Por Tito Andino U.
Como resaltamos en la anterior entrega, la República Árabe Siria desde marzo del 2011 ha venido siendo blanco del terrorismo internacional a través de organizaciones armadas de tipo fundamentalista, equipadas con un aparato logístico nada envidiable en cualquier ejército nacional, con suficientes recursos financieros para pagar salarios a sus militantes y brindar cobertura médica en otros países a sus combatientes heridos. Todo un lujo para un grupo de revolucionarios “espontáneos".
Siria es un objetivo militar declarado por los Estados Unidos, como mínimo desde inicios del siglo XXI, la OTAN, Israel y las Monarquías del Golfo no son más que instrumentos de ese plan. Para esa meta se desarrolló una política desestabilizadora en Medio Oriente conocida como “la primavera árabe” que no es otra cosa que la punta de lanza de esa invasión de falsos “rebeldes” sirios (organizaciones internacionales de mercenarios, terroristas y yihadistas, apoyados por algunos miles de sirios). Acusaciones de crímenes de guerra contra el gobierno de Siria se han presentado desde el momento mismo de la invasión mercenaria, desde el uso de armas prohibidas como las armas químicas, hasta la tortura de “miles de inocentes sirios”. Dada la magnitud del tema solamente aludiremos que ninguna de esas acusaciones han podido ser probadas ni por la “oposición siria”, ni por las organizaciones humanitarias internacionales que sobre el terreno laboran en Siria, ni mucho menos por las grandes potencias occidentales, a través de la OTAN, que buscan y siguen añorando encontrar el pretexto para destruir al estado sirio. En esta entrega, traeré a la memoria el exclusivo caso de los supuestos “crímenes de guerra y contra la humanidad” del “régimen” sirio. Todas acusaciones nacidas de la calumnia para embrutecer a la opinión pública internacional.
Alguien recuerda el siguiente episodio? Seguramente algunos si; y, para quienes desconocían este hecho, lo siguiente fue presentado en un informe escrito, montándose el típico show mediático a nivel internacional en medios como New York Times, The Guardian, CNN y otras grandes cadenas informativas (o desinformativas?).
QUIÉN ES “CÉSAR”?
Según un “documento” internacional aparecido en enero del 2014, “César”, fue un supuesto informante que rumoró una información, no verificada por ninguna instancia con autoridad legal. Si la supuesta denuncia fue un bulo propagandístico o no, ha sido imposible comprobarla porque ni el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ni otra organización ha insistido en tratar el tema. En su tiempo fue más una acción proselitista de apoyo a los supuestos “rebeldes” que luchan contra el gobierno legítimo de Siria.
Dada la magnitud de la acusación y la escasa acogida (salvo el escándalo de una de las partes interesadas en sembrar discordia) para una investigación seria, profunda e imparcial a nivel internacional, se podría colegir que la denuncia de un anónimo personaje denominado “César” fue un bulo más de los tantos que se esparcían (y siguen divulgándose) sobre “miles y miles de ciudadanos sirios torturados y asesinados por el régimen”.
“César”, sería nada menos y nada más que un desertor del Ejército Árabe Sirio, que habría “huido” (desertado) y que, supuestamente, se llevó consigo alrededor de cincuenta mil fotografías de “víctimas del régimen sirio”, “fotografías” tomadas por este personaje, según las denuncias patrocinadas por una petromonarquía wahabí.
Los supuestos crímenes de guerra
Como resaltamos en la anterior entrega, la República Árabe Siria desde marzo del 2011 ha venido siendo blanco del terrorismo internacional a través de organizaciones armadas de tipo fundamentalista, equipadas con un aparato logístico nada envidiable en cualquier ejército nacional, con suficientes recursos financieros para pagar salarios a sus militantes y brindar cobertura médica en otros países a sus combatientes heridos. Todo un lujo para un grupo de revolucionarios “espontáneos".
Siria es un objetivo militar declarado por los Estados Unidos, como mínimo desde inicios del siglo XXI, la OTAN, Israel y las Monarquías del Golfo no son más que instrumentos de ese plan. Para esa meta se desarrolló una política desestabilizadora en Medio Oriente conocida como “la primavera árabe” que no es otra cosa que la punta de lanza de esa invasión de falsos “rebeldes” sirios (organizaciones internacionales de mercenarios, terroristas y yihadistas, apoyados por algunos miles de sirios). Acusaciones de crímenes de guerra contra el gobierno de Siria se han presentado desde el momento mismo de la invasión mercenaria, desde el uso de armas prohibidas como las armas químicas, hasta la tortura de “miles de inocentes sirios”. Dada la magnitud del tema solamente aludiremos que ninguna de esas acusaciones han podido ser probadas ni por la “oposición siria”, ni por las organizaciones humanitarias internacionales que sobre el terreno laboran en Siria, ni mucho menos por las grandes potencias occidentales, a través de la OTAN, que buscan y siguen añorando encontrar el pretexto para destruir al estado sirio. En esta entrega, traeré a la memoria el exclusivo caso de los supuestos “crímenes de guerra y contra la humanidad” del “régimen” sirio. Todas acusaciones nacidas de la calumnia para embrutecer a la opinión pública internacional.
“CESAR” y los “millares de ciudadanos sirios torturados y asesinados por el régimen”
Partamos desde el principio.
Alguien recuerda el siguiente episodio? Seguramente algunos si; y, para quienes desconocían este hecho, lo siguiente fue presentado en un informe escrito, montándose el típico show mediático a nivel internacional en medios como New York Times, The Guardian, CNN y otras grandes cadenas informativas (o desinformativas?).
QUIÉN ES “CÉSAR”?
Según un “documento” internacional aparecido en enero del 2014, “César”, fue un supuesto informante que rumoró una información, no verificada por ninguna instancia con autoridad legal. Si la supuesta denuncia fue un bulo propagandístico o no, ha sido imposible comprobarla porque ni el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ni otra organización ha insistido en tratar el tema. En su tiempo fue más una acción proselitista de apoyo a los supuestos “rebeldes” que luchan contra el gobierno legítimo de Siria.
Dada la magnitud de la acusación y la escasa acogida (salvo el escándalo de una de las partes interesadas en sembrar discordia) para una investigación seria, profunda e imparcial a nivel internacional, se podría colegir que la denuncia de un anónimo personaje denominado “César” fue un bulo más de los tantos que se esparcían (y siguen divulgándose) sobre “miles y miles de ciudadanos sirios torturados y asesinados por el régimen”.
“César”, sería nada menos y nada más que un desertor del Ejército Árabe Sirio, que habría “huido” (desertado) y que, supuestamente, se llevó consigo alrededor de cincuenta mil fotografías de “víctimas del régimen sirio”, “fotografías” tomadas por este personaje, según las denuncias patrocinadas por una petromonarquía wahabí.
“César” alegaba ser un oficial de la policía
militar siria a cargo de la realización de fotos en las escenas de los
crímenes. “César” afirmó haber fotografiado las víctimas del “régimen” en las
morgues de diferentes hospitales militares, desde el inicio del conflicto
sirio, antes de desertar –según dice– a finales de 2013.
Se dice que "César", al momento de
“desertar”, pudo sacar las imágenes de Siria en una tarjeta de memoria y se las
habría entregado a un contacto de los “rebeldes” apoyados por Qatar.
Según un “informe” elaborado por CONTRATO por la
firma de Abogados londinenses ‘Carter-Ruck’ – pactada con Qatar- se afirma que “César”
entregó a la firma 55.000 fotografías de 11.000 cadáveres, fotos que dice haber realizado personalmente.
Acusaciones de este tipo han sido frecuentemente
relucidas más en tono propagandístico que en forma de una denuncia formal. Lamentable organizaciones humanitarias como Human
Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI), se han prestado, sin tener
fundamento legal ni prueba material, a denunciar en ocasiones anteriores casos
de presuntas violaciones de los derechos humanos en el conflicto que asola
Siria.
(NOTA:
No seré yo quien intente ocultar información. De diversas fuentes se ha
confirmado muchos casos de abusos y tortura de las fuerzas de seguridad de
Damasco; mas, acusar de miles de asesinatos masivos y selectivos (genocidio) al
gobierno, es algo que esperaré sentado puerilmente. Lo que si debería ser
inadmisible, para los medios de desinformación masiva a nivel global, es que
pretendan ignorar y ocultar la existencia de cárceles secretas de la “oposición”
y, peor aun, de los centros de tortura, de secuestro, de esclavitud, de tráfico
de drogas y de asesinato sistemático de los grupos yihadistas en contra de los
ciudadanos y minorías religiosas dentro de Siria).
Ya adelantamos que el “informe” que podrán leer (en inglés como nota de pie de página) fue contratado para su redacción por la Monarquía Absolutista de Qatar y encargado a una firma de Abogados de Londres ‘Carter-Ruck’ (pueden revisar las especialidades legales de la firma en www.carter-ruck.com).
Luego, con las conclusiones de los abogados, se remitió al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas un documento. Navy Pillay, del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR, por sus siglas en inglés) fue la más entusiasta impulsadora de la causa, que hoy duerme en el olvido.
Qatar es miembro del selecto “club de amigos de Siria” (léase enemigos de Siria). Cuál es el interés de los wahabíes qataríes? Por qué los qataríes constan entre los principales financistas y proveedores de armas de las organizaciones yihadistas wahabíes que operan en Siria?
QUIÉN ELABORÓ EL INFORME DE “LAS MILES DE VÍCTIMAS FOTOGRAFIADAS”?
Ya adelantamos que el “informe” que podrán leer (en inglés como nota de pie de página) fue contratado para su redacción por la Monarquía Absolutista de Qatar y encargado a una firma de Abogados de Londres ‘Carter-Ruck’ (pueden revisar las especialidades legales de la firma en www.carter-ruck.com).
Luego, con las conclusiones de los abogados, se remitió al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas un documento. Navy Pillay, del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR, por sus siglas en inglés) fue la más entusiasta impulsadora de la causa, que hoy duerme en el olvido.
Qatar? y abogados de Londres contratados?, les dice algo la simple intuición?.
Qatar es miembro del selecto “club de amigos de Siria” (léase enemigos de Siria). Cuál es el interés de los wahabíes qataríes? Por qué los qataríes constan entre los principales financistas y proveedores de armas de las organizaciones yihadistas wahabíes que operan en Siria?
Desde aquí, no me cabe duda que estamos frente a un burdo montaje propagandístico ordenado por Qatar para acusar al Ejército Árabe Sirio y, naturalmente, al presidente sirio Bashar Al Assad, de ser responsables del asesinato de miles de personas.
El “informe”, elaborado a partir de las “declaraciones” de “César”, fue uno de los primeros preludios (al igual que el posterior montaje del supuesto uso de armas químicas por parte de las tropas de Bashar Al Assad) para tener el pretexto de una intervención armada internacional encabezada por USA/OTAN.
La firma de Abogados de Londres ‘Carter-Ruck’ y su acusación contra Siria.
Carter–Ruck, es la firma de abogados londinenses CONTRATADA
para elaborar un informe que acuse al “régimen
sirio actual” de crímenes de guerra y de crímenes contra la humanidad. El informe
coincide a escasos dos días de la
celebración de la Conferencia de Paz ‘Ginebra 2’, un verdadero show informativo
para inclinar la mesa de negociaciones en favor de una parte, evidentemente.
En la página 6 del informe, se afirma que “César”
fue entrevistado por los abogados de Carter-Ruck entre el 12 y 18 de enero del
2014. Con una insólita rapidez el “informe” estaba listo y disponible para los
medios de desinformación masiva el 20 de enero. Sin duda, esta hazaña
“investigativa” deberá constar como record mundial en la redacción de informes
jurídicos luego de “analizar” 55.000 fotografías y todo esto con respaldo,
además, de la medicina forense!.
La firma Carter-Ruck contrató los servicios de
tres ex fiscales internacionales: A saber: El Honorable Sir Desmond Lorenz de
Silva, el profesor Sir Geoffrey Nice y el profesor David M. Crane. Su trabajo
fue examinar el testimonio de “Cesar” y analizar las pruebas presentadas por
éste.
Quiénes son estos ex fiscales internacionales?
“Sir Geoffrey Nice realizó la hazaña de investigar y acusar durante dos años al ex dirigente serbio Slobodan Milosevic sin aportar nunca la menor prueba sobre los supuestos crímenes contra la humanidad que le imputaba. El juicio contra Milosevic fue suspendido después de la muerte del acusado, cuando este se hallaba bajo custodia de la justicia internacional.
Sir Desmond Lorenz de Silva es el autor, a pedido del primer ministro británico, de un informe sobre la muerte de un abogado irlandés, informe que la familia de la víctima calificó simple y llanamente de «vergüenza». Dicho informe reconocía la responsabilidad de las autoridades –responsabilidad que ya era innegable sin el informe– pero escamoteaba las pruebas contra los dirigentes implicados.
David M. Crane es un ex responsable de la CIA y de la Agencia de Inteligencia del Departamento de Defensa estadounidense (DIA, según sus siglas en inglés) y desde el inicio de la guerra contra Siria dirige un programa tendiente a acusar al presidente sirio Bachar al-Assad ante una corte especial internacional”. (datos tomados de la Red Voltaire)
(Los dos últimos fueron también fiscales del Tribunal Especial para Sierra Leona, que
procesó al presidente Charles Taylor de Liberia). Sin duda, la aparición de
estos nombres como responsables directos del informe debió proporcionar a los
propagandísticas un aire de victoria contra el “régimen” sirio. Pero las cosas
no resultan siempre como alguien anhela…
Qué dice el mentado “informe”?
Los ex fiscales dicen haberse trasladado a Oriente Medio para mantener una entrevista con “César”. Luego de ese encuentro, afirmarían, que la fuente es fiable y que el hombre es quien dice ser. Según "César" su trabajo en la policía militar consistía en "tomar fotografías de detenidos muertos" (en son irónico, del cadáver muerto del difunto que ya falleció). Afirma el “informe” que “César” nunca fue testigo directo de ejecuciones o torturas. Lo único que podría desprenderse de esto es que “César” no tenía ni idea de donde salían los “detenidos muertos”.
Básicamente el informe dice:
- “César”, en su condición de oficial de la policía militar siria era el encargado de fotografiar las escenas del crimen.
- “César” afirmó que sus fotografías son de víctimas del “régimen”, instantáneas tomadas en las morgues de diferentes hospitales militares.
- Dichas fotografías habrían –supuestamente- sido tomadas desde el inicio del conflicto (2011) y antes de desertar (fines 2013).
- La firma Carter-Ruck asegura que “César” les ha entregado 55.000 fotografías digitales que corresponden a 11.000 cadáveres.
- la firma de abogados dice que 5.500 fotografías fueron “analizadas” por expertos forenses y en imagen digital que confirman que no eran alteradas.
- “César”, según el “informe”, dice haber personalmente tomado esas fotografías.
En el informe, siguiendo la declaración del tal
“César”, los detenidos eran ejecutados en el lugar que estaban privados de la
libertad, luego de su ejecución los cuerpos eran trasladados a un hospital
militar, allí “César” tenía como tarea fotografiarlos. El informe señala que: "Podía
haber hasta 50 cuerpos por día para fotografiar, que requerían un trabajo de 15
a 30 minutos por cuerpo".
También, siempre citando el “informe”, a los
cuerpos se les asignaba dos números. Las fotografías “garantizaban” emitir un
certificado de defunción para que los familiares no vean los cadáveres; y, para
demostrar que las órdenes de ejecución se habían cumplido. Solo los servicios
de inteligencia conocían la identidad de las víctimas. Las familias de los
fallecidos eran informadas de su deceso por "ataque cardíaco" o
"problemas respiratorios". Los cuerpos eran enterrados en un área
rural.
La Red Voltaire afirma:
“Basándose en esas imágenes y sin poder verificar ni el origen de las fotos, ni la identidad de los cuerpos que aparecen en ellas, la firma londinense de abogados llega a la conclusión de que el “régimen” torturó y privó sistemáticamente de alimentación a las “personas encarceladas”.
La firma Carter-Ruck acuñó cada página de su
informe público con una doble mención de «Confidencial».
Objetivo final del “informe”:
Como ya queda claro, los redactores afirman que
el documento es la “prueba” de las torturas por parte del gobierno sirio, que
podrán ser reconocidas por un tribunal de crímenes de guerra o de crímenes
contra la humanidad.
El ex fiscal Desmond de Silva declaró a “The
Guardian” que las imágenes "documentan matanzas a escala industrial".
Otros hechos más a citar:
REFLEXIÓN: Algo que a estas alturas ya debe estar claro:
- Con esa dudosa, por no decir falsa información, se pretendía obtener una declaración internacional de que el “régimen” de Damasco tortura y asesina a los ciudadanos sirios;
- Consecuentemente, se solicitaría al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ordenar la “intervención militar internacional humanitaria” con tropas de la OTAN para “resguardar” y “proteger” a los inocentes ciudadanos sirios que están siendo asesinados por el “tirano”;
- Lo que equivale a decir: Desencadenar el bombardeo e invasión de Siria por parte de los Estados Unidos y la OTAN;
- Apoyar a sus tropas sobre el terreno, es decir, a los “rebeldes moderados” (según la versión rosa USA);
- Para mejor comprensión del lector, ayudar a la caballería e infantería de la OTAN/Israel/Monarquías del Golfo: Yihadistas, islamistas, mercenarios y demás bandas armadas terroristas, arropadas bajo diferentes etiquetas, según el auspiciante internacional de cada grupo.
REFLEXIÓN: Algo que a estas alturas ya debe estar claro:
No existe constancia de ninguna investigación independiente, ni datos que permitan contrastar tan graves acusaciones, ni nada que suponga un mínimo de seriedad en lo que fue otro burdo montaje contra el gobierno sirio.
Una
coincidencia?
El oportuno “informe” se presentó el día 20 de
enero de 2014, justo dos días antes de la apertura de la Conferencia de Paz
sobre Siria, denominada “Ginebra 2”. Por razones de propaganda sirvió para que
la “oposición” siria (Coalición Nacional de Fuerzas Opositoras –CNFROS-), con
las “nuevas pruebas” presione a la Comunidad Internacional para que Bashar Al
Assad abandone el poder.
En el debido momento, los medios de
desinformación masiva a nivel internacional se encargaron de echar más leña al
fuego en la crisis siria. Con semejante “denuncia” que llegó a las Naciones
Unidas, cómo no podía reaccionar la opinión pública mundial pidiendo sanciones
contra el gobierno de Damasco?.
Este gran fraude mediático, así como fue divulgado en su tiempo, hoy guarda eterno silencio. Naturalmente que ese mutismo se debe al estruendoso fracaso por vender esa “noticia”.
Más, este, al igual que otros complots contra
Siria, murió por su propia boca. Una simple razón:
NO SE PUEDE DEMOSTRAR LO INEXISTENTE.
INCONSISTENCIAS del “informe”
- “Cesar” no explica la razón del por qué el “régimen sirio actual” se tomó la molestia de transportar y fotografiar los cuerpos de sus víctimas a morgues de hospitales militares.
- Ni “Cesar”, ni los abogados, ni el Consejo de Seguridad tienen una hipótesis del por qué el gobierno sirio se dedicó a tomar fotografías y transportar por millares los cuerpos de sus “victimas”; salvo, claro es, que dentro de un lógico procedimiento forense se proceda a realizar el levantamiento de cadáveres.
- Es físicamente imposible que un solo oficial de policía militar haya podido fotografiar 11.000 cadáveres, él solo.
- En otra versión, ante lo inverosímil del “informe” de que “César” haya podido, él solo, fotografiar 11.000 cadáveres, se dijo que fue con ayuda de su equipo…
- Ni el opositor ‘Observatorio Sirio de Derechos Humanos’, con sede en Londres, órgano de propaganda de la “oposición siria”, que maneja estadísticas de bajas en la guerra, afirma que este hecho sea verdad.
- Es esclarecedor, como interesante, que los abogados londinenses –en posesión de una bomba mediática- que podría hacer sucumbir al “régimen“ sirio en cuestión de horas, no haya hecho públicas las decenas de miles de fotografías que dice tener.
- La firma ha remitido un “informe” a las Naciones Unidas, en que se aprecia únicamente 10 fotos de las 55.000 que supuestamente utilizó para redactar su informe.
- En qué tiempo y lugar pudo la firma de abogados “analizar” 5.500 fotografías con la ayuda de expertos en imagen digital que “confirmaron” que no eran alteradas?.
- De las únicas 10 fotografías presentadas en el “informe”, en ninguna se puede hacer ningún tipo de identificación.
- Conservar en el anonimato a “César” es una demostración que estamos ante otro complot, una trama mal ensamblada. La razón?.
- Resulta una bofetada al sentido común que un servicio de inteligencia como el sirio desconozca el verdadero nombre de un presunto desertor. “Presunto desertor”, según los abogados de Londres, que supuestamente tenía como única tarea –en exclusiva- la de fotografiar, durante largos meses, miles de “detenidos muertos”.
- No se necesita ser inteligente para deducir que, de existir el tal “César”, los servicios de inteligencia y seguridad del estado sirio sabrían quién es. Y podrían fácilmente desenmascararlo como un vulgar embustero.
- Qué otro sentido tendría mantener a César en el anonimato?. Su sola presencia física y exhibiendo las “pruebas” que “posee”, haría que, él solo, pueda producir una verdadera revuelta dentro de Siria. Entonces, ¿qué sentido tiene mantener el anonimato?
- El mismo gobierno sirio ha dedicado con mucho detalle, a lo largo de la guerra de agresión que sufre, a través de su prensa, con videos y otros elementos, a difundir imágenes de las cantidades de insurgentes que elimina en combate cada día.
Otros detalles sobre la inconsistencia del “informe”
Según la Red Voltaire:
- Las acusaciones de Carter-Ruck son como mínimo sorprendentes ya que no existe en Siria un sistema centralizado para el tratamiento de los casos legales.
- El Ejército Árabe Sirio ni siquiera es capaz de determinar el número exacto de yihadistas eliminados en combate porque es imposible.
- Carter-Ruck se negó, en un principio, a revelar el nombre del cliente que encargó y pagó la elaboración del informe.
- Posteriormente, Carter-Ruck reconoce haber elaborado el informe por encargo del Emirato de Qatar, que esperaba evitar verse obligado a responder por las numerosas operaciones de propaganda montadas por su canal de televisión al-Jazeera.
Una conclusión de “Red Voltaire” es que
“lo más bochornoso es comprobar como la mayor parte de los medios de comunicación occidentales, sumisos a las instrucciones de sus amos, dan una ciega credibilidad a este montaje, mientras ocultan sibilinamente el dictamen de los científicos estadounidenses demostrando la no participación del Ejército sirio en los ataques químicos…”.
APÉNDICE 1
EL REPORTE COMPLETO (documento en PDF, en
inglés):
"A Report into the credibility of certain evidence with regard to
Torture and Execution of Persons Incarcerated by the current Syrian
regime", por Carter-Ruck, 20 de enero de 2014.
SYRIA REPORT ↢ (enlace aquí)
APÉNDICE 2
CRIMENES DE GUERRA CONTRA EL PUEBLO SIRIO
Un caso real reportado
Como curiosidad les dejo un verdadero reporte sobre crímenes de guerra en Siria, elaborado por dos organizaciones turcas!.
Estas asociaciones turcas publicaron, en diciembre
2013, un informe de 38 páginas (ver texto en el enlace de abajo) sobre los
crímenes de guerra contra el pueblo sirio. El reporte nace, según los autores,
con los incidentes en Deraa, en el denominado “Día de la cólera”, organizado
por la “oposición” siria (organizaciones yihadistas al servicio de las
potencias tantas veces enunciadas) contra el gobierno legítimo de la República
Ärabe Siria y en especial contra el Presidente Bashar Al Assad.
Según este estudio turco la sedición perdió todo
sentido después del referéndum Constitucional de febrero de 2012, en que se
confirió a todos los habitantes de Siria muchos más derechos de los habían
reclamado.
El análisis concuerda que existe una profunda implicación
de los Estados Unidos, Arabia Saudita, Qatar, Israel, y sobre todo de Turquía. Es
de resaltar que este documento no aborda la intrusión francesa y británica. Se
concluye acusando a los estados mencionados como los causantes de la crisis y
aprovecharse de ella con el objetivo de destruir Siria. También aborda una observación
con las acciones jurídicas que deberán emprenderse y las que han sido
denunciadas a nivel internacional.
WAR CRIMES COMMITTED AGAINST THE PEOPLE OF SYRIA. ↢ (enlace aquí)
FUENTES DE CONSULTA