El pueblo sirio así como una gran parte de la Comunidad Internacional se sentía aliviado tras la intervención rusa en apoyo al legítimo gobierno de Siria, una ayuda contemplada dentro del marco del Derecho Internacional. Posteriores negociaciones entre las grandes potencias hacía presumir el fin de las hostilidades.
Pero, todo fue en
vano, salvo los verdaderos sirios que se revelaron contra el gobierno y quienes
si negocian y se acogen al plan de paz y a una tregua indefinida, el alto al
fuego ha fracasado. Existen decenas de agrupaciones terroristas, en el sentido
literal de la palabra, que se niegan a reconocer una Siria independiente y
laica. Tras estas agrupaciones genocidas, lamentablemente, se oculta la mano de
los Estados Unidos y su instrumento político-militar conocido como la OTAN
(NATO) y ese pequeño, pero belicoso estadito conocido como Israel hoy socio de
los terribles wahabíes del Golfo Pérsico.
Lamentablemente, el
fin del conflicto no llega, la lucha continuará, pero una cosa es segura, Siria
ya no podrá ser destruida como nación.
Con ustedes, la
décima entrega de la serie “La guerra siria vista por caricaturistas”