Bienvenido a este Blog. Detectives de Guerra le brinda los mejores análisis de los conflictos internacionales de actualidad

11 julio 2019

LA ESTRATEGIA DE LA TENSIÓN. El terrorismo no reconocido de la OTAN





ENTREVISTA al historiador DANIEL GANSER (I)

Realizada por SILVIA CATTORI, Zurich (Suiza), diciembre 2007

Daniele Ganser, reconocido historiador y profesor de la Universitäit St. Gallen, Suiza (2012-2018), cuando presentó su libro "Los Ejércitos secretos de la OTAN. La Operación Gladio y el terrorismo en Europa occidental" impartía clases de historia moderna y contemporánea en la Universidad de Basilea, Suiza (2006-2011). Daniel Ganser es fundador y Director del Instituto Suizo para la Investigación por la Paz y Energía (SIPER Swiss Institute for Peace and Energy Research),​ este Instituto estudia la lucha mundial por el petróleo e  investiga la posibilidad de lograr una transición a suministros de energía 100% renovable que permita la solución pacífica a los conflictos globales.  Además, es Presidente de ASPO-Suiza (Association for the Study of Peak Oil and Gas).​ Por sus trabajos de investigación ha sido calificado (por sus detractores) como un "teórico de la conspitación".

Recordemos que en "Los Ejércitos secretos de la OTAN" se sostiene la tesis que a lo largo de 60 años, Estados Unidos organizó en Europa atentados falsamente atribuidos a la izquierda y a la extrema izquierda para desacreditarlas ante los electores. Esa estrategia perdura hoy en día, como medio de propiciar el miedo hacia el Islam y de justificar las guerras por el petróleo. 

La entrevista realizada por la periodista, escritora e investigadora suiza, de origen italiano, Silvia Cattori, tras la publicación de la referida obra. Silvia Cattori posee amplia experiencia y contactos con el mundo diplomático y agencias de las Naciones Unidas. 

Esta entrevista es un valioso documento histórico no solo para quienes no han tenido oportunidad de leer sus libros, sino que se convierte en un documento histórico de trascendencia de la política europea de posguerra.

Para compreder el concepto de la "estrategia de la tensión" un buen ejemplo es suficiente, en uno de sus artículos Manlio Dinucci lo explica: 


"El golpe de estado de Kiev no debe interpretarse como un hecho aislado sino como un episodio de la estrategia de la OTAN dentro del antiguo espacio del desaparecdo Pacto de Varsovia..Lo que realmente está en juego en esta escalada no es la incorporación de Ucrania a la Unión Europea sino la anexión de Ucrania por parte de la OTAN. Esta forma de actuar de Estados Unidos y la OTAN es una verdadera estrategia de la tensión".

Y eso es lo que acontece en otras partes del mundo, Libia, Siria, Líbano, Yemen, etc., son otros buenos ejemplos.

t. andino


*****

Daniele Ganser

➤ Silvia Cattori: Su libro dedicado a los ejércitos secretos de la OTAN [1], se da a la tarea de explicar que la estrategia de la tensión [2] y el terrorismo de falsa bandera [3] implican grandes peligros. Su libro informa cómo la OTAN, durante la guerra fría –en coordinación con los servicios de inteligencia de los países de Europa Occidental y el Pentágono–, utilizó ejércitos secretos, reclutó espías en los círculos de la extrema derecha, y organizó actos de terrorismo que eran atribuidos a la extrema izquierda. Cuando uno se entera de eso, no puede menos que preguntarse qué puede suceder hoy en día a espaldas nuestras.
Daniele Ganser: Es muy importante entender lo que realmente representa la estrategia de la tensión y cómo funcionó durante aquel período. Eso nos puede ayudar a aclarar el presente y a ver mejor en qué medida se sigue aplicando. Poca gente sabe lo que significa esa expresión de estrategia de la tensión. Es muy importante hablar de ella, y explicarla. Es una táctica que consiste en cometer atentados criminales y atribuirlos a otro. El término tensión se refiere a la tensión emocional, a aquello que crea un sentimiento de miedo. El término estrategia se refiere a aquello que alimenta el miedo de la gente hacia determinado grupo.

Esas estructuras secretas de la OTAN habían sido equipadas, financiadas y entrenadas por la CIA, en coordinación con el MI6 (los servicios de inteligencia británicos), para combatir a las fuerzas armadas de la Unión Soviética en caso de guerra, pero también, según la información de la que hoy disponemos, para cometer atentados terroristas en diferentes países [4]. Es así cómo, desde los años 70, los servicios secretos italianos utilizaron esos ejércitos secretos para fomentar atentados terroristas con el objetivo de sembrar el miedo en el seno de la población y de acusar luego a los comunistas de ser los autores. Era la época en que el Partido Comunista tenía un poder legislativo importante en el Parlamento. La estrategia de la tensión estaba concebida para desacreditarlo, debilitarlo, impedirle acceder al poder ejecutivo.


Una de las portadas en inglés de "Nato’s secret armies" de Daniele Ganser (Los Ejércitos Secretos de la OTAN)

➤ Silvia Cattori: Aprender lo que eso quiere decir es una cosa. ¡Pero sigue siendo difícil creer que nuestros gobiernos hayan podido permitir que la OTAN, los servicios de inteligencia de Europa Occidental y la CIA actuaran como una amenaza para la seguridad de sus propios ciudadanos!
Daniele Ganser: La OTAN era el núcleo de esa red clandestina vinculada al terror. Le Clandestine Planning Committee (CPC) y el Allied Clandestine Committee (ACC) eran subestructuras clandestinas de la alianza atlántica, hoy en día claramente identificadas. Incluso hoy, cuando eso está comprobado, sigue siendo difícil saber qué hacía cada cual. No existen documentos que prueben quién daba las órdenes, quién organizaba la estrategia de la tensión, de qué manera la OTAN, los servicios de inteligencia de Europa Occidental, la CIA, el MI6 y los terroristas reclutados en los círculos de extrema derecha se repartían los papeles.

La única certeza que tenemos es que dentro de aquellas estructuras clandestinas había elementos que utilizaron la estrategia de la tensión. Los terroristas de extrema derecha explicaron en sus declaraciones que eran los servicios secretos y la OTAN quienes los apoyaban a ellos en aquella guerra clandestina. Pero cuando se les piden explicaciones a miembros de la CIA o de la OTAN –cosa que yo he hecho durante varios años– estos se limitan a decir que pudo haber quizás algunos elementos criminales que escaparon a su control.

➤ Silvia Cattori: ¿Esos ejércitos secretos estaban activos en todos los países de Europa Occidental?
Daniel Ganser: Mediante mis investigaciones, yo aporté la prueba de que esos ejércitos secretos existían no sólo en Italia, sino en todo el oeste de Europa: en Francia, en Bélgica, Holanda, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Turquía, España, Portugal, Austria, Suiza, Grecia, en Luxemburgo, en Alemania. Al principio se pensó que había una estructura de guerrilla única y que, por tanto, todos estos ejércitos secretos habían participado en la estrategia de la tensión, por consiguiente, en atentados terroristas. Pero es importante saber que no todos estos ejércitos secretos participaron en los atentados. Y comprender también lo que los diferenciaba, ya que tenían dos actividades diferentes.

Lo que hoy se ve claramente es que estas estructuras clandestinas de la OTAN, comúnmente llamadas Stay behind [5], estaban concebidas, al principio, para actuar como una guerrilla en caso de ocupación de Europa Occidental por parte de la Unión Soviética. Estados Unidos decía que esas redes de guerrilla eran necesarias para enfrentar la falta de preparación de la que habían adolecido esos países durante la invasión alemana.

Muchos de los países que conocieron la ocupación alemana, como Noruega, querían sacar lecciones de su propia incapacidad para resistir a la ocupación y se dijeron que, en caso de una nueva ocupación, debían estar mejor preparados, disponer de otra opción y poder contar con un ejército secreto en caso de derrota del ejército clásico. En el seno de aquellos ejércitos secretos había gente honesta, patriotas sinceros, que solamente querían defender su país en caso de ocupación.

➤ Silvia Cattori: Si entiendo bien, estos Stay behind cuyo objetivo inicial era prepararse para una posible invasión soviética, fueron desviados de ese objetivo y utilizados para combatir a la izquierda. A partir de ahí, es difícil de entender, ¿por qué los partidos de izquierda no investigaron y denunciaron antes estos hechos?
Daniele Ganser: Si tomamos el caso de Italia, se ve que, cada vez que el Partido Comunista se dirigió al gobierno para obtener explicaciones sobre el ejército secreto que operaba en ese país bajo el nombre de código de Gladio [6], nunca hubo respuesta, bajo pretexto del secreto de Estado. No fue hasta 1990 que Giulio Andreotti [7] reconoció la existencia de Gladio y sus vínculos con la OTAN, la CIA y el MI6 [8].

Es también en ese entonces que el juez Felice Casson logró probar que el verdadero autor del atentado de Peteano, que estremeciera Italia en 1972 y del que hasta entonces se había responsabilizado a militantes de extrema izquierda, era [en realidad] Vincenzo Vinciguerra, miembro de Ordine Nuovo, un grupo de extrema derecha. Vinciguerra también habló de la existencia de este ejército secreto Gladio. Y explicó que, durante la guerra fría, aquellos atentados clandestinos habían causado la muerte de mujeres y niños [9]. También afirmó que este ejército secreto controlado por la OTAN tenía ramificaciones por toda Europa. Cuando esa información se dio a conocer, se produjo una crisis política en Italia. Y fue gracias a las investigaciones del juez Felice Casson que se supo [de la existencia] de los ejércitos secretos de la OTAN.

En Alemania, cuando los socialistas del SPD supieron, en 1990, que en su país –como en todos los demás países europeos– había un ejército secreto, y que aquella estructura estaba vinculada a los servicios secretos alemanes, hicieron un escándalo y acusaron al partido demócrata-cristiano (CDU). Este último reaccionó diciendo: si ustedes nos acusan, nosotros diremos al público que ustedes también, con Willy Brandt, estuvieron implicados en esa conspiración. Aquello coincidía con las primeras elecciones de la Alemania reunificada, elecciones que el SPD esperaba ganar. Los dirigentes del SPD entendieron que no se trataba de un buen tema electoral, y finalmente dieron a entender que aquellos ejércitos secretos estaban justificados.

En el Parlamento Europeo, en noviembre de 1990, se elevaron voces para decir que no se podía tolerar la existencia de ejércitos clandestinos, ni dejar sin explicación actos de terror cuyo verdadero origen no estaba aclarado, que había que investigar. El Parlamento Europeo protestó entonces por escrito ante la OTAN y el presidente George Bush padre. Pero no se hizo nada.

Sólo se instrumentaron investigaciones públicas en Italia, Suiza y Bélgica. Son estos los tres únicos países que pusieron un poco de orden en cuanto a este asunto y que publicaron un informe sobre sus ejércitos secretos.




➤ Silvia Cattori: ¿Cuál es la situación hoy en día? ¿Es posible que esos ejércitos clandestinos sigan activos? ¿Pudiera haber estructuras nacionales secretas que no estén bajo control de los Estados?
Daniele Ganser: Para un historiador es difícil contestar esa pregunta. No disponemos de un informe oficial país por país. En mis libros, yo analizo hechos que puedo probar.

En lo tocante a Italia, hay un informe que dice que el ejército secreto Gladio fue suprimido. Sobre la existencia del ejército secreto P 26 en Suiza, hubo también un informe del parlamento, en noviembre de 1990. Por tanto, esos ejércitos clandestinos, que habían almacenado explosivos en escondites a través de toda Suiza, fueron disueltos.

Pero en los demás países no se ha hecho nada. En Francia, aunque el presidente Francois Mitterrand había dicho que todo eso era cosa del pasado, se supo después que esas estructuras secretas seguían existiendo cuando Giulio Andreotti dio a entender que el presidente francés estaba mintiendo: «Usted dice que los ejércitos secretos ya no existen. Pero, durante la reunión secreta del otoño de 1990, ustedes los franceses estaban presentes. No diga entonces que eso ya no existe». Mitterand se disgustó bastante con Andreotti porque, después de esa revelación, no le quedó más remedio que rectificar su propia declaración. Más tarde el ex jefe de los servicios secretos franceses, el almirante Pierre Lacoste, confirmó que esos ejércitos secretos existían también en Francia, y que Francia también había estado implicada en atentados terroristas [10].

Así que es difícil decir si todo eso quedó atrás. Incluso si las estructuras Gladio hubiesen sido disueltas, es posible que se hayan creado otras nuevas manteniendo esta técnica de la estrategia de la tensión y de las False flag.

➤ Silvia Cattori: ¿Es posible pensar que, luego del derrumbe de la URSS, Estados Unidos y la OTAN hayan seguido desarrollando la estrategia de la tensión y las False flag en otros frentes?
Daniele Ganser: Mis investigaciones se concentraron en el período de la guerra fría en Europa. Pero se sabe que hubo False flags en otros lugares, donde está probada la responsabilidad de los Estados. Por ejemplo, están los atentados de 1953 en Irán, atribuidos primero a los comunistas iraníes. Luego se comprobó que la CIA y el MI6 habían utilizado agentes provocadores para orquestar el derrocamiento del gobierno de Mohamed Mosadegh, en el marco de la guerra por el control del petróleo. Otro ejemplo: los atentados de 1954 en Egipto, atribuidos primeramente a los musulmanes. Más tarde se probó que, en lo que se llamó el caso Lavon [11], los verdaderos autores fueron los agentes del Mossad.

En este caso, Israel buscaba lograr que las tropas británicas no salieran de Egipto sino que se quedaran, para garantizar también la protección de Israel. Ahí tenemos ejemplos históricos que demuestran que la estrategia de la tensión y las false flags fueron utilizadas por Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel. Todavía tenemos que continuar las investigaciones en ese sentido ya que, en su historia, otros países también han utilizado la misma estrategia.

➤ Silvia Cattori: ¿Esas estructuras clandestinas de la OTAN, creadas después de la Segunda Guerra Mundial, bajo la influencia de Estados Unidos, para dotar a los países europeos de una guerrilla capaz de resistir ante una invasión soviética, sirvieron finalmente nada más que para realizar acciones criminales contra ciudadanos europeos? ¡Todo hace pensar que Estados Unidos buscaba otra cosa!
Daniele Ganser: Tiene usted razón en abordar ese tema. Estados Unidos estaba interesado en el control político. Ese control político es un elemento esencial de la estrategia de Washington y de Londres. El general Geraldo Serravalle, jefe del Gladio, la red italiana Stay-behind, pone un ejemplo de ello en su libro. Él cuenta que entendió que Estados Unidos no estaba interesado en la preparación de esa guerrilla en caso de invasión soviética cuando vio que lo que les interesaba a los agentes de la CIA, que asistían a los ejercicios de entrenamiento del ejército secreto que él dirigía, era asegurarse de que aquel ejército funcionara de forma que fuese posible controlar las acciones de los militantes comunistas. Lo que temían era la llegada de los comunistas al poder en países como Grecia, Italia y Francia. Ese era, por consiguiente, el objetivo de la estrategia de la tensión: orientar e influenciar la política de ciertos países de Europa Occidental.

➤ Silvia Cattori: Usted habló del elemento emocional como factor importante en la estrategia de la tensión. Por consiguiente, el terror, cuyo origen es indefinido, incierto, el miedo que provoca, sirve para manipular a la opinión. ¿No estamos viendo actualmente los mismos métodos? Ayer se sembraba el miedo al comunismo. ¿No se está sembrando ahora el miedo al Islam?
Daniele Ganser: Si, hay un paralelismo muy claro. Durante los preparativos de la guerra contra Irak se dijo que Sadam Husein tenía armas biológicas, que existía un vínculo entre Irak y los atentados del 11 de septiembre o que existía una relación entre Irak y los terroristas de Al-Qaeda. Pero no era cierto. Mediante esas mentiras se quería hacer creer al mundo que los musulmanes querían extender el terrorismo por todas partes, que la guerra era necesaria para combatir el terror. Pero la verdadera razón de la guerra es el control de los recursos energéticos. La geología demuestra que las riquezas en gas y en petróleo se concentran en los países musulmanes. Quien quiere acapararlos tiene que recurrir a ese tipo de manipulaciones.

No se puede decir que ya no hay petróleo puesto que el máximo de la producción global –el «peak oil» [12]– va a producirse probablemente antes de 2020, así que hay que apoderarse del petróleo en Irak, porque la gente diría que no se puede matar niños para tener el petróleo. Y tendrían razón. (Nota interpuesta por el editor de este blog: La entrevista data del 2007, por entonces todavía se creía firmemente en la teoría del "pico de petróleo", es decir, se pensaba que hasta 2020 se llegaría al máximo posible de explotación del oro negro y que desde ahí la curva sería descendente, por lo que habría que apoderarse de las reservas hidrocarburíferas. En la actualidad está demostrado que existen tantas y ricas reservas de petróleo por el mundo que cálculos conservadores estiman que como mínimo durarán hasta comienzos del próximo siglo. Si no fuera así, pregúntese para que se construyen hoy tantos oleoductos y se desatan guerras para los trazados de las rutas por países no afínes con las políticas atlantistas básicamente?). 

Tampoco se le puede decir a la gente que en el Mar Caspio hay reservas enormes y que se debe hacer un oleoducto hacia el Océano Indico pero que, como no se puede pasar por Irán que está al sur ni pasar por Rusia que está por el norte, hay que pasar por el este, por Turkmenistán y Afganistán y que, por tanto, hay que controlar ese país. Es por eso que se califica a los musulmanes de «terroristas». Es una gran mentira, pero si se repite mil veces que los musulmanes son «terroristas» la gente acabará por creérselo y por decirse a sí misma que esas guerras antimusulmanas son útiles; y acabarán olvidando que hay muchas formas de terrorismo, que la violencia no es obligatoriamente una especialidad musulmana.

➤ Silvia Cattori: En definitiva, esas estructuras clandestinas quizás hayan sido disueltas, ¿pero la estrategia de la tensión puede haber continuado?
Daniele Ganser: Exactamente. Es posible que las estructuras hayan sido disueltas y que se hayan formado otras nuevas. Es importante explicar que, en la estrategia de la tensión, la táctica y la manipulación funcionan. Nada de eso es legal. Pero, para los Estados, es más fácil manipular a la gente que decirle que el objetivo es apoderarse del petróleo de los demás

Sin embargo, no todos los atentados son consecuencia de la estrategia de la tensión. Pero es difícil saber cuáles son los atentados manipulados. Incluso aquellos que conocen la cantidad de atentados manipulados por Estados para desacreditar a un enemigo político pueden enfrentarse a un obstáculo psicológico. Después de cada atentado, la gente siente miedo, está confundida. Es muy difícil acostumbrarse a la idea de que la estrategia de la tensión, la estrategia de las False flag, es una realidad. Es más fácil aceptar la manipulación y decirse: «Hace 30 años que me mantengo informado y nunca he oído hablar de esos ejércitos criminales. Los musulmanes nos atacan, por eso los estamos combatiendo».




➤ Silvia Cattori: Desde 2001, la Unión Europea instauró medidas antiterroristas. Enseguida resultó que esas medidas permitieron que la CIA secuestrara gente, que la llevara a lugares secretos para torturarla. ¿No se han convertido un poco los Estados europeos en rehenes de su propia sumisión a Estados Unidos?
Daniele Ganser: Los Estados europeos han tenido una actitud bastante débil ante Estados Unidos después de los atentados del 11 de septiembre de 2001. Después de haber afirmado que las prisiones secretas eran ilegales, le dejaron las manos libres. Lo mismo sucedió con los prisioneros de Guantánamo. En Europa se oyeron voces que decían: «No se puede privar a los prisioneros de la defensa de un abogado». Cuando la señora Angela Merkel mencionó esta cuestión, Estados Unidos dio a entender claramente que Alemania estaba un poco implicada en Irak, que sus servicios secretos habían ayudado a preparar esta guerra y que, por consiguiente, tenía que callarse.

➤ Silvia Cattori: En ese contexto, en que todavía quedan muchas zonas oscuras, ¿qué clase de seguridad puede aportar la OTAN a los pueblos que supuestamente debe proteger, si permite ese tipo de manipulación por parte de los servicios secretos?
Daniele Ganser: En lo tocante a los atentados terroristas manipulados por los ejércitos secretos de la red Gladio durante la guerra fría, es importante poder determinar con claridad cuál es la implicación real de la OTAN en este asunto, saber qué fue lo que realmente sucedió. ¿Eran actos aislados o actos secretamente organizados por la OTAN? Hasta el día de hoy, la OTAN se ha negado ha hablar de la estrategia de la tensión y del terrorismo durante la guerra fría. La OTAN rechaza toda pregunta sobre Gladio.

Hoy en día, la OTAN se está utilizando como un arma ofensiva, cuando esa organización no fue creada en realidad para desempeñar ese papel. A la OTAN se le dio ese sentido el 12 de septiembre de 2001, inmediatamente después de los atentados de Nueva York. Los dirigentes de la OTAN afirman que la razón de su participación en la guerra contra los afganos es la lucha contra el terrorismo. Pero la OTAN corre el riesgo de perder esa guerra. Se producirá entonces una gran crisis, habrá debates. Lo cual permitirá entonces saber si la OTAN está librando, como lo afirma, una guerra contra el terrorismo, o si nos encontramos en una situación análoga a la que conocimos durante la guerra fría, con el ejército secreto Gladio, situación en la que existía un vínculo con el terror.

Los años venideros dirán si la OTAN actuó al margen de la misión para la cual había sido creada, que era la de defender a los países europeos y Estados Unidos en caso de invasión soviética, acontecimiento que nunca se produjo. La OTAN no fue fundada para apoderarse del petróleo o del gas de los países musulmanes.

➤ Silvia Cattori: Sería incluso comprensible que Israel, país que está interesado en ampliar los conflictos en los países árabes, empuje a Estados Unidos en ese sentido. Pero no se ve cuál puede ser el interés de los Estados europeos en implicar sus tropas en guerras decididas por el Pentágono, como en Afganistán.
Daniele Ganser: Yo creo que Europa está confundida. Estados Unidos está en una posición de fuerza, y los europeos tienen tendencia a pensar que es mejor colaborar con el más fuerte. Pero habría que reflexionar un poco más. Los parlamentarios europeos ceden fácilmente a la presión de Estados Unidos, que reclama cada vez más tropas en tal o más cual frente. Mientras más ceden los países europeos, más se someten y más problemas van a tener que enfrentar, y serán problemas cada vez más grandes.

En Afganistán, los alemanes y los británicos están bajo las órdenes del ejército estadounidense. Estratégicamente, no se trata de una posición interesante para esos países. Ahora Estados Unidos ha pedido a los alemanes que envíen también a sus soldados al sur de Afganistán, a las zonas donde más dura es la lucha. Si los alemanes aceptan, corren el riesgo de ser masacrados por esas fuerzas afganas que rechazan la presencia de cualquier ocupante. Alemania debería preguntarse seriamente si no tendría que retirar sus 3000 soldados de Afganistán. Pero, para los alemanes, desobedecer las órdenes de Estados Unidos, siendo un poco sus vasallos, es un paso difícil.

➤ Silvia Cattori: ¿Qué saben las autoridades que actualmente nos gobiernan sobre la estrategia de la tensión? ¿Pueden seguir así, permitiendo que los guerreristas fomenten golpes de Estado, que secuestren y que torturen gente sin reaccionar? ¿O cuentan todavía con medios para impedir esas actividades criminales?
Daniele Ganser: No lo sé. Como historiador, yo observo y tomo nota. Como consejero político, siempre digo que no se puede ceder a las manipulaciones tendientes a sembrar el miedo y a hacernos creer que los «terroristas» son siempre musulmanes. Yo digo que se trata de una lucha por el control de los recursos energéticos, que hay que encontrar la forma de sobrevivir a la escasez energética. De esa forma no se resuelven los problemas, sino que los agravamos.

➤ Silvia Cattori: Cuando observamos la demonización de los árabes y de los musulmanes a partir del conflicto israelo-palestino, uno piensa que eso no tiene nada que ver con el petróleo.
Daniele Ganser: Sí, en ese caso sí. Pero, en la perspectiva de Estados Unidos, de lo que se trata es de una lucha por el control de las reservas energéticas del bloque euroasiático que se sitúa en esa «elipse estratégica» que comienza en Azerbaiyán, pasa por Turkmenistán y por Kazajstán y llega hasta Arabia Saudita, Irak, Kuwait y el Golfo Pérsico. Es precisamente ahí, en esa región, en la que se desarrolla esa supuesta guerra «contra el terrorismo», que se concentran las más importantes reservas de petróleo y gas.

A mi entender, no se trata de otra cosa más que de un rejuego geoestratégico en el cual la Unión Europea sólo puede salir perdiendo ya que si Estados Unidos toma el control de esos recursos y la crisis energética empeora, simplemente dirá: «Ustedes quieren gas, quieren petróleo. Está bien. A cambio, queremos esto y esto otro». Estados Unidos no va a dar el petróleo y gas gratis a los países europeos. Poca gente sabe que el «peak oil», el máximo de la producción, ya se alcanzó en el Mar del Norte y que, por consiguiente, la producción de petróleo en Europa –la producción de Noruega y Gran Bretaña- está en declive.

El día que la gente se dé cuenta que esas guerras «contra el terrorismo» son manipuladas, y que esas acusaciones contra los musulmanes son en parte propaganda, se va a quedar sorprendida. Los Estados europeos tienen que despertar y entender por fin cómo funciona la estrategia de la tensión. Y tienen que aprender también a decirle que no a Estados Unidos. Además, en Estados Unidos también hay mucha gente que no quiere esta militarización de las relaciones internacionales.





➤ Silvia Cattori: Usted también ha investigado sobre los atentados del 11 de septiembre de 2001 y es coautor de un libro [13] junto a otros intelectuales preocupados por las incoherencias y contradicciones de la versión oficial de dichos acontecimientos y de las conclusiones de la comisión investigadora creada por el presidente Bush. ¿No teme que lo acusen de «teoría conspiracionista»?
Daniele Ganser: Mis estudiantes y otras personas siempre me han preguntado: ¿si esta «guerra contra el terrorismo» está realmente vinculada con el petróleo y el gas, los atentados del 11 de septiembre no pueden haber sido manipulados también? ¿O es una coincidencia que los musulmanes de Osama Ben Laden hayan actuado exactamente en el momento en que los países occidentales empezaban a comprender que habría una crisis del petróleo? Así que empecé a interesarme en lo que se había escrito sobre el 11 de septiembre y a estudiar también el informe oficial que fue presentado en junio de 2004.

Cuando uno se mete en ese tema, lo primero que nota es que existe un gran debate planetario sobre lo que realmente sucedió el 11 de septiembre de 2001. La información que tenemos no es muy precisa. Lo que nos lleva a interrogarnos en ese informe de 600 páginas es que ni siquiera se menciona el tercer edificio que se derrumbó aquel día. La comisión se refiere solamente al derrumbe de las «Torres Gemelas».

Pero hay un tercer edificio, de 170 metros, que también se derrumbó; el llamado WTC 7. En el caso de ese edificio se habla de un pequeño incendio. Yo hablé con profesores que conocían bien la estructura de esos edificios. Ellos dicen que un pequeño incendio no puede destruir una estructura de esas dimensiones. La historia oficial sobre el 11 de septiembre, las conclusiones de la comisión, no son creíbles. Esa falta de claridad pone a los investigadores en una situación muy difícil. También reina la confusión sobre lo que realmente sucedió en el Pentágono. En las fotos que tenemos, resulta difícil encontrar un avión. No se ve cómo puede haber caído un avión allí.

➤ Silvia Cattori: El parlamento de Venezuela pidió a Estados Unidos que aportara más explicaciones para aclarar el origen de esos atentados. ¿No debería ser ese el ejemplo a seguir?
Daniele Ganser: Hay muchas imprecisiones sobre el 11 de septiembre. Los parlamentarios, los universitarios, la ciudadanía, pueden pedir cuentas sobre lo que realmente sucedió. Yo pienso que es importante seguir preguntando. Se trata de un hecho que nadie puede olvidar. Todo el mundo recuerda dónde se encontraba en aquel preciso momento. Resulta increíble que depués de años todavía no se haya aclarado eso.

➤ Silvia Cattori: Parece como si las instituciones no quisieran poner en duda la versión oficial. ¿Es posible que se hayan dejado manipular por la desinformación organizada por estrategas de la tensión y de las False flag ?
Daniele Ganser: Uno es manipulable si tiene miedo. Miedo de perder el trabajo, miedo de perder el respeto de la gente que queremos. No se puede salir de esta espiral de violencia y de terror si nos dejamos vencer por el miedo. Es normal tener miedo. Pero hay que hablar abiertamente de ese miedo y de las manipulaciones que lo generan. Nadie puede escapar a sus consecuencias. Eso es aún mucho más grave en la medida en que los responsables políticos a menudo actúan bajo el efecto de ese miedo. Hay que buscar la fuerza necesaria para decir: «Sí, tengo miedo de saber que esas mentiras están haciendo sufrir a la gente; sí, tengo miedo de pensar que ya no queda mucho petróleo; sí, tengo miedo de pensar que el terrorismo del que nos hablan es resultado de manipulaciones, pero no me voy a dejar intimidar».

➤ Silvia Cattori: ¿Hasta qué punto países como Suiza participan actualmente en esta estrategia de la tensión?
Daniele Ganser: Yo pienso que no existe una estrategia de la tensión en Suiza. Ese país no ha tenido atentados terroristas. Lo que sí es cierto, en Suiza como en otras partes, es que los políticos que tienen miedo de Estados Unidos, de la posición de fuerza de ese país, tiene tendencia a decirse a sí mismos que Estados Unidos es un buen amigo y que no nos conviene enemistarnos con ese país.

➤ Silvia Cattori: ¿Esa forma de pensar y de tapar las mentiras de la estrategia de la tensión, no los hace cómplices de los crímenes a las que esta da lugar; comenzando por los periodistas y los partidos políticos?
Daniele Ganser: Pienso, en lo personal, que todo el mundo –periodistas, universitarios, políticos– tiene que reflexionar sobre las implicaciones de la estrategia de la tensión y de las False flag. Es verdad que nos encontramos ante hechos que escapan a toda comprensión. Por eso es que, cada vez que hay atentados terroristas, tenemos que interrogarnos y tratar de entender qué es lo que hay detrás [de esos hechos]. Sólo cuando se admita oficialmente que las False flag son una realidad, será posible establecer una lista de las False flag qua han tenido lugar a través de la historia y podremos ponernos de acuerdo sobre lo que habría que hacer.

El tema que me interesa es la búsqueda de la paz. Es importante abrir el debate sobre la estrategia de la tensión y tener en cuenta que se trata de un fenómeno totalmente real. Porque, hasta que no se haya reconocido su existencia, no habrá posibilidad de actuar. Por eso es importante explicar lo que realmente significa la estrategia de la tensión. Y, cuando se entienda, no podemos dejarnos llevar por el miedo y por el odio contra un grupo.

Hay que tener en cuenta que no es un solo país el que está implicado; que no son solamente Estados Unidos, Italia, Israel o los iraníes sino que eso sucede en todas partes, aunque algunos países están más implicados que otros. Hay que entender, sin acusar a tal país o a tal persona. El miedo y el odio no ayudan a progresar sino que paralizan el debate. Veo muchas acusaciones contra Estados Unidos, contra Israel, contra Gran Bretaña, o –del otro lado– contra Irán, Siria. Pero la búsqueda de la paz nos enseña que no se debe lanzar acusaciones basadas en la nacionalidad, y que no debe haber odio ni miedo; que lo más importante es explicar. Y esa comprensión será beneficiosa para nosotros todos.

➤ Silvia Cattori: ¿Por qué su libro sobre los ejércitos secretos de la OTAN, que se ha publicado ya en inglés y se ha traducido al italiano, al turco, al esloveno, y muy pronto al griego, no se ha publicado en francés?
Daniele Ganser: No he encontrado todavía un editor en Francia. Si algún editor está interesado en publicar mi libro, vería con mucho gusto que lo tradujeran al francés. (Nota del editor del blog: A la fecha de la entrevista no se había publicado la edición francesa del libro. Posteriormente fue lanzada por la editorial Broché bajo el título: "Les Armées Secrètes de l'OTAN: Réseaux Stay Behind, Opération Gladio et Terrorisme en Europe de l'Ouest")


Daniele Ganser - Silvia Cattori

Ir a la segunda entrevista con Daniele Ganser


Las guerras ilegales de la OTAN empiezan con mentiras

Notas:


[1] Nato’s secret Armies: Terrorism in Western Europe por Daniele Ganser, prefacio de John Prados. Editorial Frank Cass, 2005. ISBN 07146850032005
[2] Fue después del atentado de la Piazza Fontana, en Milán, en 1969, que esta expresión se mencionó por vez primera.
[3] False flag operations (operaciones bajo bandera falsa) es la expresión que se utiliza para designar las acciones terroristas realizadas en secreto por gobiernos u organizaciones pero que aparecen como hechos cometidos por otros.
[4] «Stay-behind: les réseaux d’ingérence américains» por Thierry Meyssan, Réseau Voltaire, 20 de agosto de 2001.
[5] Stay behind (lo que quiere decir: quedar detrás en caso de invasión soviética) es el nombre dado a las estructuras clandestinas entrenadas para hacer una guerra de partisanos.
[6] Gladio designa el conjunto de los ejércitos secretos europeos que se encontraban bajo la dirección de la CIA.
[7] Presidente del Consejo de ministros, miembro de la democracia cristiana.
[8] «Informe Andreotti sobre la Operación Gladio» documento del 26 de febrero de 1991, Biblioteca de la Red Voltaire.
[9] «1980: carnage à Bologne, 85 morts», Réseau Voltaire, 12 de marzo de 2004.
[10] «La France autorise l’action des services US sur son territoire» por Thierry Meyssan, Réseau Voltaire, 8 de marzo de 2004.
[11] Affaire Lavon, debido al apellido del ministro de Defensa israelí que tuvo que dimitir cuando el Mossad fue desenmascarado como participante en actos criminales
[12] Ver: «Odeurs de pétrole à la Maison-Blanche», Réseau Voltaire, 14 de diciembre de 2001. «Les ombres du rapport Cheney» por Arthur Lepic, 30 de marzo de 2004. «Le déplacement du pouvoir pétrolier» por Arthur Lepic, 10 de mayo de 2004. «Dick Cheney, le pic pétrolier et le compte à rebours final» por Kjell Aleklett, 9 de marzo de 2005. «L’adaptation économique à la raréfaction du pétrole» por Thierry Meyssan, 9 de junio de 2005.
[13] 9/11 American Empire: Intellectual speaks out, dirigido por David Ray Griffin, Olive Branch Press, 2006

07 julio 2019

La temida invasión de Hitler al Medio Oriente





Introducción por el editor del blog

Nick Ottens y su portal Never Was Magazine, cuyo lema es: Explorando un pasado que nunca fue ("Exploring a past that never was"), nos presenta posibles escenarios bélicos durante el desarrollo de la segunda guerra mundial, plasmados en la revista Life, edición del 28 de abril de 1941. Naturalmente hay que recalcar que tales hechos no sucedieron, pero fueron posibles en un tiempo y bajo circunstancias determinadas, es la razón para que haya sido discutido como hipotesis por estrategas y expertos militares. 

El Medio Oriente era importante no solo por el petróleo, el bando alemán tenía serias posibilidades de conseguir la adhesión y respaldo de los pueblos árabes a las fuerzas del Eje. Hubo un momento, durante la segunda guerra mundial, que se creyó factible realizar aquel proyecto. 

Los planes alemanes para movilizar sus ejércitos hacia Medio Oriente se tomaron en consideración como posibles acciones futuras. En primer lugar debían consolidar sus iniciales éxitos tras la invasión a la Unión Soviética y la presencia del Eje en el norte de África. En pleno desarrollo de la segunda ofensiva alemana en el Frente del Este (1942), denominada "Operación Azul", cuyo objetivo estratégico era conquistar los campos petroleros del Cáucaso y la región sur del Volga, vitales para la economía soviética y puerta de entrada al sur del Cáucaso, habría permitido planificar una ofensiva en el Próximo Oriente coordinados con la conquista del norte de África. Cualquiera futura pretensión en ese sentido quedó sepultada tras el fracaso de la estrategia bélica germana en el Cáucaso y en el desierto africano.  

Antes de dar lectura al tema central de esta entrada existe una evidencia histórica a tener en cuenta. En plena guerra mundial, Adolf Hitler buscó apoyo del mundo árabe para la causa germana, previamente los turcos le dijeron no a sus peticiones de  unirse al Eje

Un personaje, el Gran Mufti de Jerusalén, Muhammad Amin al-Husayni o Al-Husseini, que en 1939 llegó a dar una conferencia en el mísmisimo Reichstag de la Alemania nazi, presentó un esquema para solucionar la ´cuestión judía´. Como líder religioso musulmán nacionalista y opuesto a la emigración judía a Palestina, antes de que estalle el conflicto mundial, participó en varios pogroms contra los judíos durante el Mandato Británico de Palestina, por esos actos tuvo que exiliarse y residir en Berlín. Husseini no tuvo acceso a Hitler hasta la conocida reunión de noviembre de 1941. No se sabe hasta que punto Al-Husseini -como aliado islámico de Alemania hubiese podido unificar a los árabes y hacerles entrar en guerra contra los británicos, principalmente

Husseini confiaba en los alemanes para el reconocimiento de las aspiraciones de independencia y libertad de las naciones árabes y, en particular, su interés por una Palestina árabe, como consta en las actas de la reunión en que rogó a Hitler proclamar el apoyo alemán al movimiento independentista árabe de Palestina.



El Gran Mufti de Jesusalén, Muhammad Amin al-Husayni o Al-Husseini, posa junto a un grupo de oficiales y tropa de la 13ª División de Montaña SS Handschar. Noviembre de 1943


El Gran Mufti aspiraba que Hitler públicamente declarase ese apoyo, así como esperaba que Hitler manifieste su oposición al pretendido “hogar nacional judío” en Palestina. Husseini prometió a los nazis, que si conseguía una declaración oficial en ese sentido, conseguiría movilizar a todo el mundo árabe en apoyo militar y logístico al “Eje”

Razones prácticas hicieron que el Führer se negara a realizar una declaración pública en ese sentido, su principal razón, no era el momento oportuno, ese acto solo favorecería a los ingleses. Hitler prometió que cuando la Wehrmacht controlara el  sur del Cáucaso sería el momento de declarar la liberación de los árabes. Husseini debió conformarse con el ofrecimiento que nunca llegó. 

En ese mismo 1941, tras las campañas militares contra los británicos en Egipto y la invasión de Yugoslavia, Al-Husseini asumió otras tareas, patrocinó el reclutamiento de musulmanes bosnios y albaneses para las Waffen-SS, como resultado se formó la 13ª División de Montaña SS Handschar, de la cual él sería su Comandante Honorario, dicha unidad fue usada más como fuerza policial represiva que una fuerza de combate, su principal tarea fue combatir a las guerrillas partisanas de Tito y el cometimiento de atrocidades contra la población yugoslava.


Tito Andino


*****




En la primavera de 1941, la Alemania nazi controlaba toda Europa occidental y la pregunta era ¿dónde atacaría Adolf Hitler a continuación?

¿Finalmente intentaría una invasión a la Gran Bretaña? ¿O en su lugar se trasladaría al Medio Oriente para capturar los campos petroleros? (Pocos anticiparon el momento en que rompería su pacto de no agresión con la Unión Soviética).

La revista Life argumentó ese año que la invasión de Oriente Medio a través del norte de África era más probable. Eso permitiría a Hitler evitar agraviar a los Estados Unidos por un lado, la que podría involucrarse si Alemania invadiera Inglaterra y, Turquía por el otro, que había resistido las propuestas alemanas para una alianza.

"El único problema es el espacio abierto de agua entre Italia y el continente africano"también conocido como el Mar Mediterráneo, escribió la revista.


A Dakar!

La situación militar en Europa y el Mediterráneo a principios de 1941, de la revista Life, 17 de marzo de 1941.

Si Alemania avanzara en Gibraltar, así como en el Canal de Suez, podría atrapar a la flota británica en el Mediterráneo, cortar sus líneas de suministro a la India y proteger a Europa de un bloqueo por mar con las reservas de petróleo de Oriente Medio y los graneros de África del norte en su poder.

Esta perspectiva alarmó a los estadounidenses, quienes temían que las tropas alemanas pudieran llegar a Dakar en la costa oeste de África y desde allí amenazar el hemisferio occidental.

El secretario de Marina Frank Knox advirtió:


“Muy pocos de nosotros nos damos cuenta del tamaño del desastre para la seguridad del hemisferio estadounidense si Alemania, que ya es la conquistadora de Francia, se estableciera en Dakar, una posesión colonial francesa. Desde allí, con sus barcos de superficie, submarinos y bombarderos de largo alcance, una Alemania victoriosa podría hacer de la Doctrina Monroe un trozo de papel ".


Neutralidad turca



Hipotética invasión alemana, mapa de una temida invasión alemana de Medio Oriente, de la revista Life, , 28 de abril de 1941


Los alemanes nunca llegaron a Dakar ni a ningún sitio cercano. Un obstáculo importante para sus ambiciones en el Medio Oriente era Turquía. El aliado de Alemania durante la Primera Guerra Mundial decidió mantenerse neutral en la segunda.


El presidente İsmet İnönü mantuvo a Turquía fuera de la Segunda Guerra Mundial (Wikimedia Commons)


El presidente İsmet İnönü, el sucesor de Kemal Atatürk y un ex jefe de ejército, consideró una alianza con la Unión Soviética y Occidente para contener el poder nazi antes de la guerra, pero luego los soviéticos firmaron su pacto de no agresión con Alemania en 1939 y los turcos sintieron que NO tenía sentido aliarse solo con Gran Bretaña y Francia.

Los nazis ofrecieron a Turquía partes de Grecia a cambio de unirse a la guerra en el lado del Eje así como los estados intermedios en el Cáucaso, pero İnönü los rechazó. Sus simpatías eran con los aliados y los alemanes reconocieron que una invasión habría hecho innecesariamente un nuevo enemigo fuera de su nación.



Mapa de una propuesta de invasión aliada de los Balcanes, publicada en la revista Time, 20 de diciembre de 1943 (Robert M. Chapin Jr.)


En diciembre de 1943, İnönü ya estaba seguro de que los Aliados prevalecerían y se reunió abiertamente con Franklin Roosevelt y Winston Churchill en El Cairo. Todavía no estaba preparado para unirse a la guerra, pero aceptó la construcción de la Base Aérea de Incirlik cerca de Adana para posibles operaciones aéreas de los Aliados en la región. La base más tarde jugará su papel en la Guerra Fría.

Turquía no se unió formalmente a los aliados hasta 1945, cuando los nazis habían sido casi vencidos.


Fortaleza de Alejandría


Fortaleza Alejandría (Alexandria, Egipto). Dibujo del puerto de Alejandría, de la revista Life, 28 de abril de 1941.


Una invasión alemana por el norte de África tendría que cruzar la fortaleza británica de Alejandría, donde estaba estacionada la flota mediterránea. (Originalmente tenía su sede en Malta, pero se mudó a Egipto poco antes del estallido de la guerra).

Life describió el puerto de manera vívida en su edición del 28 de abril de 1941:

Hay un zumbido y una conmoción sin fin entre todas las naves: señalización, pintura, reacondicionamiento, lanzamientos que llevan a los hombres a tierra y los oficiales que visitan de una nave a otra. La bandera de todas las naciones que no pertenecen al Eje con un mercante de aletas marinas en la sofocante brisa del Mediterráneo. Y, por supuesto, las redes submarinas protegen cada entrada.

La tripulación de un tanque británico M3 Grant rebasa un Panzerkampfwagen alemán durante la guerra en el norte de África, el 6 de junio de 1942 (IWM)


Las tropas italianas, que operaban desde Libia, originalmente habían logrado algunos avances contra los británicos, pero fueron rechazadas a fines de 1940. Hitler envió a Erwin Rommel y sus Afrikakorps en su ayuda en febrero de 1941. El Zorro del Desierto tuvo más éxito que los italianos, asustando y empujando mucho hacia Egipto a los británicos. Finalmente fue detenido por Bernard Montgomery en El Alamein, una pequeña estación de ferrocarril a unos cien kilómetros al oeste de Alejandría.

Los alemanes nunca llegaron a Alejandría, y mucho menos al canal de Suez.


Campos petroleros de Irán e Irak


Los legionarios árabes del Jordán vigilan los aviones británicos que reabastecen de combustible en Transjordania durante un viaje de Egipto a la guarnición sitiada en Habbaniyah, Irak, 1941 (IWM)


El gran temor era que Alemania llegara a los campos petroleros de Irán e Irak. Life informó en abril de 1941 que el primero había producido unos 81 millones de barriles de petróleo en 1931 y los últimos 30 millones de barriles. "Con esa oferta, Hitler podría seguir luchando indefinidamente", argumentó.

Los alemanes utilizaron la propaganda para conquistar los corazones y las mentes de los árabes que vivían bajo el dominio colonial británico y francés en Irak, Palestina y Siria. Life atribuyó a esta guerra de información el golpe iraquí de 1941 que derrocó a la monarquía pro-británica en favor de una junta pro-alemana.

La respuesta británica fue rápida: las tropas del ejército indio aterrizaron en Basora, mientras que las fuerzas de la Legión árabe y británica fueron enviadas desde Palestina y Transjordania. En pocas semanas, 'Abd al-Ilah de Hejaz fue restaurado como regente, quien gobernó hasta que el Rey Faisal II alcanzara la mayoría de edad en 1953.

Hitler consideraba a los iraníes como unos compañeros de raza aria y los Aliados pensaron que el Shah Reza Pahlavi podría simpatizar con Hitler. Gran Bretaña y la Unión Soviética invadieron Irán en septiembre de 1941 para mantenerlo fuera de la guerra. La ocupación, que duró tres años, también permitió a los Estados Unidos abastecer a la Unión Soviética bajo el Programa de Préstamos y Arriendos.


India en riesgo


Un soldado del Ejército Indio Sikh en Italia sostiene una bandera nazi después de la rendición de las fuerzas del Eje en Italia, mayo de 1945 (Wikimedia Commons)


Es difícil de creer ahora, pero en la primavera de 1941, cuando los alemanes estaban en racha y aún en paz con los soviéticos, incluso la lejana India, la posesión colonial más preciada de Gran Bretaña, parecía estar en riesgo.

Life argumentó en abril (1941) que una invasión alemana desde el oeste podría convencer a los soviéticos de atacar simultáneamente desde el norte hacia Afganistán e Irán.

Los nazis simpatizaban con los afganos; se hicieron algunos intentos a medias para persuadirlos de que se alzaran contra los británicos. Pero los afganos solo tenían desprecio por los hindúes

Hitler elogió el dominio colonial británico y esperaba alcanzar una paz con el Reino Unido que preservaría su imperio en la India. Cuando quedó claro que los británicos no estaban interesados ​​en tal acuerdo, Hitler accedió a dividir el subcontinente con Japón en los planes de dominación mundial de las potencias del Eje: Alemania controlaría los actuales Afganistán y Pakistán; Japón se llevaría el resto.

Por supuesto, nada de estos esquemas surgió, pero los indios realizaron acciones contra el Eje. Al final de la guerra, unos 2,5 millones de ellos se habían ofrecido como voluntarios para el ejército indio. Lucharon contra los japoneses en Birmania, contra Rommel en el norte de África y ayudaron a derrotar a los italianos en 1944 y 45.

Unos pocos lucharon en el otro bando: unos 3.000, casi todos prisioneros de guerra, fueron reclutados por los alemanes en la llamada Legion Freies Indien (Free India Legion).

Nick Ottens




Artículo relacionado de Nick Ottens

03 julio 2019

Pakistán y Afganistán - epicentros de la intriga geopolítica





Chris Kanthan


La política exterior estadounidense se parece cada vez más a la escena final de la película Scarface. Después de Corea del Norte, Rusia, China, Venezuela, Birmania, Siria, Hezbolá, Palestina e Irán, el último país que ha estado en la mira de los globalistas es Pakistán. Sin embargo, como siempre, en la historia hay más de lo que nos hacen saber a través de la propaganda. La verdadera razón no expresada detrás de este drama es la estrategia estadounidense contra China, pero analicemos el panorama general. 

La narrativa oficial de EEUU usa a Pakistán como el chivo expiatorio del terrorismo en Afganistán. El mantra repetido es que los talibanes y la red de terroristas Haqqani se escabullen desde Pakistán y atacan a las tropas estadounidenses en Afganistán. Aunque hay algo de verdad en esto, los expertos ignoran que el 40% de Afganistán está ahora bajo control talibán.



Talibanes en Afganistán - Los combatientes y las tierras que ellos controlan.


Luego de 17 años de presencia estadounidense, 2.300 muertos y 20.000 soldados americanos heridos, además de 800.000 millones de dólares... los talibanes son tan poderosos como nunca antes lo han sido. 


Sólo en 2017, los talibanes mataron a más de 10.000 soldados y policías afganos. En un país donde el 70% de los adultos son analfabetos y más de un tercio de la población vive en la pobreza extrema (viviendo con menos de $2 dólares al día) no es difícil reclutar combatientes y terroristas suicidas

Otro hecho que se pasó por alto: 


La producción de opio de Afganistán se ha cuadruplicado desde la invasión de Estados Unidos en 2002. 

En 2017, Afganistán produjo una cantidad récord de 500 toneladas de heroína de calidad para exportación, equivalente al 90% de la oferta del mercado mundial. Los cultivadores de amapola y los talibanes afganos ganaron alrededor de 1.500 millones de dólares, aunque el precio de venta al público de esa heroína en Occidente equivale a más de 100.000 millones de dólares


Hay muchas potencias mundiales que se benefician de este comercio de heroína, por lo que nadie se queja de ello.


Producción de amapolas de opio en Afganistán.


¿Cómo encaja Pakistán en el panorama? En primer lugar, Pakistán participa en el tráfico de drogas como principal intermediario (los grupos de Turkmenistán e Irán son otros facilitadores). 

En cuanto al fundamentalismo islámico y el terrorismo, es Estados Unidos quien creó a los monstruos de Frankenstein tanto en Pakistán como en Afganistán durante la década de 1980. Incluso la red de Haqqani, ahora demonizada, fue creada, entrenada y armada por la CIA en la década de 1980

La CIA necesitaba combatientes fanáticos y baratos para su guerra subsidiaria contra la URSS. Pakistán se convirtió en el centro logístico y en el caldo de cultivo de los terroristas. Se crearon escuelas islámicas financiadas por Arabia Saudí (las llamadas "madrassas") en todo Pakistán y la CIA incluso publicó libros de texto infantiles que estaban vilmente llenos de violencia y odio. 


Libros de texto para niños de 1er grado afganos publicado por EEUU y financiados por la CIA, en la década de 1980.



Cuando terminó la guerra, Estados Unidos abandonó abruptamente la región y detuvo su ayuda a Pakistán, que también recibió millones de refugiados afganos. 


Los locos guerreros subsidiarios estadounidenses, los mujahidines, se transformaron en talibanes (guerreros locales) y Al Qaeda (guerreros globales).

La inteligencia de Pakistán, ISI, también encontró que el terrorismo era una herramienta útil contra la India en Cachemira. Pronto, incluso los políticos pakistaníes honestos descubrieron que no podían ser elegidos sin el apoyo de los extremistas. 

Sin embargo, si Pakistán está jugando de manera ambigua, también lo hace Estados Unidos. Primero, considerando la historia del narcotráfico de la CIA, no es descabellado sospechar que los "globalistas" estén usando la heroína afgana para financiar proyectos extraoficiales

En segundo lugar, muchas personas, entre ellas Hamid Karzai (el ex presidente afgano de 2011 a 2014) han afirmado que Estados Unidos está transportando a los combatientes del Estado Islámico (EI) a Afganistán y armándolos. El EI podría ser una herramienta del Estado Profundo para luchar contra los talibanes y desbaratar la Ruta de la Seda de China en Asia Central. La verdad sobre el EI se revela en mi libro: "Syria - War of Deception" ("Siria - Guerra de Engaño")

En tercer lugar, lo más importante es que Estados Unidos quiere quedarse en Afganistán por razones geopolíticas: para tener una presencia contra China, Rusia e Irán. Por lo tanto, a Estados Unidos no le interesa que Afganistán sea un país pacífico y estable. Mientras haya caos en Afganistán, hay una justificación para las bases militares estadounidenses. Es el clásico paradigma Problema - Reacción - Solución de problemas

Ahora llegamos a la verdadera razón detrás de la última disputa entre Estados Unidos y Pakistán: la rápida entrada de Pakistán en la órbita china. Bajo el CPEC (Corredor Económico China-Pakistán) China planea gastar 60 mil millones de dólares en varios proyectos de infraestructura en Pakistán. Ya ha construido centrales eléctricas y muchas carreteras, un aeropuerto y un puerto marítimo están en construcción en la ciudad de Gwadar para transformar la ciudad dormida en un vibrante centro comercial. Pakistán también acordó recientemente utilizar el yuan chino en lugar del dólar estadounidense en el comercio bilateral. 


Proyectos del CPEC en Gwadar, Pakistán.


Los "globalistas" occidentales consideran que todo esto es desagradable, pero el hecho que cruza la línea roja es que Pakistán proporcione a China acceso al Océano Índico. Como ven, Estados Unidos planeaba contener a China controlando el Mar del Sur de China y el punto forzoso de paso (el Estrecho de Malaca) a través del cual viajan la mayoría de las importaciones y exportaciones chinas. En el caso de un conflicto entre Estados Unidos y China, Estados Unidos puede fácilmente interrumpir la economía china bloqueando su ruta marítima. De hecho, hace sólo unos años, Estados Unidos y Australia realizaron ejercicios militares que simularon bloquear esos estrechos. 





Sin embargo, China está trabajando en dos rutas de escape: Pakistán y Birmania. Con oleoductos, autopistas, ferrocarriles y puertos marítimos, las importaciones y exportaciones chinas hacia/desde Europa y Medio Oriente pueden pronto evitar el temido estrecho. Estos atajos también reducirán significativamente el tiempo de envío.



Pakistán y Birmania - Rutas de escape para la ruta de la seda china.



Es por eso que tanto Birmania como Pakistán se han visto súbitamente bajo el fuego de Occidente. La crisis de los Rohingya tiene muchos vínculos con Arabia Saudí y el Estado Islámico. En cuanto a Pakistán, los globalistas occidentales han estado hablando abiertamente durante una década sobre la creación de un nuevo país llamado Baluchistán que también se apoderaría de tierras de Irán. Se sospecha que la India y Estados Unidos apoyan activamente a los separatistas de Baluchistán. Y no es una coincidencia que Baluchistán incluya a Gwadar, ¡el puerto marítimo estratégico en el que China está trabajando!





Las alianzas se consolidan ahora en el sur de Asia: EEUU + la India contra Pakistán + China. El divorcio entre EEUU y Pakistán se acelerará si China y Pakistán logran incluir a Afganistán en el CPEC. Con el tiempo, cuatro países (Rusia, China, Pakistán e Irán) intentarán expulsar a los militares estadounidenses de Afganistán

Lo único que los afganos han experimentado al alinearse con EEUU fue la guerra, la destrucción, las drogas y el caos. Durante la guerra soviética, 1,5 millones de afganos murieron y 5 millones se convirtieron en refugiados. Entre 1970 y 1978, la exportación de opio y heroína prácticamente no existía en Afganistán. Sin embargo, en 1984, la mitad de toda la heroína de Estados Unidos provenía de Afganistán. 

Otra droga perniciosa (de tipo espiritual) es el wahabismo que EEUU y Arabia Saudí introdujeron en la década de 1980 para reemplazar al Islam sufí moderado de Afganistán. 


Islam sufí moderado en Afganistán antes de 1979.



Cuando terminó la guerra, Estados Unidos abandonó abruptamente Afganistán, lo que llevó a que estalle una guerra civil en la nación. Estados Unidos solamente apareció en el país otra vez con la operación "fuego y furia", después del 11 de septiembre. Desde 2001, Estados Unidos sólo ha traído más inestabilidad y miseria. Afganistán es ahora tan inseguro que cuando funcionarios estadounidenses como Mattis y Tillerson visitan el país, ellos llegan sin previo aviso, vuelan de noche y se van rápidamente. 

Estados Unidos afirma haber gastado más de 100.000 millones de dólares en la reconstrucción de Afganistán, pero la mitad de la población no tiene acceso al agua potable y 1 de cada 5 niños afganos muere antes de cumplir los dos años. Occidente le dio un premio Nobel falso a Malala, mientras que el 80% de las niñas afganas son analfabetas. (Aquí hay un artículo excelente sobre cómo los contratistas militares privados han convertido a Afganistán en un pozo negro de sobornos y corrupción). 

Compare esto con los años 60, cuando la Unión Soviética construyó presas (como ésta y ésta), carreteras (como la autopista Salang Highway, una obra maestra de ingeniería), universidades, apartamentos y hospitales en Afganistán; y cuando los médicos, enfermeras y maestros rusos estaban ayudando a los afganos en zonas rurales remotas. 


No había talibanes ni haqqani, ni terrorismo islámico ni opio; y Kabul era conocido como el París de Asia Central

De manera similar, Pakistán solía ser un país seguro y moderado que visitaron los presidentes de Estados Unidos Eisenhower y Nixon, así como la primera dama Jackie Kennedy, hasta que Estados Unidos interfirió


Presidente Eisenhower y Jackie Kennedy en Pakistán.


Pakistán y Afganistán pueden revertir los errores de los últimos cuarenta años y esforzarse por crear un nuevo futuro de cooperación, paz y prosperidad. Ambos países necesitan abrazar la Ruta de la Seda de China y erradicar gradualmente el wahabismo (y recuperar su tradición de sufismo tolerante). Si Afganistán es inteligente, también expulsará educadamente las bases militares estadounidenses y adoptará una política exterior neutral y no alineada. En cuanto a EEUU, éste necesita abandonar su obsesión maquiavélica para gobernar todos los rincones del mundo y centrarse en la influencia a través de la prosperidad y el crecimiento compartidos.


Chris Kanthan
Sott.net.  marzo 2018


Artículos relacionados en este blog:

El opio, la CIA y la administración Karzai
Las extrañas finanzas de los “rebeldes sirios” (1)
Petróleo, origen de las guerras en el mundo... y la droga qué?
Nuevos informes revelan vínculos del Estado Islámico con el tráfico de drogas.

AddToAny