clásica de Bandera Falsa) y, según el mayor Reid-Daly, masacraron hasta mil personas.

Aparentemente, fue un recuento impresionante, excepto que los Selous Scouts habían disparado a muchos guerrilleros que estaban desarmados mientras se formaban para un desfile. El campo se registró formalmente como campo de refugiados en las Naciones Unidas. Los guerrilleros estaban presentes, pero el grupo de asalto de los Scouts consideró oportuno prender fuego al hospital del campamento, tras lo cual todos los pacientes fueron quemados vivos.


En estas fotografías se puede apreciar el componente mixto de los Selous Scout -colonos y nativos africanos- En la foto superior, la primera clase de paracaidismo (Imagen vía Archivo Nacional de Zimbabwe). El período durante el cual los Selous Scouts estuvieron más activos fue durante la denominada Guerra de Rhodesia Bush. 


El racismo apenas velado busca promover la idea de que el salvajismo es dominio exclusivo de los africanos mientras se olvida la depravación de origen europeo. Es interesante cómo las brutalidades infligidas a los africanos por las potencias coloniales europeas prefiguraron las visitadas a sus compatriotas europeos, incluidos los judíos, durante el período previo a la Segunda Guerra Mundial y, por supuesto, durante la guerra misma: el genocidio contra los Namaqua y Herrero en la era del Kaiser. Los bóer no se han olvidado de los campos de concentración británicos y tampoco de los etíopes que soportaron los campos italianos en Somalilandia y que fueron masacrados por camisas negras en Addis Abeba en 1937.

En el caso de Rhodesia, ¿cómo se pueden ignorar los hechos de la brutal campaña de contrainsurgencia empleada en la década de 1970? Se utilizaron topadoras y lanzallamas para defoliar 54.000 millas cuadradas de campo. Las "Zonas de Fuego Libre" establecidas por el ejército de Rhodesia significaron que cualquier africano negro que se encontrara dentro de ellas sería fusilado a la vista. Se impusieron toques de queda a la población negra (efectivamente ley marcial) y hubo internamiento y reasentamiento forzoso.


Hubo una campaña de terror que no se detuvo con la matanza de guerrilleros negros africanos, muchos de los cuales no murieron en acción, sino que fueron torturados antes de ser asesinados, sino que también se extendió a los civiles negros africanos.


Detener la insurgencia negra en Rhodesia era una causa perdida para el fallido estado. Objetivamente, los Selous Scouts eran una fuerza de combate formidable, pero estaban luchando por una causa perdida. Las frecuentes referencias a ser "traicionados" por los británicos (y los estadounidenses) suenan huecas. Tiene reminiscencias de la lógica de "puñalada por la espalda" popularizada por los nacionalistas alemanes después de la Primera Guerra Mundial.

La guerra de Rhodesia, como fue el caso de las guerras de Angola y Mozambique, llegó al final de la descolonización de África. Los Selous Scouts sin duda obtuvieron muchas victorias, pero también lo hicieron los militares franceses en Argelia, los británicos en Kenia y Adén y los portugueses en el sur de África.

Rhodesia se habría derrumbado sin el apoyo de los británicos, cuya política de amigos y parientes esencialmente dominó hasta el final. No invadieron Rhodesia después de su Declaración Unilateral de Independencia (UDI) y los británicos eludieron las sanciones suministrando petróleo a Rhodesia a través de Mozambique hasta que los portugueses se retiraron.


Fotografía modificada, en el fondo combatientes Selous Scouts y destacados oficiales de esa unidad del ejército rodhesiano

Guerra racial moderna y política de identidad

Me parece que quienes añoran la vieja Rhodesia han fusionado su razón de ser ideológica con las manifestaciones actuales de las políticas de identidad. Son nacionalistas blancos o, en el lenguaje de muchos de la izquierda política mayoritaria, "supremacistas blancos". El uso del término supremacista blanco es en muchos sentidos objetivo. Después de todo, los rodesianos blancos disfrutaban de una gran cantidad de privilegios; privilegio real y tangible. No las expresiones estúpidas que se utilizan en las “guerras culturales” de hoy en día, donde términos como “privilegio blanco”, “privilegio negro”, “privilegio judío”, etc., se utilizan con frecuencia. Gozaban de un nivel de vida que se debía en gran medida al sometimiento y explotación de la población indígena africana negra. El vínculo con White Supremacy proviene del uso de la antigua bandera de Rhodesia como fuente de identidad blanca militante, como fue el caso del asesino en masa Dylann Roof. También estaba el caso de los soldados canadienses con base en Alberta que se descubrió que vendían banderas, insignias y literatura nacionalista supremacista blanca.

La verdad es que Rhodesia no fue un modelo de democracia que ofreciera a su población negra africana una visión para el futuro. Rhodesia se derrumbó bajo el peso de sus contradicciones. Algunos, como bastantes comentaristas de esta publicación, pueden regodearse de las fallas de los líderes políticos de Zimbabwe, pero la verdad es que viven en negación sobre la naturaleza del sistema y el hecho de que ese sistema estaba condenado al fracaso, como fue el caso del Pieds-Noir franco-argelino y el Boer, deben afrontarlo.


***

Selous Scouts: La guerra sucia, guerra química y crímenes de guerra

Los Scouts se especializaron en la guerra irregular con sus métodos que incluyen "infiltración, asesinato, secuestro, tortura, sabotaje y chantaje".




Curiosamente, el famoso teniente coronel Ronald Reid-Daly, comandante de los exploradores Selous, era un veterano del conflicto de Malasia durante el cual habría visto y asimilado los aspectos más nefastos de la contra-insurgencia empleada por el ejército británico. Si bien el nombre de Frank Kitson a menudo se proyecta como la autoridad clave en la práctica de la contra-insurgencia del ejército británico, después de su experiencia en Keniaa lo que se agregó el uso de “Propaganda Negra” (Kitson utilizó, además, sus experiencias coloniales en Irlanda del Norte contra el Ejército Republicano Irlandés), el principal exponente de lo que llegó a conocerse como guerra de contra-insurgencia rural anti-maoísta fue aplicado en Malasia por el general Robert Thompson. 


Ronald Francis Reid-Daly (1928 - 2010) fue el oficial militar de Rhodesia que fundó y comandó la unidad de comandos de fuerzas especiales Selous Scouts que lucharon durante la Guerra de Rhodesia. Inicialmente Reid-Daly pertenecía al Servicio Aéreo Especial de Rhodesia o SAS - Rhodesia (Escuadrón C 22 SAS). Tanto el SAS como los Selous Scouts fueron las principales unidades de fuerzas especiales utilizadas en operaciones externas.  


Si bien los Scouts fueron efectivos en la destrucción de las guerrillas enemigas, estaban en el centro de una estrategia de contra-insurgencia que libraba una guerra química no solo contra las guerrillas, sino también contra la población africana en general


Un Cessna 337 modificado de la Fuerza Aérea de Rhodesia bombardea con napalm posiciones de la guerrilla


La unidad también fue responsable de iniciar ataques de bandera falsa de los que buscaba culpar a los grupos nacionalistas negros; un modo de operación que, si bien era fundamental para su objetivo de proporcionar al estado de Rhodesia una dimensión de guerra psicológica, sus partidarios afirman erróneamente que era ajeno a la unidad.

Los Selous Scouts eran una unidad multirracial formada en 1973 para librar una guerra no convencional. Los métodos empleados incluyeron infiltración, asesinato, secuestro, tortura, sabotaje y chantaje. La unidad cometió atrocidades de "Bandera falsa" como parte de su modus operandi. La "Guerra Bush" de Rhodesia, como es el caso de una multitud de guerras, tuvo una dimensión psicológica en la que los Selous Scouts, con su experiencia en "pseudo operaciones", emprendieron consistentemente misiones que se basaban en el engaño, y tal engaño fue utilizado para matar a un gran número de enemigos insurgentes (nacionalistas negros) o para eliminar objetivos civiles específicos con el fin de culpar a los insurgentes africanos negros.

La “Operación HECTIC” fue diseñada para desacreditar al ZANU de Robert Mugabe en las próximas elecciones haciendo que su organización pareciera anticristiana y anti-libertad de religión. La ironía es que, aunque influido por el pensamiento marxista-leninista, Mugabe no abandonó totalmente su educación jesuita. Por ejemplo, llamó a uno de sus hijos menores, Belarmino, en honor a un santo católico no muy conocido.


La capacidad de mezclarse con el enemigo convirtió a los Selous Scouts en formidables oponentes.


La operación de 1980 sugiere que las frecuentes acusaciones hechas por los nacionalistas negros de que los Selous Scouts llevaron a cabo atrocidades contra pueblos africanos y misiones católicas son extremadamente creíbles. Habrían utilizado a miembros negros africanos de la fuerza para disfrazarse de guerrilleros y llevar a cabo tales atrocidades. Mugabe culpó específicamente a los Selous Scouts por haber llevado a cabo el ataque contra los misioneros católicos en febrero de 1977, así como por el asesinato a tiros de 27 afroamericanos trabajadores del té en una finca propiedad de blancos en el valle de Honde a fines de 1976.

¿Por qué los Selous Scouts habrían cometido estos hechos? La respuesta es que junto a la guerra de balas y bombas estaba la guerra de propaganda. El estado de Rhodesia buscó desacreditar a las guerrillas africanas negras entre la población negra, así como en la corte internacional de la opinión pública. La historia está repleta de ejemplos de estados que utilizan secciones militarizadas para llevar a cabo actos terroristas. La Mano Roja, la organización terrorista que asesinó a miembros del FLN argelino y sus proveedores de armas de Alemania Occidental fue una creación del Servicio Secreto francés. Y la Fuerza de Reacción Militar (MRF), una construcción de la inteligencia del ejército británico, fue formada por el brigadier Frank Kitson no solo para disparar contra las guerrillas republicanas irlandesas, sino para organizar operaciones que las desacreditarían.

Esto no significa que las atrocidades en disputa pueden no haber sido cometidas por guerrilleros negros africanos que asesinaron a quienes consideraban traidores a su causa, pero debería alentar a los viejos rodesianos incrédulos a quitarse las lentes teñidas de rosa y enfrentar las brutalidades. perpetrados por su lado.


Selous Scouts

Los Selous Scouts fueron creados precisamente para llevar a cabo una "guerra despiadada de no caballeros". De hecho, la unidad llegó a ser conocida, además, por "asesinatos, violaciones, contrabando y caza furtiva", y sus miembros se ganaron la reputación de "asesinos psicópatas" y "extrovertidos vanagloriosos".

El ejército de Rhodesia comenzó a desarrollar una guerra química de contra-insurgencia a principios de la década de 1970, y los Scouts pasaron de ser una unidad de rastreo a ser los principales proveedores de la estrategia de guerra química del estado de Rhodesia. El libro de Glenn Cross de 1999, Plague Wars, da una buena descripción de este aspecto de la guerra. Un artículo académico escrito en 2002 por Ian Martinez para Third World Quarterly que se tituló "La historia del uso de agentes bacteriológicos y químicos durante la Guerra de liberación de Zimbabwe de 1965-80 por las fuerzas de Rhodesia" también es muy esclarecedor sobre el papel de la guerra química en la contra-insurgencia.

Los Selous Scouts recibieron instrucciones de envenenar los abrevaderos, el agua estancada, los arroyos de movimiento lento y otros cuerpos de agua cerca de los campamentos de la guerrilla dentro de Mozambique, cerca de la frontera. En una operación, los Selous Scouts envenenaron un pozo en Mozambique que provocó la muerte de al menos 200 civiles porque el pozo era la única fuente de agua potable en la zona. Los Scouts también recibieron instrucciones de propagar el cólera. Al amparo de la “Operación Caminata Larga” en agosto de 1973, miembros de la unidad vertieron agentes del cólera en el río Ruya. Esto también causó muertes entre civiles inocentes en Mozambique, pero se suspendió porque el agente se disipó rápidamente en el agua y podría extenderse a Rhodesia, incluidas las áreas donde operaban los Scouts.


Los Selous Scouts hacían honor a su nombre, eran unos expertos en el arte de rastrear y explorar. 


La unidad se encargaba de inyectar talio en la carne enlatada que se les daba a los insurgentes con el engaño de que los suministraba una fuente amiga. En una situación, los guerrilleros dieron su carne enlatada envenenada a los aldeanos de Tribal Trust Land que tenían escasez de alimentos, y los aldeanos murieron posteriormente.

Las autoridades reclutaron agentes dobles dentro de las estructuras de la guerrilla negra africana que empaparon ropa y alimentos con órganos fosforados tóxicos. Esto resultó en la muerte de muchos revolucionarios recién reclutados en el viaje a los campos de entrenamiento de la guerrilla en Zambia y Mozambique. Significó que aquellos que aún no se habían comprometido en atacar al estado de Rhodesia (después de todo, podrían haberse rendido o los instructores les hubieran dicho que no eran aptos para la guerrilla) fueron asesinados preventivamente de manera cruel. Además, debido a que los perpetradores, los agentes dobles podían ser identificados fácilmente, ellos mismos fueron asesinados.

Los guerrilleros africanos negros capturados a quienes los Selous Scouts no pudieron "convertir" fueron sometidos a una ejecución extrajudicial o fueron utilizados como conejillos de indias humanos en experimentos biológicos, que por supuesto condujeron inevitablemente a su muerte.

Si bien algunos antiguos rodesianos pueden afirmar que un "fin justifica los medios'', los resultados contradicen su frecuente argumento de que la guerra se libró para defender tanto a los africanos negros como a los blancos, ya que a las autoridades de Rhodesia no parecía importarles que su programa de guerra química fuera, a fines de la década de 1970, causando problemas de salud entre la población civil negra.

En 1979, Rhodesia registró el mayor brote registrado de ántrax, un desarrollo que se ha interpretado como el uso deliberado de un agente biológico armado. Ken Flower, Jefe de la Organización Central de Inteligencia (CIO) de Rhodesia y un oficial del CIO llamado Henrik Ellert confirmaron en sus memorias que el régimen liderado por Ian Smith usó armas biológicas y químicas contra las guerrillas, contra los africanos negros rurales para evitar su apoyo a las guerrillas y contra el ganado para reducir las existencias rurales de alimentos.

La práctica de la guerra química, en el centro de la cual estaban los Selous Scouts, equivalía a crímenes de guerra porque podría decirse que contravenía la Convención de La Haya de 1907. La matanza deliberada y sistemática de ganado en áreas pobladas de África Negra infringía el Artículo Común III de la Convención de Ginebra, 1949. Además, la Convención sobre Armas Biológicas (BWC) de 1972 incorporó la renuncia de la comunidad mundial de naciones al uso de armas biológicas contra seres humanos.

Un aspecto clave del programa de guerra química se refiere a su financiación. Los investigadores han señalado a Gran Bretaña como el punto de origen, desde donde se canalizó el dinero a través de Arabia Saudita y Sudáfrica antes de llegar a Rhodesia.

 

Comandos Selous Scouts patrullando. Este tipo de indumentaria era común entre estos combatientes. 

El mantra de "los británicos nos traicionaron" de los viejos rodesianos olvida que la actitud de "parientes y amigos" se mantuvo firme hasta el final, cuando los británicos y el gobierno de Ian Smith se dieron cuenta que las cargas financieras y de mano de obra impuestas por la guerra al estado de Rhodesia, hacía imposible continuarla. La emigración de blancos que querían evitar el servicio obligatorio, las sanciones, así como las contradicciones morales inherentes al mantenimiento de un estado racial, hicieron imposible su continuación.

Existían dificultades asociadas con la aplicación de sanciones específicas a Rhodesia, que no era signataria de la Convención de Ginebra y, después de su Declaración Unilateral de Independencia en 1965, era un régimen ilegal. No obstante, ahora se reconoce que el uso de tales armas químicas en conflictos internos e internacionales constituye una violación del derecho internacional consuetudinario. 

El problema de atribuir al estado sucesor de Rhodesia, Zimbabwe, la responsabilidad de estos crímenes puede superarse atribuyendo la responsabilidad de estas acciones a las personas que actuaron en nombre del estado de Rhodesia. Esto significaría que los miembros de las Fuerzas de Seguridad de Rhodesia, incluidos aquellos que sirvieron con los Selous Scouts, podrían ser procesados ​​por un tribunal al estilo de Nuremberg por una variedad de delitos, incluido el asesinato y los malos tratos de prisioneros de guerra,

Como parte de la guerra de engaño, las muertes de humanos y ganado por envenenamiento se utilizó como propaganda del gobierno de Rhodesia para culpar a las guerrillas. Así, parte de la estrategia del Estado se orientó a sembrar discordia entre los insurgentes y las poblaciones rurales. Por un lado, se condicionó a los aldeanos a creer que la escasez de alimentos se debía a la actividad guerrillera, mientras que se alentó a los insurgentes a creer que los aldeanos estaban envenenando sus alimentos. En varios casos, lanzaron ataques contra las aldeas de las que eran responsables.

Las admisiones de los veteranos de Selous Scouts con respecto a estas acciones y objetivos son raras, pero un cable de la Agencia de Inteligencia de Defensa de los Estados Unidos (DIA) desde Harare a Washington DC en 1990 reveló que un miembro de los Selous Scouts admitió en 1978 que habíanintentado ambos técnicas de guerra química y biológica para matar terroristas”. Y los recuerdos de personas como Ken Flower y Henrik Ellert con respecto a las atrocidades de los Selous Scouts son muy relevantes porque los Scouts estaban directamente bajo el control del CIO y no del Ejército de Rhodesia

El gobierno de Rhodesia tenía un estricto control sobre los medios de comunicación, lo que facilitó las operaciones psicológicas de los Selous Scouts. Por tanto, la población blanca estaba sujeta a un lavado de cerebro por parte de la propaganda gubernamental que incluía una gran cantidad de desinformación.

Esto explica en parte la renuencia de muchos antiguos rodesianos a aceptar este aspecto poco saludable de la lucha por mantener el status quo.


Adeyinka Makinde

Fuente:

Rhodesia: Ruminations on a Former Colonial Settler State

History: Rhodesia’s 1970’s “Dirty War”: A Tale of False Flag Terror and War Crimes

20 marzo 2018

Diamantes de Sangre (2)




El siguiente reportaje en realidad son múltiples reportajes escritos en diferentes años. La primera parte corresponde a una investigación de BBC Mundo, redactados entre 2010 y 2012 y la segunda parte es una investigación mía basada en la recopilación de diferentes fuentes y material audiovisual. Dentro de una extensa bibliografía existente he optado para la primera parte por el informe de la BBC, que lo reproducimos textualmente por ser claro, conciso y enfoca, en pocas palabras, la cuestión central del tema: Qué es un diamante de sangre?. 
     Buena lectura.



I parte

¿Qué es un "diamante sangriento"?

BBC Mundo


Pintura, hombre examinando un diamante. El juicio al ex presidente de Liberia, Charles Taylor, en el Tribunal Especial para Sierra Leona, en La Haya, ha vuelto a colocar el tema de los llamados "diamantes sangrientos" en el centro de la atención internacional.


A continuación, algunos datos relevantes sobre el tema.


¿Qué son los "diamantes sangrientos"?

Los llamados "diamantes de conflicto" o "diamantes sangrientos",  son piedras en bruto que han sido relacionadas con las guerras en Sierra Leona, Angola, Liberia, República Democrática del Congo y la República Centroafricana.

Los defensores de los derechos humanos alegan que grupos guerrilleros en esos países usan los miles de millones de dólares procedentes de la venta de los diamantes de las minas que controlan para comprar armas y financiar guerras.

¿Quiénes son las víctimas?


Mina de diamantes en Zimbawe. Tres de las guerras más sangrientas de África han tenido lugar en países productores de diamantes.


Se estima que los diamantes contrabandeados desde zonas en conflicto representan sólo el 5% del total en circulación.

Aun así, su impacto en las guerras parece ser considerable. Mark Doyle, analista de la BBC, señala que no es coincidencia que tres de las guerras más sangrientas de África -Angola, Sierra Leona y R. D. del Congo- hayan tenido lugar en países productores de diamantes.

Se estima que por lo menos 800.000 personas murieron durante los 27 años de guerra en Angola, donde los rebeldes controlaban vastas zonas diamantíferas.

El conflicto en la R. D. del Congo ha causado la muerte de más de dos millones de personas a raíz de la violencia, el hambre y las enfermedades, según estimaciones de organismos de ayuda.

¿Qué se ha hecho para evitar el comercio de "diamantes de sangre"?

En un intento de frenar uno de los principales "motores" de la guerra en África, en 2003 entró en vigor un acuerdo de certificación conocido como Proceso Kimberley (el nombre de una localidad de explotación de diamantes en Sudáfrica).

El plan es producto de años de negociaciones y fue acordado en una conferencia internacional en la ciudad suiza de Interlaken, a la que asistieron cancilleres de más de 30 países.

¿En qué consiste el Proceso Kimberley?

El sistema exige a los países africanos la exportación de diamantes con una certificación de "libres de conflicto", mientras que los países importadores se comprometen a adquirir en el mercado internacional sólo diamantes certificados.

También se contemplan reglas para verificar el origen de diamantes ya cortados, pulidos y en manos de fabricantes de joyas.

En el Proceso Kimberly participan 49 miembros que representan a 75 países.

¿Es efectivo el Proceso Kimberley?


Revisión de diamantes. El Proceso Kimberley contempla reglas para verificar el origen de diamantes ya cortados y pulidos.


Algunas organizaciones humanitarias han criticado al Proceso Kimberley señalando que la certificación de los diamantes no debe ser responsabilidad de los países productores, sino ser verificada por un organismo independiente.

Señalan que sin verificación independiente, los certificados mismos serán objeto de un comercio ilegal.

Según un informe publicado por Global Witness (organización que llama la atención sobre la relación entre recursos naturales y violaciones de derechos humanos), el comercio de la piedra preciosa sigue financiando conflictos armados, sobre todo en África.

La organización indicó en su investigación (hecha en Estados Unidos) que la mayoría de los lugares que venden diamantes al por menor no pudieron demostrar que tienen controles claros para frenar el comercio de piedras que puedan financiar conflictos armados.

¿Cómo saber si un diamante es "sangriento"?

A pesar de que el Proceso Kimberley no hace certificaciones individuales, en su sitio de internet ha publicado una leyenda llamada "Sistema de Garantías" (que complementa pero es distinta del proceso) que deberían tener todas las facturas de diamantes provenientes de joyeros confiables.


La leyenda asegura que el diamante facturado "fue comprado de fuentes legítimas no implicadas en la financiación de conflictos y de conformidad con las resoluciones de Naciones Unidas. El abajo firmante garantiza que estos diamantes están libres de conflicto, basado en el conocimiento personal y/o garantías por escrito presentadas por el proveedor de estos diamantes".

En tanto, Amnistía Internacional y Global Witness publicaron una guía con preguntas para formular a los vendedores, como ¿puedo ver una copia de la política de su compañía sobre los diamantes de zonas en conflicto? o ¿puede mostrarme una garantía escrita de su proveedor de diamantes que demuestre que la pieza no procede de zonas de guerra?

Las organizaciones defensoras de los derechos humanos confían en que las preguntas de los consumidores sean un paso más en la lucha contra los "diamantes sangrientos".

¿Qué tienen que ver Naomi Campbell, Charles Taylor y Nelson Mandela con los "diamantes sangrientos"?


Naomi Campbell aseguró que recibió unas piedras "de aspecto sucio" luego de una cena de beneficencia.


El ex presidente de Liberia, Charles Taylor, está siendo juzgado en el Tribunal Especial de Naciones Unidas para Sierra Leona, en La Haya, acusado, entre otros cargos, de usar "diamantes de sangre" para financiar a la guerrilla de Sierra Leona durante una guerra civil que le costó la vida a decenas de miles de personas.

Taylor ha rechazado 11 cargos en su contra que incluyen responsabilidad en asesinatos, violaciones, terrorismo, mutilaciones y el reclutamiento de niños combatientes.

Durante el juicio a Taylor, se pidió el testimonio de la modelo británica Naomi Campbell quien aseguró que le entregaron unas piedras "de aspecto sucio" luego de una cena de beneficencia en 1997, organizada por el Fondo Nelson Mandela para la Infancia, a la cual Taylor también estuvo invitado.

Ella aseguró haberlas entregado al ex director del Fondo, Jeremy Ractliffe, como donación para obras de caridad.

Ractliffe explicó que decidió esconder las piedras porque quería proteger la reputación del Fondo y del ex presidente de Sudáfrica Nelson Mandela y evitar que fueran vinculados con los "diamantes sangrientos".

El ex director del Fondo entregó los diamantes a la policía de Sudáfrica y renunció al Consejo Administrativo del Fondo.


Sigue hemorragia de diamantes sangrientos
(Una historia de Zimbabwe)




Un reportaje del programa BBC Panorama reveló en Zimbabwe la existencia de un campo de detención, controlado por miembros de las fuerzas de seguridad del país, donde se estarían practicando torturas.

El programa incluye testimonios de víctimas que afirman sufrieron palizas y abusos sexuales.

Esta información ve la luz en el momento en el que la Unión Europea estudia el permitir que diamantes procedentes de Zimbabwe puedan venderse nuevamente en el mercado internacional.

La BBC pudo comprobar, a través de un documento interno, que la UE considera que las dos minas del país reúnen las condiciones necesarias y pretende que se apruebe inmediatamente la exportación de los diamantes extraídos en esas áreas, lo que supondría un levantamiento parcial del veto a los diamantes de Zimbabwe establecido en 2009.

Esta prohibición fue establecida por el llamado Proceso Kimberley (PK), organización internacional que supervisa el comercio de diamantes. La prohibición se impuso alegando la existencia de asesinatos a gran escala y abusos por parte de las fuerzas de seguridad del estado en las minas de Marange.

"40 latigazos"


Excavación de diamantes. Copyright de la imagen BBC WORLD SERVICE. El reportaje revela la existencia de dos campos de detención donde se han reportado torturas.


El principal campo de concentración revelado por el programa es conocido como "Base Diamante". Testigos afirman que está conformado por un conjunto de tiendas militares con un cercado de alambre de púas exterior donde se retiene a los prisioneros.

La compañía que explota la mina está dirigida por un amigo cercano del presidente Robert Mugabe. Un segundo campo estaría situado en Muchena.

"Es un lugar de tortura donde en ocasiones los mineros no pueden caminar por las palizas", dijo a la BBC una víctima liberada del campo principal en febrero de 2011.

Todos los prisioneros que hablaron con la BBC pidieron anonimato.

"Nos dieron 40 latigazos en la mañana, 40 al mediodía y 40 por la noche", dijo el hombre, quien tras los golpes todavía no puede usar uno de sus brazos y apenas puede caminar.

"Usaron palos de madera para golpearme aquí, debajo de mis pies, mientras permanecía en el suelo. También emplearon piedras para dañar mi tobillos".

Él y otros ex detenidos explicaron que los hombres son retenidos en los campos por varios días antes de que lleguen nuevos reclusos.

Las mujeres son liberadas más rápido, a menudo violadas, dijeron testigos.

"Incluso si alguien muere ahí, los soldados no lo dicen, porque no quieren que se sepa", aseguró también anónimamente un oficial de la armada de Zimbabwe.

Tortura con perros

Testigos afirman que los campos han estado funcionando durante tres años.

En Marange, la policía y los militares reclutan a civiles para excavar ilegalmente diamantes. Estos trabajadores son llevados a los campos como castigo si piden un mayor margen de beneficios. Aquellos civiles descubiertos en las minas también son castigados.

Un exmiembro de la policía paramilitar que trabajó en el campo principal a finales de 2008, confesó a la BBC que torturó a prisioneros ahogándoles en agua y cortándoles los genitales.

También detalló que perros fueron entrenados para morder a los prisioneros. "Esposaban al prisionero y liberaban al perro para que mordiera", dijo. "Había muchos gritos".

Otro testigo explicó a la BBC que fue encerrado en el campo de Muchena en 2008 y fue internado de nuevo en noviembre de 2010. "Nada ha cambiado entre 2008 y 2010... Un montón de gente todavía están siendo golpeada o mordida por perros".

Proceso Kimberley y el levantamiento del veto

Los diamantes de Marange fueron vetados en 2009 por PK, institución establecida por la industria diamantífera, entidades públicas y organizaciones no gubernamentales para evitar la compra y venta de los llamados diamantes de sangre.

Representantes de PK visitaron brevemente el área en agosto de 2010 y concluyeron que la situación en el área era todavía problemática pero que se habían dado significativos progresos.


Diamantes. Copyright de la imagen BBC WORLD SERVICE. El proceso Kimberley vetó la exportación de diamantes de Zimbabwe en 2009.


Nick Westcott, portavoz del grupo de control del PK, dijo acerca de los campos de detención que "no es algo que haya sido notificado al Proceso Kimberley".

La propuesta de la UE para permitir la venta de diamantes de dos minas en Marange fue una vía para llegar a un acuerdo con el PK.

El pasado mes de junio, el director del PK Matieu Yamba, anunció formalmente el levantamiento de la prohibición a la exportación de diamantes de las dos principales minas Marange. Decisión a la que se opuso la UE.

La propuesta de la UE pretendía llegar a un término medio, acordando el levantamiento parcial del veto, pero insistiendo en la presencia de medidas de control internacional en Marange.

Henry Bellingham, ministro de la UE por África, aclaró que la unión "sólo apoya exportaciones de esas zonas sujetas a permanente control. Tanto la UE como Reino Unido se oponen fuertemente a la reanudación de las exportaciones hasta que expertos internacionales e independientes consideren que cumple con los requisitos del PK".

No obstante, críticos consideran que es una propuesta muy débil.

Annie Dunneback, del grupo activista Global Witness dijo que "es la última de una serie de propuestas que han puesto de lado el principio de exportar para progresar y que lo que tratan es consentir las demandas de Zimbabwe".

El gobierno de Robert Mugabe no ha dado ninguna respuesta al reporte de la BBC


NOTA del editor del blog: Robert Mugabe gobernó Zimbabwe entre 1987 hasta finales del 2017. En realidad gobernó su país desde 1980, cuando era primer ministro y luego, desde 1987, como presidente (tras una reforma constitucional en 1987 que unificó la jefatura de gobierno y de estado). Estuvo al frente del estado 37 años, fue derrocado en noviembre del 2017 por el ejército de Zimbabwe. Mugabe anunció a inicios de marzo del 2016 la nacionalización de las minas de diamantes de Zimbabwe, 8º lugar entre los mayores productores, alrededor del 13% de la producción mundial. Mugabe afirmó que las compañías diamanteras sustraían al gobierno beneficios sobre los 13.000 millones de dólares anuales. Sin duda Mugabe fue tan responsable por todos los abusos y crímenes en los campos diamanteros de su país junto a otras autoridades, pero también es cierto que en los últimos tiempos era ya un indeseable para los británicos.


Los diamantes de sangre: ¿un tema del pasado?



Los diamantes de sangre se relacionan con las guerras en Sierra Leona, Angola, Liberia, República Democrática del Congo y la República Centroafricana.

Durante muchos años, su imagen estuvo estrechamente vinculada a los llamados diamantes de sangre o diamantes de conflicto. Pero Sierra Leona, en el occidente de África, ha estado tomando medidas recientemente para alejarse de esa imagen de guerra.

Justo en la zona donde el conflicto comenzó en 1991 -y donde, no por coincidencia, está la mayoría de los diamantes- una compañía de origen israelí comenzó a operar una nueva planta en una mina de esa piedra preciosa, en el este del país.

La planta es parte de una ola de inversión extranjera en minería, calles y construcciones que han transformado la cara de Sierra Leona en los últimos años, como explica Mark Doyle, periodista de la BBC en Koidu, en el este del país.

Pero también es un contraste fuerte con la minería artesanal de la que dependen miles de personas sólo en el área de Koidu, donde se encuentra la nueva planta.

Excavar y cribar en busca de diamantes es una labor agotadora, pero para muchos es el único trabajo disponible en uno de los países más pobres del mundo.

Un nuevo comienzo


Minas en Koidu. Algunas máquinas trabajan en minas en Koidu, en el este de Sierra Leona.


Para niveles internacionales, Koidu todavía es un lugar muy pobre.

Doyle, de la BBC, explica que no vio ninguna calle pavimentada adecuadamente y que la mayoría de las personas tiene que vivir sin agua corriente ni electricidad doméstica.

Pero los mercados están llenos de actividad y ya hay algunas máquinas que están cavando desagües en las principales rutas y nivelando algunos senderos.

"Antes de la guerra este era un centro comercial importante porque queda cerca de las fronteras con Guinea y Liberia", dijo el alcalde de Koidu, Sahr Musa Sessie-Gbenda. "Luego, durante las hostilidades, la economía cayó en picada. Ahora, las personas están tratando de reconstruir de nuevo".

El dueño de la mina renovada en Koidu, el multimillonario israelí Beny Steinmetz, cree que "este es el futuro""Significa trabajo para las personas e ingresos para el país", dijo.

Pasado sangriento

El periodista de la BBC dice que cuando visitó Koidu al final de los años 90, era un "paisaje lunar de pequeños fosos cavados por ciudadanos comunes y corrientes pero controlados por rebeldes armados que vigilaban para 'gravar' cualquier piedra preciosa".

La avidez por los diamantes -llamados diamantes de sangre porque muchos se usaban para comprar armas de los rebeldes- era tan intensa que las personas en esos días cavaban hasta los cimientos de sus propias casas.

La razón es que en los años 70 y 80, las personas construyeron los cimientos de sus casas utilizando gravilla de una mina de diamantes que llevaba mucho tiempo abandonada, como explicó uno de los ingenieros de la nueva mina.

"¡Por eso uno podía ver personas cavando hasta sus propias salas!", dijo el ingeniero.

Recientemente, el presidente de Liberia, Charles Taylor, fue condenado por el Tribunal Especial de Sierra Leona por ayudar a los rebeldes de Sierra Leona a cambio de diamantes, con lo que se hizo cómplice de los crímenes de guerra y lesa humanidad cometidos durante la guerra civil de ese país africano, entre 1991 y 2002.

Desigualdad


Buscando diamantes a mano. Algunas personas no tienen alternativa a buscar diamantes de la manera tradicional.


La nueva planta está en funcionamiento 24 horas al día y sólo da empleo a un pequeño porcentaje de las personas en el área que quisieran trabajar en ella.

La bonanza de la inversión extranjera en Sierra Leona, especialmente en minas de mineral de hierro y de diamantes pero también calles y nuevas construcciones, ha creado unas pequeñas islas de prosperidad y la posibilidad de ingresos crecientes para el estado por concepto de impuestos.

Pero esas islas contrastan con la situación de la mayoría de los habitantes del país, que todavía son extremadamente pobres.

Hoy todavía hay miles de personas que ganan su sustento diario con técnicas tradicionales para buscar piedras preciosas en el área cercana a Koidu.

Una de las maneras en que los habitantes de ese país africano podrían verse beneficiados de estos nuevos proyectos es con inversiones de pequeña escala en las fincas, según opina el comerciante de cacao Job Koademba.

En Sierra Leona la mayoría de personas dependen de la agricultura y aunque muchos tienen tierras, carecen de los recursos para desarrollarlas. "Tener una tierra sin dinero para invertir en ella -para comprar semillas y herramientas- es como tener un carro sin gasolina. No sirve", dice Koademba.

Por ahora, buena parte de las inversiones son en áreas mineras, pero la pregunta que algunos se hacen es cuánto dinero proveniente de este nuevo comienzo llegará en últimas a las personas comunes y corrientes.

La respuesta puede no aclararse durante años. Pero algo es indudable: en este país africano habrá diamantes para rato.




II parte

El control de la industria de los "Diamantes de Sangre"


Es un tema difícil de tratar, incluso por implicaciones legales, pero sobre todo por los poderosos intereses ocultos detrás de la sangría de donde provienen los miles de diamantes que se ofertan al público en grandes joyerías de Europa y Norteamérica, principalmente.

En general, el público que conoce el tema relaciona los diamantes con algunas firmas y personajes: De Beers, Diamantes Lazare, Maurice Tempelsman y otros no tan conocidos.

En New York, es muy conocido como comerciante de diamantes Maurice Tempelsman, que aprendió el oficio de su padre, sobre él pesa la "acusación" de mantener un imperio comercial con los diamantes. El señor Tempelsman nació en Bélgica, pero desde pequeño vive en los Estados Unidos, país de quien ostenta la nacionalidad, su familia proviene de la comunidad judía de Ambers que emigró a América evitando la persecución nazi durante la segunda guerra mundial. 

Tempelsman es presidente de la junta directiva de "Lazare Kaplan International Inc." (LKI), la empresa de diamantes más grande en los Estados Unidos, diamantes que se comercializan en todo el mundo bajo la marca, "Diamantes Lazare".

La influencia económica-política de Maurice Tempelsman es tal que ha sido uno más de los tantos típicos hombres de negocios inmensamente ricos que aportan a las campañas políticas en los Estados Unidos, sin distinción de bando político, suele mencionarse donaciones a las campañas de George H.W. Bush, John Kerry, Barack Obama, Maxine Waters, John Rockefeller, Edward Kennedy, Richard Gephardt, etc. Tempelsman explotó sus lazos con Anthony Lake, asesor de Seguridad Nacional de Clinton, que intervino el Export-Import Bank de EE.UU. a pedido de Tempelsman, conforme mencionan algunas publicaciones.

Tempelsman es muy conocido por su relación desde 1980 con la viuda de J.F. Kennedy (posteriormente viuda de Aristóteles Onassis), Jacqueline Kennedy. Tempelsman manejó de esa forma las finanzas de Onassis, multiplicando su fortuna. Como última voluntad de Jacqueline Kennedy Onassis, Tempelsman fue uno de sus albaceas y co-presidente de su organización caritativa, la Fundación C & J. Incluso suele afirmarse que Tempelsman obedece directamente a Evelyn de Rothschild.

Maurice Tempelsman


Tempelsman mantuvo negociaciones en África con diversos gobiernos y empresas de exploración de diamantes. Ostentó por un breve periodo el título honorífico de Cónsul General del Zaire (actual República Democrática del Congo) en New York, sostuvo reuniones con el ex dictador del Zaire, Mobutu Sese Seko a quien apoyó en sus negocios con la otra famosa empresa de comercialización de diamantes "De Beers". También se debe destacar que ha intervenido de alguna forma en la industria de diamantes de Angola, Botswana, Namibia y Sierra Leona. Ha ejercido otros cargos de influencia para el "desarrollo" en África, entre otras actividades públicas y negocios privados de diversa índole de la familia Tempelsman.

De Beers:  "A Diamond is Forever" - Un diamante es para siempre.

Es el eslogan de la conocida firma privada internacional de extracción, talla y comercialización de diamantes "De Beers". La empresa es tan vieja que se remonta a la época colonial africana, fundada en 1888 por el conocido Cecil Rhodes (en cuyo "honor" un país africano llevaba su nombre -Rodesia- actual Zimbabwe.

"De Beers" nació bajo el nombre de "De Beers Consolidated Mines". Su radio de acción es global, dedicada únicamente a los diamantes, desde 2004 la familia Oppenheimer es su principal accionista.

Desde sus inicios consolidó por mucho tiempo el monopolio mundial de la explotación y comercialización de los diamantes africanos, actualmente ejerce el control sobre un 40% del mercado mundial. 

Aunque famosa mundialmente, la historia de la firma está manchada de sangre, desde el monopolio, presión a gobiernos africanos, expulsión por la fuerza personas de sus tierras, apoderamiento ilegal de las minas, violación de leyes sobre explotación, comercialización y tráfico de los diamantes de sangre, principalmente en Sierra Leona.

No de buena gana "De Beers" tuvo que ceder a las críticas. Se comprometió adoptar medidas de garantía para los diamantes adquiridos, es decir, que no deben provenir de países en conflicto. Entre las medidas tomadas por esta firma fue la de cerrar oficinas de compra en Guinea y la República Democrática del Congo, tratando de mostrarse como un productor que rechaza los diamantes de sangre.




Podríamos citar otros casos, pero los mencionados son los más conocidos a nivel internacional.

Regulaciones y Resoluciones tanto de las Naciones Unidas como de otros organismos intentan poner freno a la introducción ilegal de diamantes provenientes de zonas de conflicto, diversas ONG's internacionales promovieron (y promueven aún) la campaña "Fatal Transactions", se trata de concienzar a comerciantes, industriales y consumidores sobre la necesidad de exigir una certificación internacional que garantice el origen del diamante. 

Se ha creado un sistema de control que demuestre al consumidor final que ese  diamante que adquiere proviene de una zona libre de conflicto. Pero, los métodos de esquivar esos compromisos siguen siendo más fáciles que la prohibición y la regulación; recordemos que en la guerra de Sierra Leona, los rebeldes del FRU traficaban libremente, eludiendo el embargo por medio del canje diamantes por armas con el gobierno de Liberia, de esa forma algunos millones de quilates partieron a los mercados foráneos y de esa manera se siguen burlando los controles actualmente. 

Moscú en 2001 fue sede de la conferencia para ejecutar el proyecto  del Sistema Internacional de Certificación de Origen de los Diamantes. Se tenía esperanza que ello pusiera fin a las guerras de Angola, Sierra Leona y el Congo. En dicha reunión delegados del Consejo Mundial del Diamante, de la industria internacional del diamante, de la Comisión Europea y representantes de 34 países tomaron como referente el Proceso Kimberley, el objetivo era terminar la explotación y comercialización de diamantes y otras piedras preciosas con que se financian las guerras en África.


CONCLUSIONES:



LOS DIAMANTES SANGRIENTOS permiten:

- El tráfico ilícito y una creciente economía negra gracias a la inmediata conversión en dinero efectivo.
- Nutre a los mercaderes de la guerra, con el dinero se compran gobiernos, se adquiere armas, se contrata mercenarios.
- Cualquier regulación o legislación internacional parece inútil para ejercer un transparente  control del comercio ilícito. 
- Poderosos intereses se imponen, desde industriales a gobiernos, nadie quiere ir un poco más allá, el negocio es tan rentable que produce ganancias sobre los 50 mil millones de dólares al año (poca cosa si se compara con el rendimiento del tráfico internacional de drogas y armas).
- Pese a la normatividad emitida desde el Proceso Kimberley y otras Conferencias y Resoluciones de la Naciones Unidas, el negocio sigue siendo redondo, el tráfico ilícito y comercialización de diamantes de sangre continúa. 
- Ejecutivos de empresas de renombre en el comercio de diamantes, como los de Amberes, comercializan hasta dos tercios de los diamantes del mundo sin dificultad, compran en África la piedra en bruto y casi sin problemas llegan a Bélgica, Gran Bretaña y, ahora, a la India.
- Pese a las regulaciones actuales, se ha insistido a gobiernos como el belga, israelí y ucraniano más controles efectivos sobre transacciones que se llevan a cabo en Amberes, Tel Aviv y Kiev.
- Para nadie es desconocido que en Amberes, un poderoso grupo de "comerciantes, joyeros, intermediarios y fabricantes de joyas que suman unos 4.000 establecimientos a través de los cuales trafican los diamantes. Este elevado número de intermediarios involucrados a lo largo de todo el proceso comercial dificulta el seguimiento de las piedras desde su extracción hasta su destino final". Todo ello a pesar que el Diamond High Council (HRD), organismo privado de la industria del diamante en Bélgica, ofrece la revisión de los trámites de importación, valoración y exportación de los diamantes. 

VIDEO:

 Finalmente, un interesante video del canal de Historia (History Channel) cuyo material audio visual ofrece una cruda realidad sobre los diamantes sangrientos del África.

AddToAny