Los experimentos biológicos son crímenes de guerra. El artículo 8 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI) define los experimentos biológicos como crímenes de guerra.
Antes de examinar nuevamente el reportaje (extractado) debemos mencionar un hecho que está apareciendo en algunos medios internacionales sobre la guerra de Ucrania, no mencionamos medios rusos (están ya censurados y no se puede consultarlos en Europa), así que utilizamos otras fuentes. Es evidente que Rusia tiene objetivos secretos en la campaña ucraniana:
Evitar que fanáticos nacionalistas neonazis se apoderen de los centros de investigación biológica y nuclear manejados por los Estados Unidos en territorio ucraniano. De allí que Rusia ha tomado el control de la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa e impuso también bajo su resguardo la inactiva (y radioactiva) central nuclear de Chernóbil.
Los mandos rusos analizan presuntas evidencias de que las autoridades ucranianas habrían utilizado la planta nuclear de Chernóbil como tapadera para trabajar en la producción de bombas sucias, así como en la extracción de plutonio. El elevado fondo de radiación en la zona de Chernóbil facilitaría el encubrimiento, según fuentes extranjeras. Los rusos confirmaron que tomaron Chernóbil para prevenir una "provocación nuclear".
Fotografía de archivo. La estructura New Safe Confinement (NSC) sobre el antiguo sarcófago que cubre el cuarto reactor dañado en la planta de energía nuclear de Chernóbil.
Rusia ha preferido mantener algunos detalles delicados en reserva, más el acoso internacional le ha obligado -no como propaganda- sino como advertencia de que Ucrania habría iniciado su propio programa de desarrollo nuclear para fabricar armas sucias y atómicas. Ucrania no tiene los medios, ni la capacidad para hacerlo por sí sola. La hipótesis es que quien apoya esa iniciativa no puede ser más que el Pentágono, nótese que me refiero al aparato militar estadounidense, que suele manejarse solo, y no al gobierno de los Estados Unidos, mucho menos a su Congreso que debería aprobar tales políticas.
Antes de que se produjeran las hostilidades ya se corría en Europa el rumor (medios extranjeros) de que "en los últimos años, Ucrania ha intensificado la exploración de capas profundas en el territorio de las minas de uranio existentes, así como el desarrollo de prometedores depósitos de uranio, en particular en las regiones de Nikoláev, Dnepropetrovsk y Kirovograd".
También se ha afirmado que el actual gobierno de Ucrania obtuvo de empresas extranjeras asistencia para formar sus propias empresas de enriquecimiento de uranio y obtuvo plutonio de la calidad requerida de otros países para acelerar la investigación. Estados Unidos habría transferido también ese material a sus socios, las razones para creer que Washington está implicado puede sonar lógico.
Ucrania se ha empecinado, además, en modernizar sus misiles y fabricar nuevos sistemas de misiles para, quien sabe, en un futuro utilizarlas en el lanzamiento de armas nucleares. Repetimos, esos proyectos no son exclusivos, el gobierno de Kiev se ha valido del apoyo de otros países.
Sin ser alarmista, hace unos días el canciller ruso, Serguei Lavrov, acusó a Occidente de "elaborar un plan de guerra atómica en reacción a las recientes declaraciones de sus homólogos francés y británico, Jean-Yves Le Drian y Elizabeth Truss, respectivamente, sobre el riesgo de un conflicto nuclear desatado por Rusia".
Lo que si no es una hipótesis es el siguiente cuestionamiento que se hace Lance D. Johnson (Natural News) en un corto artículo titulado: "Why did the US embassy official website just REMOVE all evidence of Ukrainian bioweapons labs?", en cristiano: "¿Por qué el sitio web oficial de la embajada de EE.UU. simplemente ELIMINÓ toda evidencia de laboratorios de armas biológicas ucranianos?", publicado el 2 de marzo 2022.
Así es, sin más el sitio web oficial de la embajada de Estados Unidos suprimió en días pasados toda evidencia de laboratorios biológicos en Ucrania. Estos laboratorios biológicos son financiados y operados conjuntamente con el Departamento de Defensa de los Estados Unidos. Algunos documentos de esos laboratorios eran de conocimiento público hasta fines de febrero de 2022, incluían detalles importantes sobre laboratorios de armas biológicas en Ucrania. Al borrarse esa información crítica se oculta programas que no deberían haber sido hechos públicos y que pueden demostrar su complicidad con potenciales acciones provocadoras del gobierno ucraniano. El autor del reporte señala que "la población mundial se está dando cuenta de la realidad de la investigación de armas biológicas de ganancia de función, las filtraciones de laboratorio y el desarrollo de vacunas y diagnósticos depredadores. Estos bio-laboratorios generan patógenos con potencial pandémico que explotan el sistema inmunitario humano y son la base sobre la que se origina el fraude médico, la mala praxis, la muerte inducida por vacunas y el genocidio".
¿Podría la existencia de estos laboratorios de armas biológicas tener algo que ver con la "misión militar especial" de Rusia? Durante años, Rusia ha acusado a Estados Unidos de desarrollar armas biológicas cerca de sus fronteras.
- ¿Están los rusos actualmente reuniendo pruebas de estos laboratorios?
- ¿Cuál es el estado actual de estas instalaciones?
- ¿Qué pasaría si Rusia no estuviera llevando a cabo una invasión y ocupación de Ucrania, una realidad que ha sido propagada por los medios de comunicación occidentales?
- ¿Qué pasaría si, en cambio, Rusia estuviera apuntando a los sindicatos del crimen internacional y persiguiendo a elementos criminales en el gobierno ucraniano que han dañado al pueblo ucraniano y a otros en todo el mundo?
El Departamento de Defensa de Estados Unidos (Pentágono) financió al menos 15 laboratorios biológicos diferentes en Ucrania. Estos no son laboratorios biológicos chinos o rusos. Al menos ocho de estos son laboratorios de armas biológicas operados exclusivamente por los Estados Unidos. Estos laboratorios “consolidan y aseguran patógenos y toxinas de interés para la seguridad” para llevar a cabo “medidas mejoradas de bioseguridad, bioseguridad y biovigilancia” a través de “asociaciones internacionales de investigación”. El Pentágono facilitó el proceso de permisos para permitir que los científicos ucranianos trabajaran con patógenos de potencial pandémico.
El Departamento de Defensa de EE.UU. -El Pentágono- trabaja directamente con el Ministerio de Salud de Ucrania, el Servicio Estatal de Ucrania para la Seguridad Alimentaria y la Protección del Consumidor, la Academia Nacional de Ciencias Agrarias y el Ministerio de Defensa. Esta red de laboratorios biológicos incluye instalaciones en Odessa, Vinnytsia, Uzhgorod, Lviv, Kiev, Kherson, Ternopil, Crimea, Luhansk y dos instalaciones sospechosas en Kharkiv y Mykolaiv.
En los últimos años, muchos de estos laboratorios han alcanzado el nivel de bioseguridad 2, lo que permite a los científicos experimentar con virus y bacterias. En los últimos dos años, estos laboratorios, en cooperación con el Ministerio de Defensa de Ucrania, instalaron cuatro laboratorios móviles más para realizar la vigilancia epidemiológica del pueblo ucraniano. No hay razones para sospechar dirán algunos si se hacía público.
El 26 de febrero de 2022, la existencia y los detalles de estos laboratorios de armas biológicas fueron eliminados del sitio web oficial de la embajada. Los archivos PDF han sido copiados por otros medios y podrán estar disponibles en cualquier momento. "¿Qué está tratando de ocultar la embajada de los Estados Unidos?", termina preguntándose Lance D. Johnson
El ejército estadounidense produce regularmente virus, bacterias y toxinas mortales en violación directa de la Convención de la ONU sobre la prohibición de armas biológicas. Cientos de miles de personas inadvertidas están siendo expuestas sistemáticamente a patógenos peligrosos y otras enfermedades incurables.
- Laboratorios biológicos del Pentágono diseminan enfermedades en Ucrania.
Según el Acuerdo de 2005 entre el Departamento de Defensa de Estados Unidos y el Ministerio de Salud de Ucrania, el gobierno ucraniano tiene prohibido divulgar públicamente información confidencial sobre el programa de Estados Unidos y Ucrania está obligada a transferir al Departamento de Defensa de Estados Unidos patógenos peligrosos para la investigación biológica. Se ha concedido al Pentágono acceso a determinados secretos de Estado de Ucrania en relación con los proyectos en el marco de su acuerdo:
- 364 ucranianos murieron a causa de la gripe porcina.
Según información de inteligencia de la República Popular de Donetsk, el laboratorio biológico estadounidense en Kharkiv hizo que el virus mortal se filtrara.
Black & Veatch Special Project Corp. obtuvo contratos de la DTRA por un valor de 198,7 millones de dólares para construir y operar laboratorios biológicos en Ucrania (menos de dos contratos a 5 años en 2008 y 2012 por un total de 128,5 millones de dólares).
En 2017, el Ministerio de Salud de Ucrania confirmó otros 90 nuevos casos, con 8 muertes, de intoxicación por la toxina botulínica (una de las sustancias biológicas más venenosas conocidas). Según las autoridades sanitarias locales, la causa del brote fue la intoxicación alimentaria y la policía inició una investigación sobre la misma.
El botulismo es una enfermedad rara y extremadamente peligrosa causada por una toxina producida por la bacteria Clostridium botulinum. 1 gm de la toxina puede matar hasta 1 millón de personas.
La neurotoxina botulínica representa una importante amenaza para las armas biológicas debido a su extrema potencia, facilidad de producción y transporte. Causa parálisis muscular, insuficiencia respiratoria y finalmente la muerte si no se trata de inmediato. Un solo gramo de toxina cristalina, uniformemente dispersada e inhalada, puede matar a más de un millón de personas. Podría diseminarse a través de aerosoles, o por contaminación del agua y/o suministro de alimentos.
Fuente original en inglés:
THE PENTAGON BIO-WEAPONS
SOUTH FRONT (En el artículo original existen decenas de enlaces que comprueban los enunciados de la autora).