Bienvenido a este Blog. Detectives de Guerra le brinda los mejores análisis de los conflictos internacionales de actualidad
Mostrando entradas con la etiqueta segunda guerra mundial. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta segunda guerra mundial. Mostrar todas las entradas

24 abril 2022

La industria soviética bajo ocupación alemana en la segunda guerra mundial


Caricatura de Vladimir Galba, "El Ejército soviético nunca dejó a los no deseados invitados sin atención". 1945


por Schwerpunkt 

Foro IIGM

Título original: El gran fiasco: Explotación económica alemana de la URSS.

* Todo el material gráfico y sus notas a pie de foto corresponden al editor de este blog.


El estado de la industria capturada

Veamos con unos cuantos ejemplos cual era el estado de las instalaciones industriales y mineras capturadas por los alemanes en la Unión Soviética, el intento de ponerlas nuevamente en operación y los resultados obtenidos.

Yacimientos de hierro de Krivoj Rog:

Estos eran unos yacimientos de mineral de hierro de importancia situados cerca de Nikopol, donde se encontraban los segundos yacimientos de manganeso más importantes de Europa. Antes de guerra se producían 19 millones de toneladas anuales. En la preparación económica bélica de Barbarroja el manganeso recibió una atención especial debido a su importancia, el manganeso es vital para la fabricación de aceros y aleaciones, sin él es imposible la fabricación de aceros especiales, por tanto la capacidad bélica alemana hubiera quedado anulada.

Cuando los alemanes conquistaron la zona los yacimientos de mineral de hierro de Krivoj Rog estaban devastados, la extracción del hierro no tenía sentido si no se aseguraba la producción del manganeso, los alemanes decidieron concentrarse en Nikopol. A esto se añadía la limitada disponibilidad de maquinaria, energía eléctrica, carbón y medios de transporte. 

En Nikopol (Ucrania) y Chiatura (Georgia) se encuentran los únicos yacimientos en Europa. Estos centros producían el manganeso soviético que bastaba para mantener toda la industria siderúrgica europea. Alemania sometida al bloqueo británico recibía las entregas de manganeso soviético durante la vigencia del pacto Ribbentrop-Molotov. 




Arriba: Cartel propagandístico soviético de la región de Irkutsk, de la publicación conocida como "Agitokna"; abajo: "Quien a nosotros con la espada entrará. Por la espada morirá"

Los informes alemanes señalaban la casi total destrucción de las instalaciones o la evacuación de todos los trabajadores, de todo el utillaje y maquinaria útil (1.950 motores eléctricos de 2.000), no había prácticamente energía eléctrica para trabajar, numerosas voladuras de torres, instalaciones y construcciones destruidas o quemadas. A pesar de ello la corriente eléctrica no había desaparecido del todo y la destrucción no había sido tan completa como en la zona del Donets. Ante la imposibilidad de reconstruir las instalaciones y la explotación en un plazo medio de tiempo el comando alemán encargado dirige el desmontaje de piezas útiles para ser empleadas en los yacimientos de manganeso de Nikopol.

Se transportó más de 1.3 millones de toneladas del mineral al Reich y Rumanía, a partir de julio de 1942 debido a la escasez de transportes, la producción satisfacía las necesidades alemanas lo cual permitió acumular stocks, en su mayoría stocks capturados y parte de la explotación que permitieron a la industria siderúrgica alemana continuar la producción durante gran parte o toda la guerra. Además, se replanteó la producción local de mineral de hierro en Krivoj Rog y el carbón del Donets para fabricar acero creando una industria siderúrgica completa que permitiría gracias a las cuantiosas reservas existentes encarar el futuro con optimismo, las operaciones iniciaron a principios de 1943 y el sueño terminaría en octubre de 1943 al convertirse la región en zona de combate. En febrero de 1944 los alemanes volaron las instalaciones en Nikopol y la zona cayó nuevamente en manos soviéticas con varios miles de toneladas de mineral y concentrado capturados. (Resumen de informes alemanes detallados en “Aufbau einer Kriegsindustrie im eroberten Teil der Sowjetunion”. Extractos de los informes más importantes del sector industrial. Otra consulta es Vasilii V. Strishkov & Richard Levine: The Manganese Industry in the USSR (pág. 21-22) Bureau of Mines, United States Department of the Interior 1986).


Izquierda: "Hacia el Este - Hacia el Oeste", serie "Lápiz de Lucha", 1941; Derecha: "Matar al reptil", 1942, de la revista "Kokrodil"

Yacimientos de carbón de la cuenca del Donets:

La industria de la época estaba basada en el suministro abundante y continuo de carbón. Sin carbón no se podía operar una industria siderúrgica, no se podían operar los ferrocarriles a plena capacidad y no se podía generar electricidad para multitud de procesos industriales (galvanizado, producción de aluminio, etc). Los alemanes se encontraron con una pesadilla a todos los niveles, destrucción de la infraestructura productora de carbón, destrucción de la infraestructura encargada de transportarla y destrucción de cualquier otra fuente alternativa de electricidad como las presas hidroeléctricas.

Los informes alemanes reportan destrucciones muy importantes tanto en superficie como en el interior de las minas de todo tipo de instalaciones. Destrucción casi total de los ferrocarriles que sirven a las minas e inundaciones en numerosas de ellas. Falta total de energía eléctrica lo que hace casi imposible bombear las minas inundadas. Prácticamente todos los trabajadores han sido evacuados. Se capturaron 1.3 millones de toneladas de carbón que, como señala el informe, apenas bastan para las necesidades inmediatas de las tropas, los ferrocarriles y generación de energía eléctrica.

El comando alemán determina ante la devastación el concentrarse en las pocas instalaciones menos dañadas e intentar conseguir en unos meses un 5-10% de la producción de preguerra. Se reclutan miles de trabajadores soviéticos para la limpieza y trabajos preliminares. Traer numerosas maquinaria, bombas, generadores y material minero, en general, de Polonia, Francia y el Benelux.


Cartel soviético de M.M. Shcheglov, "En la fábrica, en el taller, el ritmo debería ser así, con cada nueva tonelada de carga aplastamos el vientre de los alemanes"  


A pesar de aumentar la producción, claramente estaba por debajo de las necesidades de los ocupantes. Además de maquinaria hay que importar carbón del Reich para poder operar los ferrocarriles. Otro problema y no menor es la falta de mano de obra especializada, las deportaciones realizadas por Sauckel hacia el Reich junto a las evacuaciones realizadas en los primeros meses de la guerra hacen que falte mano de obra en general y especializada en particular. Se intenta suplir con el empleo de prisioneros de guerra, sin que se logre atender las necesidades.

Se reconstruyó la gran presa hidroeléctrica de Zaporozhe (volada en la retirada rusa). Se tuvieron que enviar desde Alemania numerosos suministros de cemento, acero, turbinas, maquinaria y material eléctrico. Finalmente en enero de 1943 se puso de nuevo en funcionamiento y proporcionó energía eléctrica de manera continua... (por poco tiempo). El plan contemplaba aumentar la explotación para conseguiría cubrir las necesidades bélicas, de los ferrocarriles y de la economía regional que poco a poco iba recuperándose y liberar el material rodante dedicado a traer carbón del Reich. Tras la gran ofensiva soviética de Stalingrado la zona se convirtió en campo de batalla y se perdieron varias minas lo que causó una gran caída de producción. Hubo una nueva contraofensiva alemana en marzo de 1943 que retomó la zona y la producción de carbón se reanudó alcanzando la mayor cifra durante la ocupación (julio 1943: 456.000 toneladas). En agosto de 1943 comenzaron las operaciones soviéticas de reconquista en la zona y el colapso de los transportes acabó con las operaciones por completo.

En general, el balance de la explotación carbonífera alemana en las zonas ocupadas fue negativo, las cifras conseguidas fueron ridículas, se necesitaron grandes cantidades de carbón del Reich para conseguir un mínimo de operatividad industrial y sobre todo para operar los ferrocarriles. (2.380.000 toneladas enviadas desde el Reich para la economía del Wi Stab Ost; 2.100.000 t. para el consumo de las tropas; 15.000.000 t. para los ferrocarriles).

Claramente era un negocio ruinoso, por cada tonelada soviética extraída se tuvieron que aportar casi tres desde el Reich con el agravante de que el precio de esa tonelada transportada hasta Rusia era elevada.


"Disputa laboral por vencer a los fascistas!", (autor no determinado). Museo del Arte del Lejano Oriente.

La explotación del petróleo soviético: el mayor de los fiascos

Hemos visto el cúmulo de distorsiones alemanas antes del gran ataque a Rusia sobre las posibilidades de explotación económica de los territorios ocupados. El del petróleo fue uno de los más notorios.

Los expertos habían avisado que sería muy dudoso conseguir petróleo del Cáucaso y que en cualquier caso no se podrían cubrir las necesidades alemanas por no decir europeas. Las cifras de petróleo soviético exportado en realidad no habían dejado de caer desde el año 1932 cuando se exportaron 6.1 millones de toneladas, el récord alcanzado para financiar el gran programa de industrialización estalinista. A partir de ahí no dejaron de caer y en 1938, el último año de preguerra tan solo se exportaron 1.4 millones de toneladas. Como sabemos durante el año y medio que estuvo en vigor el pacto germano-soviético la URSS apenas exportó 0,94 millones de toneladas a pesar de las presiones alemanas.

Las razones para estas cifras tan bajas de exportación y excedentes estriban en que la URSS cada vez consumía más petróleo debido a su crecimiento industrial e incipiente motorización mientras que su producción no aumentaba al mismo ritmo. Ya en el año 1938 quedó la producción estancada alrededor de 30 millones de toneladas y no fue posible incrementarla ante la falta de tecnología. El descubrimiento en 1929 de un importantísimo yacimiento entre el Volga y los Urales llamado el “Segundo Bakú” apenas tuvo resultados tangibles ante la falta de equipo de perforación para explotarlo. (Marshall Goldman: Oilopoly: Putin, Power and Rise of the New Russia (pág. 6 y pág. 29-31) Oneworld Publications 2008).


Cartel de propaganda soviético, "Tecnología - ¡a las masas! ¡Dominar la técnica es una misión de combate!"

Además, de las casi insuperables dificultades de transporte se añadía la falta de capacidad de refinado. Europa en 1939 solo podía refinar 17 millones de toneladas a pesar de que consumía unas 25-30 millones de toneladas. El petróleo soviético tendría no solo que alimentar a las fuerzas armadas y economía alemanas sino a la francesa, belga, holandesa, italiana, etc. para que pudieran funcionar a su capacidad teórica y aportar de manera significativa al Grosswirtschaftsraum. Otro tremendo cuello de botella productivo imposible de salvar en el corto plazo. (Peter R. Odell: An Economic Geography of Oil (Routledge Revivals)

Los mismos expertos informaban que la industria petrolífera soviética estaba obsoleta al sufrir el embargo tecnológico por parte de EE.UU. tras la guerra contra Finlandia y, en general, al no recibir tecnología y material avanzado de extracción en los últimos años. Baja productividad y era de esperar encontrarse con destrucciones y sabotajes que obligaría a despachar gran cantidad de material de perforación, extracción, oleoductos, compresores, etc.

La más importante producción petrolífera soviética de preguerra  estaba en el Cáucaso que producía el 86% (Bakú, Groznii y Maikop). Pequeños yacimientos en Galicia, Ucrania Occidental, en la antigua Polonia que rendían unas 370.000 toneladas anuales antes de la guerra. Debido a la rapidez del avance en los primeros días de Barbarroja los alemanes capturaron los yacimientos relativamente intactos, en 1942 lograron extraer 250.000 t. y en 1943 390.000 t. Otra zona menor de explotación era Estonia con la extracción de petróleo a partir de la destilación de esquistos bituminosos (Rolf-Dieter Müller: Die Deutsche Wirtschaftspolitik in den besetzten sowjetischen Gebieten 1941-1943 (pág. 249) Harald Boldt Verlag 1991).

El petróleo del Cáucaso era el que, según Hitler, daría la independencia económica al nuevo imperio alemán. Pero a pesar de los impresionantes avances alemanes, Bakú, la principal región petrolífera, se encontraba a unos buenos 1.300 km de Rostov al Don, el extremo oriental del avance alemán en 1941 y a nada menos que 3.500 km de Berlín.


"Canibal Hitler arroja a millones de personas al crisol de la masacre mundial", autor Nalivaiko Ivan Ivanovich; y, Cartel de promoción del segundo empréstito militar de la URSS "¡Que fastidie al reptil alemán mi rublo armado con proyectil!", 1943

Los esfuerzos alemanes iban a dirigirse a la conquista y explotación del petróleo caucasiano. Gran parte del petróleo extraído era refinado en otras regiones, a veces a gran distancia del origen. Las instalaciones alemanas de refinado y craqueo se encontraban a distancias aún mayores. Y una parte de este petróleo después de recorrer distancias superiores a los 3.000 km sería a su vez reexpedido para su consumo por la Wehrmacht y Luftwaffe en la propia Rusia. Claramente el flete marítimo era con diferencia el más eficiente para solventar el problema pero mientras no se dominara por completo el Mar Negro esto no era factible ante la amenaza de la marina soviética y, por si fuera poco, no se disponía de suficientes buques tanque para transportarlo. Entretanto habría que intentar funcionar con el escaso flete ferroviario disponible en las zonas ocupadas. Desde un punto de vista objetivo con la infraestructura y los recursos disponibles como el material rodante en 1941-42 las operaciones a gran escala eran absolutamente imposibles.

Dentro de los comandos del Wi Stab Ost, el dedicado al petróleo, conocido como la Technische Brigade Mineralöl (TBM) tendría una especial importancia. Sería un comando de gran tamaño y dotado de muchos medios encargado de la explotación de los pozos petrolíferos conquistados. El TBM había sido formado en 1941 pero el fracaso a finales del año en derrotar a la Unión Soviética había impedido la que tenía que ser su principal misión, la explotación del Cáucaso. Las destrucción sufrida por la industria y comunicaciones a manos de los rusos en retirada no permitían aventurar mucho optimismo. El general Thomas, al recibir informes de la destrucción de los yacimientos petrolíferos, anotaba en su diario a finales de octubre “que de Maikop no podemos esperar nada…” Y entretanto los líderes de Konti Öl, la corporación encargada de la explotación del petróleo en el Este, esbozaban grandiosos planes como un oleoducto de Maikop a Bucarest que siendo sobreoptimistas estaría terminado en dos años. Se preparaban planes para fabricar numerosos vagones tanque. En cualquier caso la reconquista a primeros de diciembre de Rostov y el parón sufrido por la ofensiva alemana en diciembre de 1941 obliga a aparcar todos estos planes. (Dietrich Eichholtz: Geschichte der deutschen Kriegswirtschaft 1939-1945 (pág. 482) volumen I. K. G. Saur Verlag GmbH 2003).


"¡Cada golpe de tu martillo golpea al enemigo!", Viktor Deni,1941


En el corto plazo las dificultades simplemente para transportar el material de extracción, maquinaria a los yacimientos capturados eran tremendas. Nominalmente las vías férreas habían sido cambiadas al ancho europeo hasta Rostov, había que efectuar múltiples transbordos para cruzar los puentes destruidos del Dnieper y el Don, su reconstrucción se demorará bastantes meses. A finales de 1942 todavía se estaban reparando los puentes deshechos del Dnieper por no hablar de los del Don y otros ríos.

Aunque el petróleo fuera el “Leitmotiv” de toda la campaña para conquistar el Cáucaso, había otros recursos de gran interés en la zona. La primera gran mina de manganeso de Europa se encontraba en Chiatura, Georgia, y superaba incluso la producción de Nikopol. Sin esa producción la producción siderúrgica soviética ya no era posible. Además, en 1940 se habían encontrado yacimientos de molibdeno y tungsteno en las cercanías del monte Elbrus. La producción agraria y de cereales del Cáucaso norte eran de importancia lo que subrayaba el carácter estratégico económico de la región. Al no contar la región con ninguna industria de mención, era claramente una región productora de materias primas.

Tan solo una zona productiva caerá en poder de los alemanes, Maykop en agosto de 1942. Groznii quedará a poca distancia del máximo avance alemán y Bakú quedará a unos buenos 600 km de la vanguardia alemana. Paradójicamente la fuerte caída sufrida por la producción petrolífera soviética tiene más que ver con los sabotajes realizados y la distorsión creada en la red logística por el ataque alemán que por la posesión física de los yacimientos. Los yacimientos de Groznii son prácticamente abandonados ante el avance alemán y en los de Bakú se sellan cientos de pozos y se evacúa parte del utillaje. La casi conquista de Stalingrado estrangula el tráfico fluvial por el Volga por el que circula nada menos que el 30-40% de todo el petróleo soviético.


 Póster "¡Más metal, más armas!". N.M. Avakumov 1941


En enero de 1942 comienza la planificación para constituir la TBM (Technische Brigade Mineralöl) encabezada por Günther Schlicht, miembro del consejo de administración de Ost-Öl GmbH, una de las sociedades creadas por Goering para la explotación de los recursos petrolíferos en la Europa ocupada. Se contaba con que los soviéticos evacuarían gran parte del material de perforación, sondeo, refino, bombas, oleoductos y lo que no pudiera ser evacuado sería destruido a gran escala en los campos petrolíferos del Cáucaso. Según la estimación del propio Schlicht se necesitarían unas 600 instalaciones de perforación que debido a la mejor productividad podrían suplir a las 836 instalaciones soviéticas. No obstante se contemplaban dificultades casi insalvables, de las cuales las principales se resumen en tres:

1) No se disponía de equipo suficiente para reemplazar a los equipos de perforación y sondeo soviéticos que presumiblemente serían destruidos o evacuados; 2) Dificultades de transporte, no se podía llevar equipos de perforación y refinado necesarios para poner en funcionamiento los yacimientos; 3) No se disponía de técnicos suficientes para las tareas de reconstrucción y perforación. (Vasilii V. Strishkov & Richard Levine: The Manganese Industry in the USSR (pág. 21-22) Bureau of Mines, United States Department of the Interior 1986).

La industria alemana en 1942 solo podía proporcionar 75 instalaciones de perforación de las 600 necesarias, algunas más podía conseguirse mediante el desmantelamiento de instalaciones en países ocupados. Se hubiese necesitado años para conseguir esa cantidad y unos 4 años para producir las 1.000 instalaciones juzgadas necesarias para explotar en condiciones los yacimientos del Cáucaso, por ello, debían concentrarse hasta finales de 1942 en los yacimientos de Maikop, a mediados de 1943 podría comenzarse con los de Groznii y posteriormente los de Bakú (la mayor de las tres).

 

Arriba: "¡Acero fundido por las gargantas de los fascistas!", Mikhail Matveevich Baliasnyi, 1941; y, "El voto de los trabajadores metalúrgicos", TASS No. 485, 1942. "Damos nuestra promesa al pueblo y al ejército: ¡Vamos a verter metal en las gargantas de los fascistas!", Pavel Petrovich Sokolov-Skalia. Abajo: "Ural - Al frente!"; y, cartel soviético dedicado al papel de la metalurgia en la victoria sobre la Alemania nazi y sus aliados en la Gran Guerra Patriótica "Los metalúrgicos de Kuznetsk contribuyeron a la Gran Victoria".


En el otoño de 1941 los soviéticos habían efectuado trabajos de sabotaje y destrucción ante la posibilidad de un avance alemán, y en el verano al penetrar los alemanes en la región, se pone en marcha un plan sistemático de destrucción. Prácticamente todos los 755 pozos de la zona, los 13 compresores y el oleoducto fueron destruidos así como los tanques de almacenamiento de los que los alemanes solo recobraron una ínfima fracción. De los cientos de torres petrolíferas destruidas lograron reconstruirse tres o cuatro a partir de restos. La falta de energía complicó extraordinariamente las operaciones para extraer el crudo. Cuando llegaron algunos compresores se logró comenzar a bombear petróleo si bien a una fracción microscópica de la cantidad normal. (David R. Higgins: Behind Soviet Lines: Hitler´s Brandenburgers capture the Maikop oilfields 1942 (pág. 64). Osprey Publishing 2014).

Una reunión tuvo lugar en Berchtesgaden, el 21 de noviembre de 1942, entre Goering y los técnicos de la TBM para examinar la falta de resultados conseguidos por la TBM. Los técnicos de ésta se defendieron vehementemente de los reproches de Goering, que como de costumbre no entendía la complejidad técnica de la explotación ni las repercusiones de los daños sufridos en la zona y las dificultades logísticas. Como anécdota sobre la ignorancia técnica de Goering al ser informado que los rusos han bloqueado los pozos inyectando hormigón y otros obstáculos, preguntó si no se podrían extraer con unos grandes sacacorchos…

Los técnicos aseguraban que a finales de 1943 se podría conseguir resultados apreciables gracias, en parte, "al desmantelamiento sin ningún miramiento de las refinerías francesas" que estaba en marcha y "que permitiría hacia mediados el refino de unas 65.000 toneladas mensuales", en la refinería en construcción de Jerson, en Ucrania, siempre y cuando la situación catastrófica de los transportes mejorara, lo que no estaba claro. Incluso si se hubiera reparado los yacimientos menos dañados, es dudoso que los alemanes hubieran podido transportar el crudo extraído al Reich o Rumanía para refinarlo, por una simple cuestión logística. Para transportar varios millones de toneladas se hubieran necesitado decenas de miles de trenes.


Izq. Póster "Trabajar en el frente como en la retaguardia. Cada tonelada de pan, petróleo, carbón, acero es un golpe para el enemigo" (Lápiz de Lucha); medio: "Cada kilogramo suministrado golpea al enemigo"; Derecha: Afiche “Entreguemos el hierro, el cobre, el plomo. ¡Aceleremos el fin de Hitler!", Lyubimov A.A. 1941


Los alemanes disponían de la mísera cantidad de unas 300 locomotoras, que a duras penas abastecían a las fuerzas alemanas situadas en el frente. En el mejor de los casos (y con suerte) no hubiera podido transportarse más de 10.000 toneladas mensuales, además, los puentes sobre el Don estaban todavía destruidos y había que transbordar los trenes en los ríos. En el propio Reich se fantaseó con la construcción de un gigantesco ferrocarril de vía muy ancha para aumentar la cantidad que los convoyes podían transportar. Estos proyectos no pasan de la ciencia ficción en momentos en los que los ferrocarriles normales no podían siquiera abastecer a un pequeño grupo de ejércitos situado en el Cáucaso. De hecho una de las razones del retraso en la ofensiva de verano alemana había sido la imposibilidad de los ferrocarriles para acumular el combustible, munición y suministros necesarios para el gran ataque a tiempo.

La aventura alemana termina en enero de 1943 cuando la ofensiva soviética fuerza a un precipitado repliegue y a la voladura y destrucción de todo el material por falta de medios de transporte. Tras un tremendo esfuerzo, los alemanes han logrado extraer unas 1.000 toneladas, una cantidad absolutamente ridícula. (Dietrich Eichholtz: Krieg um Öl: Ein Erdölimperium als deutsches Kriegsziel (1938-1943) Leipziger Universitätsverlag GmbH 2006).


Arriba: Las dos primeras es una variante del artista Nikolai Andreevich Dolgorukov "¡El enemigo no se salvará!", 1941; y, "El fascismo será aplastado", de I.A. Volkov, 1941. Abajo: Izq. artista desconocido. "Esto es para Hitler" (boceto para el cartel de Windows TASS No. 2), 1941; medio: Dolgorukov N. A. Póster "¡Barramos a los bárbaros fascistas de la faz de la tierra", 1941; y, derecha: "El escucha melodías amenazantes". Dolgorukov, 1945.


El programa “Iwan” de 1942-43: Municiones y aluminio

El programa “Iwan”, inició en mayo de 1942, era un plan a cuatro años para utilizar la industria pesada de Ucrania Oriental en la fabricación de munición de artillería. El plan inicialmente contemplaba la producción de 2.6 millones de proyectiles. El plan sufrirá múltiples vaivenes y revisiones a la baja debido a problemas de toda índole como falta de maquinaria, personal, carbón y quizás el mayor de todos la falta de suministro de energía eléctrica. En el invierno de 1943 la ofensiva soviética en la zona de Kharkov causó problemas al invadir zonas donde se estaba implementando el programa. (Rolf-Dieter Müller: Die Deutsche Wirtschaftspolitik in den besetzten sowjetischen Gebieten 1941-1943 (pág. 243) Harald Boldt Verlag 1991).

La reconstrucción y entrada en operación de la presa de Zaporozhe permitió contar con un suministro continuo de energía por fin en enero de 1943.  La producción de electricidad tenía otra razón de peso, en las cercanías de Zaporozhe se encontraba una gran factoría de aluminio soviética que los alemanes querían poner en operación. Para ello se necesitaba maquinaria y por supuesto abundante energía eléctrica (La gran presa hidroeléctrica de Zaporozhe detuvo el suministro continuo de energía a principios de septiembre 1943 por el avance soviético que interrumpe las operaciones). La gestión del combinado de producción de aluminio estaría en manos de la Vereignigte Aluminium-Werke AG (VAW) que en 1941 fabricaba el 15% de todo el aluminio mundial. Con la victoria alemana sobre Francia en junio de 1940 había adquirido otras instalaciones. No parece que hubiera demasiado interés en las instalaciones soviéticas que, además, estaban muy destrozadas pero una combinación de presión política así como la expectativa de ganancias y nuevo patrimonio empresarial “ayudaron” a que la VAW se pusiera manos a la obra. En mayo de 1942 se fija un objetivo de producción de 20.000 toneladas anuales, cantidad considerable, más o menos el 7% de la producción alemana pero un 38% de la producción soviética en 1942. En septiembre de 1943 los soviéticos penetran en la zona provocando la evacuación de la región y el desmantelamiento del programa. (Peter Josef Belli: Das Lautawerk der Vereinigte Aluminium-Werke AG (VAW) von 1917 bis 1948: ein (pág. 289-306) Lit Verlag 2012).


Tarjeta postal. "Regalos de año nuevo que Papá Noel entrega al enemigo, los hará sentir calientes en el frío y fríos en el calor" 1941-1942

A finales del verano de 1943 las instalaciones están casi listas para comenzar la producción de munición de artillería con cifras inferiores a las planeadas que hubiesen permitido a las fuerzas alemanas disponer de un suministro considerable de munición de artillería a escasa distancia del frente. La ironía es que en agosto los soviéticos rompen el frente y en septiembre se ordena paralizar todo el programa, la evacuación de todas las instalaciones posibles y la voladura de todo lo que no pudiera ser evacuado. (Kim Christian Priemel: Flick. (pág. 465-467) Wallstein Verlag 2013).

Paul Pleiger (Director de Berg-und Hüttenwerksgesellschaft Ost, una de las sociedades siderúrgicas de los Hermann Göring Werke en el este y Comisionado del Reich para la Producción del Carbón) había anunciado el casi nulo interés de la industria pesada alemana en las inversiones en el Este. La industria alemana estaba mucho más interesada en sus adquisiciones en Checoslovaquia, Francia y el Benelux, así como atender los compromisos de pedidos bélicos que en una intervención en Rusia. Pleiger subrayó “el deber nacional como padrinos de gestionar las empresas ucranianas y hacerlas útiles para la industria bélica alemana”. Pleiger junto al dubitativo Alfred Krupp visitó “fábricas escogidas” (aparentemente asignadas a las empresas de Krupp en Mariupol). No había derechos de propiedad, responsabilidad en la reconstrucción técnica cuyos gastos se facturarán al estado, el compromiso suponía una especial consideración en el futuro reparto de industrias cuando llegue la paz.


"Barreremos a los bárbaros fascistas", N. Dolgorukov. 1941

En la explotación de minerales, los alemanes ocupan las minas de molibdeno y volframio de Nizhni Baksan. Se trata de uno de los poquísimos yacimientos de estos metales en Europa y lógicamente de gran importancia estratégica. Los rusos volaron las instalaciones, galerías y el comando alemán dedicará varios meses a limpiar las minas de escombros pero sin poder extraer mineral. La contraofensiva soviética de enero de 1943 pone fin a la aventura. (George A. Ravchevsky: The Tungsten Industry in the USSR (pág. 4) Bureau of Mines, United States Department of Interior 1988).

El Mayor General Nagel, comandante del Wirtschafsstab Ost desde finales de 1943, tras la guerra declaró: “Lo que fue destruido por las tropas alemanas en retirada no ha llegado ni con mucho al grado de destrucción conseguida por los rusos en su retirada".


Cartel "Destruyamos el estado de Hitler e inspirémonos"

Respecto a la industria ligera y de bienes de consumo inicialmente no hubo interés alguno por los alemanes, fuera del saqueo de existencias. A medida que se prolongó la guerra decidieron utilizar la capacidad productiva existente. Como era el caso, esta había quedado afectada por la evacuación y sabotaje soviético, así como por las requisas alemanas. Las necesidades del primer invierno bélico se tradujeron en necesidad de calzado, ropa de abrigo y suministros para las tropas alemanas. Se realizó una reconversión acelerada de los talleres e industrias, por ejemplo, los talleres de calzado para proveer a toda prisa a las tropas alemanas, aunque no para los civiles soviéticos. (Hein A.M. Klemann, Sergei Kudryashov: Occupied Economies: An Economic History of Nazi-Occupied Europe, 1939-1945 (pág. 335-347) Berg Pub. 2012)


"Novedades en equipamiento militar". Cartel-periódico de Bandera Bolchevique, eEdición No. 21, autor P.P. Bunakov, 1941


La industria en los estados bálticos (Lituania, Letonia y Estonia)

En Letonia, la banca y la industria habían sido propiedad de comerciantes alemanes y además de explotaciones ganaderas que en los años veinte y treinta exportaban productos lácteos y madera. Contaba con una industria ligera de interés y una gran fábrica de vagones de ferrocarril en Riga. Esta fábrica suscitó el interés de los industriales alemanes que con el apoyo de Speer decidieron transformarla en una fábrica de camiones. Opel AG que tenía problemas en su fábrica de Brandenburg por falta de materias primas y personal decidió ampliar su producción en dicha fábrica, con el apoyo de las autoridades pasaría a su propiedad sin coste. (Paul Erker & Toni Pierenkemper y otros: Deutsche Unternehmer zwischen Kriegswirtschaft und Wiederaufbau: Studien zur zur Erfahrungsbildung von Industrie-Eliten (pág. 29) Oldenbourg Wissenchaftsverlag 1999).

Aunque estos planes no dieron fruto alguno, indica a las claras la disposición de los industriales alemanes a hacerse con instalaciones y oportunidades de negocio en los nuevos territorios


Cartel de M.A. Gordon "¡Destruyamos el odiado 'nuevo orden en Europa' y castiguemos a sus constructores!", 1943

La fábrica de vagones en Riga, Vairogs, que antes de la guerra había sido una empresa alemana –Tochtergesellschaft Phoenix, había vendido las instalaciones al estado de Letonia, recibió numerosos encargos,  la confusa gestión alemana del negocio así como la excesiva diversificación en la producción hizo que apenas llegara a la mitad de los pedidos. (Kim Christian Priemel: Flick. Eine Konzerngeschichte vom Kaiserreich bis zur Bundesrepublik (pág. 455-458) Wallstein Verlag 2013).

Los alemanes habían prometido reprivatizar las empresas confiscadas por los soviéticos, el proceso fue tan lento que en junio de 1942 tan solo 700 pequeñas empresas habían sido devueltas a sus dueños. Claramente los alemanes querían mantener las porciones principales de la tarta en sus manos. Como de costumbre Goering con su Wirtschaftsführungsstab Ost (WiF Stab Ost) controlaría la industria y la agricultura entrando en conflicto con la Wehrmacht que lo que quería era confiscar alimentos y recursos para el Ostheer. Para hacer las cosas más complicadas, Alfred Rosenberg, administrador civil de los Territorios Ocupados deseaba un cierto desarrollo de las sociedades bálticas chocando con los deseos de mera explotación económica de las otras agencias. (Valdis O. Lumans: Latvia in World War II. (pág. 187-193) Fordham University Press 2006).


Cartel "Los kilogramos de Voroshilov", Viktor Nikolaevich Denisov (Deni)

Dentro de la industria ligera había algunas empresas de cierto interés como la fábrica de bombillas eléctricas Osram en Riga, varias fábricas de bicicletas y algunas empresas de material eléctrico. (Rolf-Dieter Müller: Die Deutsche Wirtschaftspolitik in den besetzten sowjetischen Gebieten 1941-1943 (pág. 245-246) Harald Boldt Verlag 1991).

Letonia tenía activos industriales interesantes, pero la agricultura y ganadería fue el área de interés para los alemanes, así como la explotación maderera. Estonia era el único estado báltico dotado de recursos minerales de cierto interés. Los esquistos bituminosos cuya explotación databa de años recientes y cuya destilación producía hidrocarburos fueron explotados durante toda la ocupación alemana. El fuel oil destilado fue muy útil para la Kriegsmarine. Había algunos yacimientos bastante pobres de fosfatos que ante la carencia casi total en el Grossraum fueron explotados. La casi ausencia de industria forzaba una vez más a centrarse en la agricultura.


Boris Efimov y N.A. Dolgorukov, póster "Anular la superioridad de los tanques alemanes", 1941.

La extracción de hidrocarburos de los esquistos sufrió extensos daños a manos de los soviéticos en retirada. Los alemanes se limitaron a incorporar la industria nacionalizada por los soviéticos a una empresa del grupo Kontinentale Öl que controlaba todos los intereses petrolíferos alemanes en los territorios ocupados (Baltisches Öl GmbH) y ponerlas en operación. (Rurik Holmberg: Survival of the Unfit: Path Dependence and the Estonian Oil Shale Industry (pág. 128-131) Linköping University 2008).

Los planes para conseguir en 1945 una producción mayor de petróleo fueron abortados ante el avance soviético. Durante la guerra hasta la reconquista soviética, octubre de 1944, miles de trabajadores incluidos alemanes, un gran número de prisioneros de guerra rusos y judíos lograron que todas las instalaciones produjeran 3.307.000 toneladas de esquisto que rindieron 241.000 toneladas de hidrocarburos tipo fuel oil naval de gran calidad y que serían consumidos en gran medida por la Kriegsmarine. (Rolf-Dieter Müller: Die Deutsche Wirtschaftspolitik in den besetzten sowjetischen Gebieten 1941-1943 (pág. 224-226) Harald Boldt Verlag 1991).


Cartel de T.I. KSENOFONTOV ¡CAMARADA! AL RECONSTRUIR TU FÁBRICA, TU EMPRESA, AYUDAS AL EJÉRCITO ROJO A APLASTAR AL ENEMIGO, ¡ACERCAS LA VICTORIA.


Próxima entrega: La explotación laboral alemana en los territorios ocupados de la URSS.

-----

*Este artículo es continuación de: Administración nazi en los territorios ocupados del Este

Fuente para el presente artículo: 

Foro IIGM 

15 abril 2022

Razones por las que no se debe "añorar" a Benito Mussolini




Tito Andino

Compendio de diversas fuentes. 

 

La historia no contada


Una visión desde otra óptica del fascismo italiano que no concuerda con el aún popular mito de la "benevolencia" del Duce Mussolini. Italia con su moderna historiografía va desvelando una mentira extendida a nivel mundial, otra más!, como aquella que sigue vigente y que dice que Benito acabó con la mafia, la realidad es que él no terminó con los capi mafiosi, él fue parte de un entramado mafioso denominado fascismo y publicitó con éxito su inexistente "triunfo" sobre los Signori della Onorata SocietáBien, ese tema ya lo abordamos en otra ponencia (Mussolini y el mito del triunfo contra la mafia).


Tres cuartos de siglo después de su muerte, en Italia y otras regiones del orbe, hay muchos que siguen convencidos que el líder del fascismo fue "un dictador bueno, que amaba a su pueblo".

Este tema -imperiosamente- va a ser algo extendido (tomará una entrada adicional), iniciaremos con el desmontaje del mito de su "Vuecencia", del "Signor Capitano", el "gran" dictador que "quería" a su pueblo sobre todas las cosas. ¿Cómo podemos interpretar esa tergiversación de la historia?, valiéndonos de los estudios de historiadores italianos, ¿quiénes mejor para descifrar esa negra etapa del Reino de Italia? Fueron dos décadas de intensa y enajenada propaganda que sigue pasando factura en muchos italianos del presente. De allí la necesidad de comprender.



En 1935 a un grupo de profesores de Derecho de la Universidad de Giessen (Alemania) se les ocurrió proponer como candidato al Premio Nobel de la Paz a Benito Mussolini. Bueno, proponer no es lo mismo que nominar, así que el Comité encargado de seleccionar a los candidatos simplemente respondió: NO. 

El escritor italiano Antonio Scurati ganó con "M. El Hijo del siglo" (novela histórica) el prestigioso premio literario "Strega 2019". Cuestiona que se siga considerando a Mussolini como "El" hijo del siglo XX, no fue más que "un producto de esa época". En sus páginas resalta "la mezcla de oportunismo, inteligencia, cinismo, energía -sexual y política- y falta de escrúpulos que caracterizó al Duce". Es uno de los preferidos porque "a través de él, el siglo pasado mostró de manera poderosa su vocación, que acabará en una gran tragedia política". No es casualidad que el fascismo sea de las últimas invenciones políticas que perduran en el mundo con otra etiqueta


Scurati señala que si Mussolini es el "hijo del siglo XX", su madre metafórica es la violencia y la guerra su expresión más extrema. "Yo defino la forma de violencia del fascismo como hiperviolencia, que tiene sus raíces en las trincheras de la Primera Guerra Mundial".

  

El ex periodista Mussolini contó con dos armas para lograr sus objetivos. El "Popolo d'Italia" (el diario que dirigía como propaganda) y los profesionales de la violencia, las bandas fascistas (Camisas Negras, nombre oficial "La Milicia Voluntaria para la Seguridad Nacional") cuya experiencia fue adquirida en la Gran Guerra. El fascismo es el primer movimiento político que se vale de una milicia paramilitar y que asume el poder.



"Parade of Mighty Warriors" (1942). Desfile de poderosos guerreros. Segmento de la obra de Arthur Szky, están representados como aliados de la muerte (Goering, Mussolini, Franco)


En ese tiempo, el miedo a la "revolución mundial" soviética, provoca temor hasta en el pequeño empresario y en el simple funcionario, "pequeños burgueses que no son violentos" que creen que una revolución socialista les privará de sus posesiones. De allí surge la violencia fascista como "posible solución a sus problemas" bajo el mando del primer ministro Mussolini, el "César" moderno (por sus ambiciones imperiales), que es nombrado por el rey Víctor Manuel III para prevenir una posible revolución comunista

¿Y por qué atrae eso en la actualidad? El populismo, Mussolini es el prototipo del líder populista del último siglo, hasta hoy. Scurati diferencia entre el fascismo y los partidos populistas del presente. Los fascistas utilizaron la violencia sistemática en política. Hoy, los partidos populistas, en general, no son violentos, su violencia es verbal y se acoplan al sistema democrático. Sin embargo, persiste el arquetipo del líder populista que consigue "guiar" a las masas que, al igual que el caudillo político, sienten: rabia, miedo, rencor, resentimientos. Refiriéndose a sus compatriotas, afirma Scurati: "somos los últimos en haber sido educados intelectualmente y educados cívicamente en los ideales del antifascismo y del mito de la resistencia contra el nazi-fascismo". ("Mussolini es el arquetipo de líderes populistas como Bolsonaro, Trump y Salvini": entrevista al escritor italiano Antonio Scurati. BBC, septiembre 2020)

Recordemos que desde 1922 Mussolini perpetró actos reñidos con la ley, un golpe de estado encubierto le garantizó que el rey Víctor Manuel III le concediera el manejo del gobierno italiano. Luego el "Duce" tomó como pasatiempo ordenar el asesinato de todo atrevido político rival que osara denunciar la violencia electoral de los esbirros fascistas. También su poder le garantizó promulgar las "leyes fascistísimas", decretos ley que volvieron a instaurar la pena de muerte y coartar la libertad de expresión. 


Caricatura sobre MUSSOLINI y la guerra de Etiopía. Ilustración de SAIDA para una postal española de aquella época.

Entre otras cosas, en 1932 Mussolini expresó que "sólo la guerra eleva a su máxima tensión todas las energías humanas, y pone el sello de nobleza sobre los pueblos que tienen el coraje de enfrentarla". Pues nada, el "Duce" uso armas químicas contra los abisinios. Culminó una alianza no militar con la Alemania nazi en octubre de 1936, el Eje Roma-Berlín. Una alianza total con Alemania se concretó tras la firma del Pacto de Acero en 1939 y la Alianza del Eje se establece con la firma del Pacto Tripartito entre Alemania, Italia y Japón en 1940.

Otro historiador italiano, Francesco Filippi, titula irónicamente su libro "Mussolini ha fatto anche cose buone. Le idiozie che continuano a circolare sul fascismo ("Mussolini hizo también cosas buenas. Las tonterías que siguen circulando sobre el fascismo"; editorial Bollati Boringhieri 2019), Filippi explica cómo se genera las "fake news del fascismo" y por qué se mantienen casi intactas en la actualidad en redes sociales y discursos públicos. "La gran mentira sobre Mussolini es que fue un dictador bueno que quería a su pueblo, como si hubiese sido un padre para toda la nación, fue él quien mató a más italianos en la historia del país", aclara Filippi.


"Si 75 años después de la muerte de Mussolini todavía hace falta un manual como este para arrojar luz sobre el régimen más sanguinario de la historia de Italia, quiere decir que todavía tenemos problemas con la memoria pública sobre el fascismo". 

 

Foto colorizada de la ficha policial del joven Benito Mussolini detenido en Berna - Suiza, el 19 de junio de 1903 a donde había huido para eludir el servicio militar obligatorio en Italia (1902). En julio de 1902 ya había sido arrestado por primera vez (por vagancia). En ese tiempo ya mostraba sus cualidades de agitador, fue detenido al sospecharse que incitaba a los trabajadores italianos a la huelga y al disturbio. El Ministerio Público de la Confederación informó a las policías cantonales que era conveniente no perder de vista a este "anarquista". Se ordenó su deportación, pero la orden de expulsión era válida sólo en el cantón de Berna, Mussolini retornó pronto a Suiza y se queda en Bellinzona (Tesino).


En una entrevista para BBC, "Benito Mussolini, a 75 años de su muerte", (abril 2020) el historiador Francesco Filippi desmitifica al Duce, a más de haber, con sus decisiones, causado la muerte de millares de italianos, "provocó una guerra en la que murieron centenares de miles de personas, que causó daños irreparables al patrimonio cultural, social y económico de este país".

- ¿Cómo la figura del hombre fuerte, del padre autoritario, atrae a las sociedades cuando atraviesan períodos de crisis?. "Hay períodos en los que las personas necesitan respuestas sencillas a problemas complejos. Es lo que yo llamo "infantilismo social": así como los niños, delante de determinados problemas, no quieren entender de soluciones difíciles, algunas sociedades, en determinados momentos, esperan que un adulto les resuelva los problemas con una varita mágica. En el momento en que personajes históricos como Mussolini consiguen encarnar ese papel de solucionador de problemas, a la gente ya no le importa si eso es verdad o no, porque se siente tranquilizada".

- ¿Por qué son tan fuertes algunos mensajes de Mussolini como para ser considerados actuales? "Si hay algo que el fascismo hizo muy bien fue hablar de sí mismo. La propaganda fascista fue muy eficaz porque era primitiva, sencilla y directa. La retórica del "Duce" fue una revolución mundial, y por eso sus mensajes y su lenguaje siguen circulando con fuerza hasta hoy". Mussolini fue pionero en entender la importancia de los medios de comunicación y del contacto directo con las masas, por ello Hitler le declaró su admiración. 

- ¿Qué representa hoy en día la imagen del "Duce" colgado de los pies delante de la población italiana enfurecida que se ensañaba con su cuerpo? "Fue el último acto de la parábola retórica del fascismo, de la relación corpórea entre el dictador y la muchedumbre. Esa misma muchedumbre que lo había apoyado se siente ahora traicionada y humillada pero también huérfana, y se rebela contra ese padre y se ensaña con su cuerpo. Fue el fascismo que se devoraba a sí mismo".


El cómo ayudó Mussolini a los nazis para destruir Austria (Anschluss) *

 

Una portada de la revista mexicana "Hoy" del tiempo de la segunda guerra mundial 

Tras la Gran Guerra la dinastía de los Habsburgo fue depuesta y exiliada, su imperio, Austria-Hungría, en la ruina. Poca gente es consciente que los Habsburgo, a través del Archiduque Otto, estuvieron a punto de ser restaurados en el trono austríaco justo antes de desatarse la segunda guerra mundial. Había un pacto, solamente el cuándo, era el kit del asunto. 

¿Qué lo impidió? La causa vino del último rincón del mundo, un hecho aparentemente inesperado: Etiopía

No nos precipitemos, todo tiene un antecedente. Culminada la Gran Guerra, Austria es reducido a un pequeño estado aislado en Europa. No debería sorprender el por qué muchos austriacos pidieron una unión con Alemania, los aliados se negaron, por temor a fortalecer a los alemanes. Al igual que en muchos lugares de Europa, Austria tuvo conflictos civiles y agitación. El orden fue restablecido por Engelbert Dollfuss, líder del Frente de la Patria, un partido fascistoide (pro-italiano), el "austrofascismo". En 1932 Dollfuss estaba en tratos con los monárquicos.

El pequeño Dollfus mantenía armonía y amistad con Benito Mussolini. Era el tiempo en que éstos dos personajes no sentían simpatía por los nazis. ¿Contradictorio? No. Desde que los Camisas Negras marcharon sobre Roma, el "héroe" de Hitler era Mussolini, pero el italiano no devolvía iguales sentimientos. "A Mussolini inicialmente no le gustaba Hitler e incluso después de que Hitler llegó al poder y los dos se encontraron cara a cara, Mussolini encontró algo desagradable sobre él". 

Los nazis deseaban Austria más que a nada, Italia era el único obstáculo importante y apoyaba la independencia de Austria como un estado amortiguador entre Italia y Alemania. En 1934, Dollfuss fue asesinado por nazis en un intento de golpe de estado. Mussolini enfureció y llevó a las tropas italianas a la frontera, obligó a Hitler a retroceder y denunció a los nazis austriacos que habían cometido el crimen. Los alemanes todavía eran débiles militarmente. ¿Y qué pasó? Nadie en Europa secundó a Mussolini en esa crisis europea, Gran Bretaña y Francia guardaron silencio, el dictador italiano actuó solo. 

Kurt von Schuschnigg sucedió a Dollfuss como canciller y su objetivo era preservar una Austria independiente y fuera del alcance de Hitler. Restaurar la monarquía era un plan factible que podía llegar a buen término. Habría quien se oponga en Europa, pero "en última instancia solo importaban dos hombres: El mismo archiduque Otto y el garante de la independencia austriaca Benito Mussolini".

Las leyes que prohibían a los Habsburgo fueron derogadas y se les restituyó sus propiedades. Los monárquicos estaban de júbilo, los nazis se indignaron y Schuschnigg consultó a Mussolini. ¿Apoyaría Italia o se opondría a la restauración de la monarquía de los Habsburgo en Austria

"En ese momento, Mussolini había estado cerca de pelearse con los Aliados, pero todavía no sentía amor por Hitler ni quería ver a los alemanes en su frontera anexándose Austria. Sorprendentemente, dados sus antecedentes, Mussolini informó a Schuschnigg que no se opondría a la restauración de la monarquía. Incluso dio un paso más y sugirió que los lazos italo-austríacos podrían ser cimentados por un matrimonio de los Habsburgo con un miembro de la Casa Italiana de Saboya (algo para lo cual había muchos precedentes históricos). Schuschnigg organizó una reunión secreta con el archiduque Otto para informarle que el camino había sido despejado para la restauración de la monarquía. Se acordó todo y Schuschnigg declaró que todo debería estar listo para que la restauración se lleve a cabo el año siguiente".

Una restauración no es una cosa rápida, las negociaciones entre Schuschnigg y el Archiduque Otto prosiguieron en 1935. Y llegó lo inesperado.... Soldados etíopes habían atacado un puesto de avanzada italiano en la disputada frontera entre Etiopía y Eritrea. Gran oportunidad para que Mussolini invada Etiopía. La opinión pública mundial criticó a Italia, Gran Bretaña y Francia la denunciaron en la Liga de las Naciones. Vinieron las sanciones a Italia, nada disuadió al Duce de su guerra. Y aquí que aparece Hitler a nombre de Alemania, no se une a las sanciones contra Italia y le extiende una mano amistosa. Abisinia (Etiopía) fue conquistada por las tropas italianas en siete meses y "Mussolini se volvió contra los Aliados de manera firme e irremediable".

Los Aliados habían ofendido, tocado el ego del Duce, éste no les perdonó y prefirió echarse en brazos del caudillo alemán. "A partir de ese momento, Austria ya no podía contar con la protección italiana contra una intervención nazi y Hitler inmediatamente comenzó a planear la anexión de Austria y hacerlo antes que el Archiduque Otto pudiera ser instaurado en el trono. Apropiadamente, el plan nazi para la invasión de Austria recibió el nombre en clave de Operación Otto. (*The House of Hapsburg in World War II)

La restauración monárquica no sucedió. Schuschnigg convocó a un referéndum sobre la independencia de Austria y Hitler decidió actuar antes que pudiera llevarse a cabo. El único que pudo haberlo detenido era Mussolini y éste no se interpuso en el camino de su nuevo amigo. Cuando la noticia llegó a Hitler, el dictador nazi estaba extasiado, Hitler renunció para siempre a cualquier reclamo del Tirol del Sur (un área poblada alemana cedida a Italia después de la primera guerra mundial). El príncipe Felipe de Hesse telefoneó a Hitler desde Roma, le comunicó que Mussolini mantendría sus tropas en casa. Hitler gritó emocionado al teléfono: 


"Por favor, dile a Mussolini que nunca olvidaré esto ... ¡Nunca, nunca, nunca! ¡Vamos lo que sea! ... Y escucha, firma cualquier acuerdo que quiera ... Puedes decirle otra vez. Le agradezco de todo corazón. ¡Nunca lo olvidaré! ... Siempre que deba estar en necesidad o en peligro, puede estar seguro de que me quedaré con él, llueva o truene...". Hitler cumpliría su palabra, al menos en lo que respecta a Mussolini, no lo abandonó a pesar del lastre de aliado que consiguió.


El 12 de marzo de 1938, las tropas del ejército alemán ingresaron a Austria, el Anschluss. Los Aliados siguieron en silencio hasta que estalló la segunda guerra mundial en Europa


¿Por qué fracasó ruidosamente Mussolini en la IIGM? 

 


Una caricatura inédita sobre Mussolini de los Kukryniksy, pertenece a una colección privada de la familia Mamontov de Moscú y exhibida en su Galería de Arte del mismo nombre en 2015, la obra data de 1943.

"En sus más de dos décadas en el poder, uno de los errores fatales de Mussolini fue la incapacidad de reconocer que la composición psicológica italiana carecía de las virtudes militares necesarias para luchar en grandes conflictos, a diferencia de los alemanes que habían emprendido numerosas y significativas batallas en las generaciones pasadas".


En el mundo de ensoñación guerrera en que vivía, el "Duce" del siglo XX se veía como un antiguo caudillo militar romano y declaró la guerra, "pero Mussolini pensó que podía contar con las legiones romanas. Había olvidado que, al final, las legiones romanas estaban formadas por bárbaros, y que la Roma de la antigüedad, de la época de Julio César, ya no existía. Los italianos eran un pueblo pacífico, con otra cultura, otra mentalidad; ya no tenían esas tradiciones militaristas que siempre tuvieron los romanos, mientras que los alemanes las habían mantenido, por lo que Italia entró en la guerra y ya sabes lo que sucedió: derrota tras derrota". Esta cita ni más, ni menos, pertenece a un cubano llamado Fidel Castro.



A la izquierda, póster de propaganda de la marina de guerra italiana de 1941 emulando a las temibles Legiones Romanas. A la derecha, una portada del semanario "La Domenica del Corriere", el semanario más popular en Italia durante la primera mitad del siglo XX. Mussolini el fundador del Imperio (junto a su silueta como legionario de la antigua Roma) 

Shane Quinn explica magistralmente este episodio histórico. Las siguientes líneas resumen su análisis.

Librar guerras puede requerir una devoción ciega y sangrienta y el soldado italiano común traicionó una naturaleza más insubordinada e indisciplinada que su equivalente alemán. Cuando la lucha se volvió agria, los hombres de Mussolini a menudo se fundieron en el paisaje, requiriendo un apoyo nazi crucial en Grecia y África durante la década de 1940.

La ambición impulsora de Mussolini era engalanarse en el mundo como un nuevo Julio César, el dictador y general romano que, casi 2.000 años antes, se convirtió en el primer líder de Roma en cruzar tanto el Canal de la Mancha como el Rin.

A mediados de 1933, y ahora más de una década en el poder, Mussolini planeó lanzar ataques contra Yugoslavia primero, y luego contra Francia nada menos. Cualquier empresa de este tipo probablemente habría estado condenada al fracaso. Italia se vio aún más obstaculizada por ser un país pobre en recursos, que carecía de las materias primas esenciales para llevar a cabo guerras duraderas. Mussolini solo canceló las invasiones después de enterarse de que la inteligencia francesa había descifrado algunos de sus códigos militares.

Tras la insípida actuación de las tropas italianas durante su invasión de Etiopía en 1935, habría sido prudente reconocer la realidad de su situación. Dentro del ejército etíope de escasos recursos, algunos soldados estaban equipados simplemente con espadas y lanzas, otros con equipo militar del siglo XIX. Sin embargo, los etíopes obtuvieron éxitos contra su enemigo italiano, como durante la Ofensiva de Navidad de diciembre de 1935.

Mussolini podía haberse opuesto firmemente a unirse a la guerra del lado de Hitler en junio de 1940, ofreciendo un mero apoyo tácito como cuatro meses después, en octubre de 1940, su homólogo fascista, el general Franco, resistió las propuestas de Hitler de aliarse con España detrás del esfuerzo de guerra nazi. Fue una decisión que aseguró en gran medida que Franco permanecería en el poder durante tres décadas después de la guerra. Sin embargo, Mussolini no poseía la astucia de Franco.


Dos elocuentes caricaturas sobre Mussolini. Arriba: Hitler obliga a un Mussolini poco dispuesto a que colabore militarmente en 1940 (arte soviético). Abajo: "Il Duce..." (1942). Ilustración de Arthur Szyk para Esquire The Magazine for Men, junio de 1942.

En 1945, con la lucha en Europa llegando a su fin, era en muchos sentidos apropiado que Mussolini fuera capturado vistiendo un uniforme alemán. Durante los cuatro años anteriores, Hitler y sus hombres habían acudido al rescate de los italianos en repetidas ocasiones. Recuerden, el Führer no abandonó nunca al Duce, durante el último año y medio de guerra, Mussolini fue apoyado completamente por la fuerza militar alemana en el norte de Italia, fue poco más que un instrumento nazi, de eso era demasiado consciente. El arresto de Mussolini por la guerrilla italiana fue una humillación adicional. Lo peor estaba por venir.

Continuará...

AddToAny